-Yo hice algo dice bajando la mirada , jugando con el dobladillo de su playera, no se que vallas a pensar.
-¿Qué cosa? Se acomoda la chaqueta y me mira.
-Le pedí un favor a Virginia, ahora se lo debo. Le pedí que evitara a toda costa que pudiera cambiarse para acá, me dijo que sería difícil hacer algo así, que no tiene ninguna razón para hacerlo, que debería que darle una muy buena, así que tuve que decirle a grandes rasgos, sospecho que eso era lo que quería. Lamento tener que haberle dicho sin haberte consultado antes, pero es la única que puede ayudar a que no se venga. Me aseguró que no permitirá que lo logre si esta en sus manos y que así es.
-Que pena con ella, digo tapando mi cara con las manos, el las retira suavemente.
-Vergüenza debe sentir el, que no te deja en paz. ¿Qué piensas?, ¿estás molesta conmigo? Me dice con cara de preocupación.
-Claro que no me molesta que le hallas dicho si era necesario, obviamente no me siento cómoda con que sepa mi vida, pero todo sea porque él no pueda mudarse, me pone feliz que no pueda hacerlo, gracias por pensar en mí y ayudarme con eso cuando no tenías que hacerlo.
-No tienes nada que agradecer, si esta en mis manos te cuidaré de el así tenga que volverme tu guardaespaldas, me dice sonriendo.
-Espero que no te cobre caro el favor.
-No creo, probablemente será cualquier cosa. Lo que me preocupa es que renuncie.
-No lo creo posible, le costó mucho llegar a donde está y yo no valgo para tanto.
-No digas eso, por supuesto que lo vales.
-Bueno pues te debo una yo también.
-Lo tendré en cuenta entonces, me dice sonriendo de lado.
En eso su celular suena, lo veo arrugar la frente, como lo tengo tan cerca veo que no tiene registrado el número y contesta.
-Hola, yo no dije que iría...., No, no puedo.... estoy ocupado, luego hablamos. Cuelga y deja el teléfono en la mesa. Adivinando quien era le digo.
-Pensé que no vendrías esta noche.
-¿Por qué?
-Pensé que saldrías con Nicole. Lo veo fruncir el ceño y recargándose en el sillón me dice.
-Me invitaste porque pensaste que no vendría. Entro en pánico por su tono abatido.
-Claro que no, me encanta que hallas venido, siempre soy un mal tercio con Jhon y Rose, eres bienvenido cuantas veces quieras. Quería que vinieras es solo que ella estaba muy insistente. El sonríe y se relaja, pero luego lo veo dudar un poco y quedarse pensativo.
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Destinados
RomanceDivorciada, escapando, llego a Nueva York con la firme desicion de salir adelante, demostrarme a mi misma que puedo con todo. El destino me tiene preparado un reencuentro inesperado con un amor que creía olvidado. Aunque mi pasado me persiga no me d...