1. Mazo

147 15 0
                                    

Victoria entró en casa tratando de hacer el menor ruido posible. Nadie debía enterarse de que había entrado en casa, o al menos hasta que hubiera dejado el mazo en su sit...

-¿Victoria?

Mierda.

Estúpido Glam y su estúpido buen oído.

Glam salió de la cocina con el pelo recogido y su cuchillo favorito en la mano. Estaba haciendo la cena... obviamente. 

-¿Has vuelto pronto, ¿no?

Victoria sonrió nerviosamente mientras escondía el mazo detrás de su espalda. Fue más un acto reflejo que algo a conciencia, ya que sabía de sobra que su marido se daría cuenta en seguida de lo que ocurría. De hecho, en cuanto vio que su marido alzaba una ceja, se supo descubierta.

-¿Qué tal la reunión con la tutora de Heavy?

Victoria parpadeó, confundida.

-Bi-bien. No ha habido problemas... nos hemos... entendido... bien.

Glam le sonrió al escucharla.

-¿Y bien? ¿en que ha quedado la cosa para nuestro hijo?

Vicky se rasco la cabeza, tratando de dar con las palabras adecuadas.

-Que nosotros nos encargaremos de que Heavy estudie y se comporte como debe... y que ella y las estiradas de sus "amiguitas" no se meterán donde no les llaman...

-Son el resto del equipo docente, no creo que sean amigas...

-... y por supuesto no volverán a tocar un pelo de Heavy, porque si no...- dijo ella apretando los dientes, olvidándose por completo de que trataba de esconder el mazo y agarrando este con furia delante de su pecho- ... habrá consecuencias.

-Muy bien,- respondió Glam con calma- la cena estará en 30 minutos.- Y Glam volvió a la cocina, sin un ápice de preocupación o molestia,  sin haber perdido en ningún momento su eterna sonrisa, tan jovial como siempre. A Victoria esto no le gustó nada.

-Mierda- dijo por lo bajo, aun con el mazo en sus manos.

----------------------------------------------------------------------------

La cena transcurrió con normalidad. Victoria no esperaba otra cosa, ya que Glam siempre trataba evitar discutir con ella delante de los niños. Heavy comió todo lo rápido que pudo por no-se-qué historia de no-se-que juego de ordenador, y Dee estuvo hablando un rato con su padre sobre algo a lo que ella no le prestó mucha atención. Solo esperaba a que la tormenta estallara, y aunque en otro momento a Heavy le habría gritado por ser un gilipollas y no hablar con la familia en lugar de  jugar a no-se-que-mierda en el ordenador, y habría metido baza en la conversación de Dee y Glam (aunque no tuviera ni idea del tema), hoy no era el día. Victoria solo esperaba.

Normalmente después de cenar ella se quedaba con Glam viendo algo juntos en el televisor o simplemente charlando mientras los niños acababan los deberes o los acompañaban, pero esta vez Victoria decidió ir al garaje a trabajar con su moto. No era algo raro, a veces lo hacía, así que no debió de extrañarles.  Sin embargo, Victoria decidió que en su lugar, abriría una cerveza y  se fumaría un cigarrillo. Necesitaba pensar, sabía que a su marido no le habría hecho ninguna gracia lo ocurrido, y empezó a darle vueltas a como iba a justificar todo lo que había pasado esa tarde a Glam.

Victoria no veía el momento de irse a la cama. Los malos tragos hay que pasarlos lo antes posible.

-----------------------------------------------------------------------

Ese día Victoria se fue a la cama antes que de costumbre, pero no demasiado para extrañar a nadie, y no le sorprendió en absoluto ver que Glam no tardó en seguirla. En teoría (y hay que entenderlo como "teoría", ya que estamos hablando de dos adolescentes), sus hijos ya estarían en la cama, y era entonces cuando ella y Glam podían hablar libremente de todo lo que no querían que sus hijos oyeran. Esto era así porque era uno de los pocos momentos en los que ellos podían hablar con libertad sin ser molestados.

METALTOBER 2020 (Metal Family)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora