Al día siguiente:
Resuena el claxon de un ya desesperado James a la espera de su hija.
A los segundos, sale apurada del hogar una chica rubia de 17 años.
—Llegas retardada. ¿Puertas y ventanas? —interpela James a su hija a medida que esta entra al coche.
La chica saca un pequeño control y lo aprieta, haciendo que los cerrojos electrónicos incorporados en la casa bloqueen cada puerta y ventana hasta asegurar por completo el lugar.
—Todo listo y asegurado, papá.
—Perfecto —arranca el vehículo.
—Anoche te oí salir. ¿Otro caso?
El padre suspira apenas oye la pregunta.
—Así es. Fue de la policía esta vez, un teniente.
La chica apoya su cabeza sobre la ventana.
—¿Algún día encontraran a ese maldito?
Un pesado silencio se apodera de ese pequeño espacio entre los dos en el vehículo.
—¿Y cómo te va en la escuela? —suelta el hombre con tal de romper el silencio, pero sobre todo por dejar atrás el tema antes mencionado— ¿Todavía ves clase con ese profesor "rarito"?
—Sí, de hecho, su clase es la primera que me toca hoy.
—Sabes muy bien que si hubiera conseguido pruebas suficientes, es probable que ese tipo ya estuviera entre rejas. Los pedofilos están en todos lados.
—Yo con toda honestidad no creo que sea mala persona —mira a su padre—. Tú sabes como se reparten chismes y rumores falsos en las escuelas.
—Bueno, es un buen punto. Yo también he sido testigo de eso cuando era más joven. Sin embargo, no por eso hay que andar sin cuidados.
—Eso puedo tenerlo más que claro.
—¿Todavía andas con esos dos criminales a los que llamas novio y amigo? —voltea la mirada hacia su hija— Porque esos si que no son rumores.
—Papá, ya te dije que ellos no son criminales. Solo que no los conoces muy bien.
—Lisa, he trabajado por tantos años con la policía, y sé perfectamente que una persona normal e inocente no anda quitándole partes de vehículos a otras personas, o incluso llevándose las mismas pertenencias dentro del mismo vehículo a los dueños. Todavía recuerdo a esos tarados aquella noche que los descubrí en ese estacionamiento —suelta una risa irónica al mismo tiempo que va aparcando su coche frente a la escuela preparatoria—. Y esos dos vándalos con esas dos máscaras tan particulares de... ¿paintball? O bueno, lo que coño sea.
—De acuerdo, pero sea lo que sea que hacían, ya lo no hacen, ¿ok?
—Ustedes las jóvenes son una cosa seria. Se van con los chicos malos, pero después cuando les pasa algo malo a ellas, quieren huir. Créeme, eso lo sé muy bien.
—Mi madre hubiera aceptado mi relación —suelta con desgano.
El hombre frunce el ceño a la vez que voltea hacia su descendencia.
—Lo siento, papá —baja la mirada, apenada.
—Ahí viene tu novio recluso —avisa señalando con su cabeza a la ventana al lado de su hija.
Lisa mira por la ventana, y efectivamente su novio se está acercando.
Vuelve la mirada a su padre.
—Nos vemos, papá —le da un beso en la mejilla y se dispone a abrir la puerta.
ESTÁS LEYENDO
El Caso Puzzler
Детектив / ТриллерJames Hamill es un detective de homicidios que tras el asesinato de su esposa se ve envuelto junto a otros miembros de la policía para resolver el caso de un enigmático asesino, el cual tiene como objetivo hacer "justicia" por mano propia, sin impor...