Era una tarde de Enero, hacía un frío de muerte, la niebla era muy espesa. Carlos caminaba por la calle principal de la ciudad, en medio de la niebla avanzaba muy lentamente con la cabeza baja, su rostro mostraba tristeza, estaba tan concentrado en sus pensamientos que no se dio cuenta que casi lo atropellan al cruzar la calle.
Y caminó, caminó sin rumbo fijo.
De pronto un cuerpo golpeó contra el suyo, tirándolo hacia atrás.
-perdóname no me fijé por donde venía.
-No te preocupes está bien- se levantó, se sacudió la ropa y continuó su camino.
Al llegar a su apartamento encendió la luz , lo único que hizo fue dormir.
Y durmió, durmió pero en sueños recordaba esas tristes palabras que no lo dejaban tranquilo desde la tarde " no te quiero volver a ver, no me busques no me llames, no quiero saber mas de ti, hasta nunca".
Al día siguiente sacó del refrigerador leche y de la vitrina cereal, desayunó para volver a abrir la puerta e irse.
Al estar fuera de su apartamento se detuvo en la esquina de su calle y miró el cielo se podía ver claramente las figuras de las nubes grises y tristes igual que él. Al bajar la mirada vio el parque que estaba frente a él, pudo ver que entre las personas estaba el joven que chocó contra el la tarde anterior, este al verlo ser le acercó y mirándolo fijamente a los ojos le dijo:
- hola buenos días, me llamo Alejandro, soy el que chocó contigo ayer. Quiero ofrecerte una disculpa.
- Mucho gusto me llamo Carlos ayer me pareció haberte dicho que estaba bien y si me permites me tengo que ir.
- bueno esta bien y si hay algo que pueda hacer por ti búscame en el parque, ahí estoy todas las mañanas.
Lo tendré muy en cuenta.
Y se fue caminando, caminando por la calle que casi no transitaba muy comúnmente.
ESTÁS LEYENDO
Amor prohibido
Romanceésta es la historia del amor más grande y puro que aunque estando a grandes distancias rompe las barreras y los esquemas de una pareja "normal " esta es mi historia
