Cartas a una Suicida-Calum Hood.

Capítulo 2: La carta.

-Hola soy Calum, Calum Hood.-Hablo-.

Me saludó ¿A mí? A la apartada y rara del salón. Este mundo está derrumbandose poco a poco.

-Y...¿No me vas a saludar?-Demandó-.

-Uhh, soy Samantha.

-Mucho gusto Samantha. ¿Eres buena en esto?.

-Perdona, ¿En qué?-Cuestione, no sabía de que me hablaba puesto a que yo me había quedado pérdida en su sonrisa-.

-Matemáticas.

-Uh, si algo, ¿Tú?.

-No la verdad no...-Se vio interrumpido por el timbre, ¿Tan rápido pasaron los 45 minutos? Jesús-.

Salí rápidamente del salón y busque mi casillero pensando que con suerte, "si es que la tengo" no me cruzaria con aquel chico otra vez. ¿Por qué me sentía así?.

Revise mi horario, tenía Ciencias y luego el descanso. Me apresure al salón de Ciencias, era la primera en llegar, gracias a Dios tendría unos 15 minutos de ventaja para hacer cualquier cosa.

Encendí mi teléfono, busqué mis audífonos y dejé sonar aleatoriamente la música. Gran forma de pasar el tiempo ¿No?.

De pronto los murmullos de las personas se hacían más fuerte, ya el salón estaba lleno. No me quité los audífonos hasta que alguien apareció por mi espalda.

-Samantha.-Esa voz, el chico de matemáticas.-.

-Uhh, Calum, hola otra vez.-Respondí fría-.

-¿Puedo continuar con lo de la clase pasada?.

-Si claro.

-Bueno, como te decía tengo que buscar una tutora en matemáticas y ciencias, conoces a alguien o tal vez tu...

-Ya sé, quieres que te ayude.

-¿Podrías?.

-Supongo.

-Buenos días alumnos.-Anunció la profesora-. Hoy no trabajaremos la página acordada del libro sino que harán trabajo en parejas sobre las moléculas lo entregan dos días antes de exámenes.

Oh. Genial, siempre sola nadie se hacía conmigo, y a la vez me gustaba porque mi calificación era perfecta.

-Antes que nada, está calificación tiene un valor del cuarenta y cinco por ciento en su examen final, así que quieran o no, en parejas se realizará.

-Profe...

-Y no Samantha esta vez no irás sola.-Anunció callandome provocando que algunos rieran-.

-Yo elijo las parejas, así que no me importa si aman u odian a ese compañero, trabajaran con él y sino tendrán una detención.

El salón quedó en silencio ante tal "anuncio". Y la profesora comenzó a llamar.

-Williams, con la señorita Crawford. Parker con Collins.-Y así siguió hasta que llegó a mi apellido-. Smith con Hood.

¿Hood? De pronto mi mente reaccionó, el chico de matemáticas.

-Mierda.-Maldije por lo bajo-.

-Perfecto! Eres mi compañera.

-Por lo que veo.

No hable con Calum por el resto de la clase, no estaba interesante. La suerte por el día de hoy no estaba de mi parte.

Finalmente sonó el timbre y salí corriendo a la parte abandonada del jardín. Me senté debajo de un árbol, cogí mi móvil y mis audífonos deje la música sonar nuevamente mientras recordaba lo ocurrido está mañana.