Cambio de Roles

Reverso

Alice

Después de besar nuevamente a Nick, me relamo los labios lentamente deleitándome de su sabor sin despegar la mirada de Alex que estaba mas roja que un tomate.

En eso tocaron la campana, debía irme a Educación Física; y el gimnasio estaba hasta el otro lado de la escuela.

-Nos vemos- le digo a Nick sonriente mientras me levanto, paso de lado contra ella y nuestras miradas chocaron mientras nos veíamos de reojo una a la otra, ella de brazos cruzados y yo caminando tranquila.

En eso llegó Valery con una bolsa de papel blanca pequeña.

-Toma- me extiende la bolsa, la tomo y había un croissant con queso y jamón.- Son unas bestias cuando se trata de comida.

-Gracias- lo saco y lo parto a la mitad, una se la tiendo- Ten, tu tampoco haz comido.

-Te lo agradezco pero estoy en una dieta.

Me sorprendo, a pesar de ser muy alta era extremadamente delgada, pero no lo demasiado como para preocuparse. Tenía cabellera canela lacia y muy larga toda peinada para atrás sin la necesidad de alguna diadema o broche.

Llegamos a clase y empezamos a recorrer la cancha, estiramientos y jugamos volleyball.

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Alex

Miraba como ese chihuahua perseguía el balón de volleyball, tenía período libre junto con Nick. El solo se limitaba a leer a Haruki Murakami, su escritor favorito; seguro que ella no sabría.

-Oye Nick- me siento en el pasto junto a el- Cuéntame de Alice, cómo es que ella se fijó en ti?- Sabía que Nick era de los más atractivo, y según los rumores el chichuahua era la mas popular de la escuela, entonces porqué?

Siguió clavado en el libro, me fijé en todos sus rasgos, sus perfectos rasgos, me acerco a el lentamente.

-Para- ordena con fuerza sin siquiera verme.

-Entonces dime, soy tu mejor amiga.

Suspira- Primero, estás mal desde el principio.- dice cerrando su libro- Yo me fijé en ella mucho antes de que ella se percatara de lo que sentía ella misma por mi.

¿Qué?

-P-pero tu jamás te haz enamorado.

-Eso era lo más raro- mira al cielo.- es demasiado bueno para ser verdad, el hecho de que mi quiera por como soy, y soy un tipo duro de convivir con; Pero no sé, tal vez sea por sus diminutas facciones,su suave voz,su forma de ser, sus frágiles movimientos o simplemente por esa sonrisa que no cuesta nada.

Mi cuerpo se tensó al ver su expresión, sonreía como un estupido enamorado, agarre un fajo de pasta que yacían en mi mano y los estrujé fuertemente arrancándolos, no dejaré que me lo arrebaten, no de nuevo.

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Alice

Después de comer en casa, me cambié por algo más cómodo de lo que traía, un suéter azul, leggins y botines camello.

Miré mi reloj y eran las 4:50, supongo que no estaría mal si llego unos minutos antes.

Literalmente llegué a su casa dando pequeños saltos todo el camino, toqué y esperé para que mi día se arruinara aún más.

-Alice, que tal?- la hipocresía de Alex era mas que evidente, lleva shorts de pijama y una playera de hombre enorme.

-A.. Hola..- digo no muy segura.

-Te puedo ayudar en algo?- dice

-Está Nick? Vine a ver cómo estaba su mamá- digo intentando entrar pero ella ni se musitó en moverse.

-Su mamá? Está de viaje- dice con obviedad- Tenía unos asuntos que arreglar.

-Ajá ok, gracias. Porque estás aquí?-. Pregunto temerosa.

-Porque? Preguntas- sonríe victoriosa- Porque vivo aquí, con él.