Capítulo 14: Mascota nueva

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Esta noticia acerca del saqueo al Pico Xiaoqingyun se extendió rápidamente en el Circulo interno de la secta.

Esta vez, la repercusión fue severa. El furioso segundo Sabio Liu Xian rápidamente llamó al Sabio disciplinario, el Sabio Fang He para ir directamente al pico Xinchen para reportar el caso al mismo líder de la secta.

El Lider de la secta no podía hacer nada más que reír mientras escuchaba a sus hermanos menores discutir con ira sobre el tema. Al final, no tenía otra opción más que ordenar detener e interrogar a la quinta Sabia.

Sin embargo, ¡algo ocurrió! Cuando el Sabio disciplinario llegó al pico Wuxiang, ¡el ladrón había desaparecido!

¡Esto era algo que no se había visto en la secta de Lingjian en cientos de años! Si alguien le decía a un extranjero que un Sabio del salón Tianjian había saqueado el precioso pasto espiritual validado en cientos de piedras espirituales ¡nadie lo creería!

La única cosa que había dejado atrás, además del "inocente" Wang Lu, era una carta con sus sinceros arrepentimientos.

Para los hermanos mayores y hermanas menores: estuve equivocada, realmente equivocada... luego de una noche de meditación, comprendí mis pecados. Desde este día, estaré viajando por las nueve regiones haciendo buenas obras siempre y cuando pueda hacerlas, haciendo más ameno para mi propio crecimiento. Por favor no me busquen hasta que mis pecados sean limpiados. Firmado: Wang Wu.

Mirando esta carca escrita con sangre, Liu Xian y Fang He casi tienen un infarto de la ira. ¡Esta compañera dañina no había cambiado nada en mil años! ¡Ella era un maldito demonio! Sin embargo, aunque las cosas han ido demasiado lejos. ¿Qué otra cosa podría hacer? ¿Deberían ir al salón Tianjian a llamar a todos los Sabios para ir a cazarla? No sería necesario ya que tampoco era un crimen tan grave. Y, sobre todo, el líder de la secta le había contado el asunto al maestro del pico Qingyun, quien aún estaba en la lejana región occidental. Esa persona tomó el asunto con una sonrisa y dijo:

—Está bien, somos todos hermanos y hermanas. Si ella necesita hierbas espirituales, solo necesita pedírmelas y se las daré. No hay necesidad para tal castigo; sería demasiado para la quinta Sabia.

El maestro del pico Qingyun era conocido por ser un increíble cultivador. Ya que incluso el dueño del pico había tomado esa conducta ante el robo, no tenían más opción que dejarlo pasar.

¿Pero qué pasaba con Wang Lu? Los Sabios no le hicieron las cosas más difíciles. En primer lugar, él hizo una enorme contribución a la secta al salvar la vida de los discípulos en el viaje. Y en segundo lugar... dos años atrás, ellos le dejaron ser el discípulo de la quinta Sabia, así que estaban esperando que algo así ocurriese. Estas eran las consecuencias de sus propios actos, así que se sentirían mal si hicieran las cosas más difíciles para un niño como él.

Luego de que el polvo se disipó, la cosas se normalizaron en la secta de Lingjian. Exceptuando en el pico Wuxiang donde, en ausencia de su maestra, la rutina diaria de Wang Lu de maldecir a su maestra a sus espaldas llegó a su final.

Aunque la quinta Sabia había dejado una sincera carta de disculpas, era obvio para Wang Lu que ella estaba buscando un lugar para refinar las medicinas y venderlas.

Por supuesto, antes que su maestra se fuera, ella no olvidó dejarle una caja llena de pastillas para fortalecer sus huesos para suplementar su entrenamiento, eran suficientes para Wang Lu usarlas durante esta parte de su entrenamiento. Sin embargo, ella también había dejado atrás un completo método de entrenamiento para la siguiente fase de la técnica ósea Wuxiang, así que Wang Lu podía estudiar por sí mismo.

Había una vez, la montaña de LingjianDonde viven las historias. Descúbrelo ahora