El hijo de Estruch

4

Ya dos semanas habían pasado y todavía no termino de acostumbrarme a la tranquilidad de las calles de Transilvania. Aveces tanta tranquilidad me ponía un tanto nerviosa, sentía como si en este lugar hubiera algo esperando para atacar, algo desconocido, algo oculto en lo profundo, algo que muy pocos tienen la capacidad de presenciar.

Quizas por un lado estaba enloqueciendo...pero por otro me identificaba con esto, con estas calles tranquilas, con lo desconcido, con algo oculto, con algo que muy pocos tienen la posibilidad de presenciar.

Eran días de lluvia, Irina, al ser una persona un poco enfermiza... bueno no voy a mentir... bastante enfermiza, se encontraba en cama con un té y una caja de pañuelos en mano. Yo, por el contrario, me encontraba caminando por la ciudad buscando algún lugar en donde quedarme un tiempo... ya que la pequeña llovizna se había vuelto una gran tormenta.

Iba por el centro en busca de algún lugar para "matar el tiempo" hasta que la lluvia cesara. Recorrí las calles, fijando mi vista a las pequeños negocios que se encontraban en ellas, cuando un lugar llamo mi atención.

"Arcanum".

Se encontraba en una esquina, era una pequeña cafeteria con estilo medieval. Arcanum parecía perfectamente diseñado para no verse a simple vista. Era aterrador y encantador a la vez ¿Raro,no? Raro o no la decisión está tomada... entraría de todos modos.

El olor a café inundaba el lugar y pequeñas mesas se encontraban dispersas por él.

Pedí mi café... ¿Qué haría la gente sin el café? O mejor dicho... ¿ Qué haría yo sin él?.

En la espera algo captó mi atención. En la televisión, un jóven periodísta anunciaba, como noticia de último momento, que habían encontrado de una chica. En medio del bosque. Sin sangre.