Nunca fuiste alguien que llamase la atención de los demás.
Muy pocos son los que se acercan a ti.
Pero has tenido la suerte, o desgracia, de atrapar la mirada de un muchacho de tu escuela.
Sus ojos solo se posaban en ti.
Los tuyos deberían hacer lo...
Estabas viendo las fotos de Tendou de pequeño, buscando algún sentido a su actual actitud, cuando escuchaste la puerta abrirse y viste al pelirrojo entrar.
-"Regresé~"
-"No tenías práctica hoy?"
-"Si~ pero me dejaron regresar antes!"
Dijo para sentarse rápidamente frente a ti y atraparte entre sus brazos, para luego apoyar su cabeza en tu cuello, palmeaste su espalda, el suspiro satisfecho por el contacto.
-"No tienes idea de cuanto te extrañe..."
No dijiste nada ante su comentario, el se separó un poco y te observó.
-"Estas muy callada"
-"No sé que quieres que te diga..."
-"Algo dulce, como solías hacer"
Apretaste tus labios y miraste a un lado buscando algunas palabras, eso hizo entristecer a Tendou.
-"Antes no tenías que pensarlo tanto..."
-"Antes había olvidado que eras un psicópata"
Tapaste tu boca por las palabras que habías soltado.
Mierda. Porqué abres la boca cuando no debes (T/n).
Él sonrió, pero está vez con malicia, apretó tu mejillas con algo de fuerza.
-"Aw~ eso piensas de mi? Que soy un psicópata? Hablas como si supieras una mierda de mi"
Tus mejillas ya dolían por la cantidad de fuerza que él estaba aplicando en las mismas.
-"Sabes? Hoy Goshiki se enfadó conmigo porque según el no le daba importancia a tu desaparición, oh el pobre realmente cayó en tus pequeños encantos, no es así?"
Tu mirada ahora se llenó de preocupación.
-"Eso me molestó demasiado...él sabe que estás conmigo...y aún así mete su nariz donde no debe..."
-"Satori"
-"Además él...un momento..."
Él soltó tus mejillas y te quedó mirando, su rostro se relajo y una pequeña sonrisa se formó en sus labios.
-"Me dijiste por mi nombre! Oh! Nunca me habías llamado así! Suena tan bien cuando lo dices! Dilo de nuevo!"
-"Satori cálmate, estás muy emocionado"
Tomaste sus manos y eso lo hizo emocionarse incluso aún más.
-"Tengo hambre, podrías traerme algo? Las galletas que me dejaste no fueron suficientes, y luego podemos jugar a algo juntos, qué te parece?"
Él se limitó a asentir con rapidez para luego salir del sótano en búsqueda de comida. Escuchaste el sonido de las llaves en su bolsillo por los movimientos.
Si tan solo tuviese una chance de quitarle las llaves...
Quizás si...
Abrazaste tu cuerpo por el simple hecho de pensar en esa acción.
Pensaré en otra manera...
Viste a Tendou llegar con dos tazones de ramen, se sentó a tu lado y te dio uno de los mismos, lo tomaste y empezaste a comer.
-"A qué te gustaría jugar?"
-"Sabes jugar al ajedrez?"
-"Sip!"
-"Entonces jugaremos a eso"
Dijiste para seguir comiendo. Sentiste la mirada de Tendou sobre ti todo el tiempo. Te sentiste algo incómoda por la misma.
Una vez ambos habían terminado de comer se dispusieron a jugar.
Tenías que admitir que los rostros que hacia Tendou antes de hacer un movimiento eran bastante divertidas, realmente pensaba muchísimo sus jugadas. Por eso también perdiste contra él.
Hicieron una segunda partida, estabas pensando tu próxima jugada cuando sentiste que él jalo un poco tu camisa mirando la.
-"Deberías darte una ducha y cambiarte... Te daré algo de ropa"
-"Oh, okay"
Alejaste su mano de tu ropa y siguieron jugando, volviste a perder contra él, bufaste y te levantaste.
-"Iré a bañarme"
-"Te preparare algo de ropa"
Asentiste y fuiste al baño, cerraste la puerta y comenzaste a desvestirte. Te adentraste en la ducha y encendiste el agua caliente, mirabas la bañera y no podías evitar visualizarla con la sangre que habías visto aquel día, un escalofrío recorrió tu espalda.
Sacudiste tu cabeza y te colocaste bajo la lluvia de agua caliente, suspiraste por la sensación del agua cayendo en tu cuerpo.
Al cabo de unos minutos ya habías acabado, enrollaste una toalla en tu cuerpo y saliste de allí, observaste a Tendou que estaba sentado mirando la pared.
-"La ropa está en el colchón! Creo que es de tu talla"
Tomaste el vestido, junto con la ropa interior que había a su lado, miraste a Tendou sin confiar en que se quedaría mirando la pared mientras te cambiabas, tomaste todo y regresaste al baño para cambiarte.
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Es lindo el vestido...
Pensaste mientras te mirabas en el espejo, era un poco ajustado pero de todas formas podias utilizarlo sin incomodidades mayores, saliste de nuevo viendo al pelirrojo ahora sentado en el colchón, dirigió su mirada hacia a ti y sus mejillas se pusieron rosadas.
-"Wow..."
-"No digas nada"
Le tiraste la toalla a la cara y el rio. Tendou era de esas personas que podía soltar un comentario pervertido cuando la situación le daba la oportunidad.
-"Te queda muy bien"
-"Gracias"
-"Se vería también muy bien en el sue--"
Antes de que pudiese terminar la frase le tiraste tu camisa a la cara.
