Luego de eso todos nos juntamos para comer, Fernando no paraba de mirarme sonriendo cosa que incomodaba a Julio. -Ya no tengo más hambre- Dijo Julio para levantarse con su plato en vez de esperar a que una de las criadas se la quitase, pero mientras iba a la cocina Julio tiro su plato encima de Fernando fingiendo haber tropezado. -Uy disculpa, no era mi intención- Dijo, Fernando mantuvo la compostura y se levantó para que toda la comida de encima suya cayera al suelo. -Descjida, tengo dinero como para hacerme más de 1000 trajes a medida, cosas que otros no pueden decir, ¿no?- Dijo sonriendo, eran como dos niños pequeños de verdad. Julio fue a la cocina y yo mire a Fernando serio.
-No te metas con su situación económica por favor- Dije rogando paz pues me tenian cansados ya de tanta pelea. -Que no me manche entonces- Yo comí un poco más y mire a Fernando quien miraba triste su ropa. -Yo mismo te pagaré un nuevo traje Fernando, disculpa su comportamiento...- Fer asintió con la cabeza aún triste y se levantó llendose, yo me levanté también y fui a por un sastre, luego fui junto al sastre a la habitación de Fernando y al entrar él estaba en ropa interior. Entramos y cerré la puerta con seguro para intimidad, el sastre comenzó a tomarle medidas mientras él miraba al suelo. -Fernando te voy a hacer un nuevo traje y además seguro que pueden lavarte el otro, ¿porque sigues triste?- Él suspiró y miro al sastre él cual seguia tomando medidas. -Pues no se Mateo... Simplemente estaba feliz y esto me ha arruinado el dia- Yo mire hacia la ventana y di un suspiro, luego me tiré en la cama de Fernando y espere a que el sastre terminase, una vez que acabo y se marchó, por fin pude abrazar a Fernando.
-Mi pelito te tiene que animar, me queda genial- Dije sonriendo, él acaricio mi pelo y sonrio ligeramente, él iba a decir algo pero alguien llamo a la puerta, mi padre me habia echo llamar. Yo abrace a Fernando y me fui, pero al llegar a ver a mi padre él negaba haberme echo llamar. -¿Entonces que es todo esto? ¿Una broma de mal gusto?- Dije molesto, pero justo cuando iba a salir por la puerta me choqué con un guardia que venía corriendo. -Disculpe señor, por favor ha sido mi culpa, iba demasiado rápido- Yo suspire recuperándome del golpe y poniéndome el traje bien de nuevo. -Majestad, señor, el príncipe invitado está incosciente- Mi padre y yo nos miramos confundidos y nos fuimos corriendo detrás del guardia hasta la habitación de Fernando.
Él estaba en la cama incosciente, parecía dormido pero no despertaba, los médicos llegaron y comenzaron a examinarlo mientras mi padre me sacaba de la habitación. Los médicos se quedaron solos con Fer y yo me quede en la puerta con mi padre.
-Hijo mío, ¿no has sido tu verdad? Esto nos buscará la ruina... Entraremos en guerra... Pensarán que lo matamos nosotros- Yo ni siquiera me preocupaba por la guerra o por todo eso, a mi me preocupaba Fernando. Sentia como si todo esto fuera una pesadilla y yo fuese a despertar en cualquier momento. De repente los médicos salieron y nos dieron su diagnóstico.
-Sus signos vitales son muy débiles señor... No tiene heridas ni rastro de estrangulamiento ni golpes... Todo indica a que es veneno... Pero si no encotramos pronto que veneno es no podremos dar con el antidoto... Eso si, majestad y señor, tenemos la sospecha de que fue el mismo quien ingirió el veneno... Pues no tiene la garganta inflamada ni los ojos llorosos... El veneno que ha ingerido era indoloro- Yo cerre mi puño sin fuerza pues me cabreaba que hubiese sido envenenado, sabia que él nunca lo haría, él no me dejaría así. -Hijo... ¿Crees que fue él?- Dijo mi padre una vez los médicos fueron a investigar los tipos de veneno, yo me sentí ofendido ante esa pregunta y sin decir nada entre en la habitación de Fernando para sentarme a su lado y acariciar su pelo.
Parecia dormido y en paz, él no podia morir, no podia morir. -Él nunca lo haria- La verdad es que no se si dije eso para convencer a mi padre o para autoconvencerme, pero mi padre no tardo en responder. -Hijo, tal vez lo hizo él, aquí hay mucha seguridad como para que otro lo haga...Él estaba muy deprimido y bebía mucho...- Dijo mi padre, yo comprobé que no quedaba nadie en la habitación y comencé a sincerarme.
-Si... Él estaba deprimido, él se había dado cuenta por fin de que... Lo que ambos más ahnelabamos era imposible. Yo me dejaba halagar por él e incluso le halagaba, pero sin apenas alguna caricia superficial... No sellaba lo nuestro pues ninguno de los dos podía, él tenía esposa e hija y yo tenía... A otra persona... Sabia que mi comportamiento le hacía más mal que bien, pero no queria parar de hacerlo porque realmente él me hacía feliz. Apesar de todo lo conozco, y antes de marcharse me habría dejado algo, una nota, una canción, un dibujo... Él no se habría marchado sin más, si de verdad lo ha echo él, hay algo que no hemos encontrado- Dije para luego levantarme e ir hacia el escritorio y comenzar a buscar, simplemente habia un dibujo a medias, pero se podía llegar a ver que estaba dibujando un jarrón de flores. Le di la vuelta para comprobar si tenía algo detrás y efectivamente había algo escrito.
"Ninguna flor es tan bonita como tú" Yo sonrei al leer eso y deje el dibujo en la mesa. -Hijo... ¿Aquello que ambos anhelabais era tan fuerte como para morir por ello?- Yo mire a Fernando con lagrimas en los ojos y respondí. -Aquello que anhelabamos era tan fuerte como para bajar a los infiernos y reírte de Satanás, pues él nunca lograría causarnos tanto dolor como él que nosotros nos habia autoimpuesto por culpa del otro... Y aún así, a pesar de todo el dolor que causaba la situación... Era lo más bonito que tenía. Eso que ahnelabamos era como una rosa... Era hermoso pero te pinchaba y hacía tu mano sangrar- Yo no soportaba ver a Fernando en esa situación así que me fui a buscar a Julio para contarle lo ocurrido.
Él estaba en su cuarto mirando por la ventana, yo cerré la puerta con seguro y le abracé llorando. -Julio... Fernando... Ha ingerido veneno, no sabemos si ha sido él o ha sido otra persona pero... Si no encontramos rápido el veneno morirá- Julio no mostró ninguna emoción, simplemente acaricio mi espalda hasta que me calme un poco y me aleje de él. Luego él coloco la mano en mi mejilla y sonrio ligeramente. -¿Anna lo sabe? Pobre chiquilla... Con un bebé y sin hijos varones... No lograrás volver a casarla probablemente- Dijo Julio, pero yo lo que menos pensaba era en si Anna en un tiempo se podría casar o no, además de avisarlos se encargaría mi padre supongo. Yo suspire sin sentirme muy arropado por Julio y me fui de nuevo a ver a Fernando. Él seguia prácticamente igual, habia unos médicos buscando por la habitación pero no habia rastro de veneno, también habia guardias interrogando y torturando a cada persona que habia estado en contacto con Fernando para que confesará, pero no lo hacia. Yo simplemente me sentía impotente al no poder hacer más que esperar, una vez la habitación se quedó vacía yo me tumbe en la cama junto a Fer y apoye mi cabeza en su pecho, podia oír sus latidos muy leves y cada bastante tiempo. -Fernando... No se si puedes oirme... Pero si me oyes, como hayas sido tú él que lo haya echo no te perdonaré, no te perdonaré hacerme esto si has sido tú... Porque no puedes marcharte sin más, no... Lo nuestro no debia ser así, debiamos acabar con los prejuicios de todos y cambiar la ley, y casarnos, y tal vez criar a hijos juntos... Y... Joder, has sido lo mejor que me ha pasado, has sido la persona de la que más me he enamorado... Y no te puedes ir así...aquí...- Dije para abrazarlo con más fuerza, me debi quedar dormido ya que al rato me desperto Anna. Mi padre, el padre de Fernando y Anna, que llevaba en brazos a Chloe, me miraban sin expresión por verme dormir abrazado a Fernando. Yo me levanté como si nada y me sente en una silla observandolos.
-Hermanito, como por tu culpa mi marido haya decidido tomar veneno no te lo perdonaré...- Dijo mientras Chloe reía sin entender nada. Yo suspire ignorando su comentario y me quede mirando al suelo, pues ya habia perdido la esperanza en que Fer despertará. Pero si no lo hacia, tenía claro de que yo sería el siguiente en probar un veneno...
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Brothers In L(ove)aw
RomantizmMateo era un joven normal y con una vida de lo más tranquila, pero también bastante lujosa ya que era el futuro heredero de la corona de Jayus, un pequeño y acojedor reino. Pero todo cambia el dia que la hermana pequeña de Mateo, Anna, cumple 15 año...