MI INEVITABLE FUCKBOY 🔥[COMPLETA]

1. 💔

Mi pecho ardía conforme me alejaba de los fuegos artificiales, de la traición y la mentira, de sus sonrisas perversas y burlonas, de él.
Del maldito fuckboy del que estoy enamorada.

¿Se puede ser tan cabrón como para mirar los ojos de alguien y decir un puto te amo sin sentirlo?
Que pedazo de estiércol.

Mi hermano venía de salida cuando salí del taxi, pero en cuanto vio mi rostro rojo como tomate, se detuvo en seco en su sitio.

-Oye...-no puedo parar de llorar.-¿qué sucedió?...-no quiero preguntas, no quiero responder, no quiero recordar este día por lo que resta de mi vida.
-Por favor...-mi voz suena tan suave que dudo que me haya escuchado.-por favor arráncame esto...-se acerca unos pasos y me atrae hacia él.
-Tranquila pequeña, ya pasó...-no puedo hacer otra cosa más que llorar en sus brazos protectores.

Siento como cada parte de mi corazón se derrumba en mi pecho y con cada caída de los pedazos el llanto estalla de nuevo y desata una marea aún más grande que la anterior.

"Maldita sea..."

Tuve que haberme ido cuando empezó a meterse en mi piel, pero lo dejé llegar hasta mis huesos y ahora siento el ácido en cada parte de mi cuerpo.
Su veneno mortal esta en mí.

-¿Me quieres contar?...-me da una taza de té y se sienta a mi lado en la cama.
-¿No deberías ir al baile?...-pregunto a media voz. 
-¿Y dejar a mi hermana en ese estado?
-Ve a divertirte, Dyl.
-Vi......
-Quiero dormir, por favor...-mi voz sale en medio de suspiros.
-Llevaré mi teléfono, me llamas cualquier cosa...-asiento ligeramente antes de darle un sorbo al té.
-¿Y mamá y papá?
-Hubo una emergencia en el hospital. Parece que llegó alguien muy malherido y tuvieron que encargarse.
-De acuerdo...-tal vez si duermo olvide todo de este día.
-Entonces me voy...-pone mi taza en la mesa de noche y me ayuda a cobijarme.-sea lo que sea que haya sucedido...-sus ojos están cargados de preocupación.-se resolverá...-sus palabras solo consiguen hacerme llorar de nuevo.

No puedo ni quiero decirle nada de lo que ha hecho Mateo. Es que solo su nombre me pesa en la garganta y me da un dolor en el pecho que recorre como electricidad mi cuerpo entero.

¿Es este el dolor que reflejan en las películas, libros y las anécdotas de las chicas en el baño de la escuela?

¿Es posible que todos hayan sentido alguna vez el nudo enorme en la garganta que no deja pasar la saliva, el corazón con un palpitar extraño y sofocante, el estómago frío como si hubiera comido mil hielos, la respiración irregular y las manos temblando ligeramente?

Fui sólo parte de una suposición, una prueba de que podía tenerme en su mano porque conoce a la perfección mi corazón, fui parte de su lista de conquistas de este año, el trofeo que exhibió frente a sus enfermos amigos y la recompensa fue decir que tuvo de nuevo a su ex, que se acostó con ella, que la enamoró y que la dejó cuando tuvo oportunidad. Fui solo su comidilla del momento.
¿Se puede ser más estúpida en esta tierra?

"Te amo..."

Me levantó de golpe cuando el "te amo" que sus labios escupieron suena en eco en mi mente.
No esta aquí.
Es solo mi absurda mente haciendo su obra maligna al recordarme que no fue real.

Me limpio las mejillas que están cubiertas de lágrimas y me levanto lentamente para quitarme el vestido que mi madre me obsequió.
Un hermoso vestido para un día tan mierda.

Paso frente al espejo y me miro una última vez con este majestuoso pedazo de tela, pero lo único que veo es su rostro "embobado" mirándome desde abajo.
¿Alguna vez dejaré de llorar por él?

Maldita sea, ya he pasado por esto con él.
¿Porque esta vez es diferente? ¿Porque siento que muero? ¿Porque?
Maldición.

Me mudo deprisa y vuelvo a la cama que en este momento es mi único refugio del mundo, se los recuerdos y de él.

"Huye.."

Debí haber escuchado a mi mente cuando me advirtió que esto no era bueno.

"La haré gemir mi nombre y suplicarme por más solo para callarles las putas bocas..."

-Basta, por favor...-ya no quiero escuchar más su voz, ya no quiero verlo en mi mente, ya no quiero amarlo.

Me levanto despacio y me asomo por la ventana, quizá el exterior sea mejor que el interior.

-Te amo...-un escalofrío recorre mi espalda en cuanto siento su presencia en mi espalda. No es real. Él no está aquí.
-¿Por qué me haces esto?...-cierro los ojos con fuerza mientras sus palabras rodean mi mente con un maldito eco.
-Te amo...-pone su mano sobre la que tengo encima de mis ojos, pero sé que realmente no es él.
-¿Que probaste con esto?...-me rodea con sus brazos y me atrae aún más a su cuerpo.-no quiero amarte más, Mateo...-su nombre duele.
-Somos inevitables...-me quito de golpe de su agarre cuando esas palabras cruzan sus labios.
Estoy sola nuevamente.

No logré dormir en toda la noche y para evitar que los demás entraran o me hablaran cuando entraban, me hice la dormida.

Cuando la luz del sol entra por la ventana y me da la señal de que he pasado la primera noche, la noche más agonizante de toda mi vida y que he sobrevivido a ella, la idea de qué quizá está no sea la única me comienza a recorrer rápidamente la cabeza.

-Vi...-giro lentamente para ver a mi madre con su vestido de domingo.-el desayuno está listo.
-¿Vas a algún lado?
-A la iglesia.
-¿Por qué no me levantaste?...-me quito la cobija para levantarme, pero ella se apresura y me sostiene por los hombros para que no me levante.
-Hoy no irás a la iglesia.
-¿Que dices?...-me mantiene sujeta para que no me levante. ¿Como mierda una señora de su edad es tan fuerte?
-Vi...-la miro directamente a los ojos.-no dormiste en toda la noche y esas bolsas en tus ojos demuestran que pasaste llorando...-pasa una mano con delicadeza por mi mejilla.-debes quedarte aquí.
-Mamá.....
-Y cuando estes lista, voy a escucharte...-niego con la cabeza en respuesta.-siempre estaré aquí para escucharte.
-No...-la roca en mi garganta vuelve.-es que...yo no entiendo...¿cómo pudo verme a los ojos y decirme un "te amo" vacío?...-pensé que después de haber llorado casi toda la noche me había quedado sin lágrimas, pero aquí estoy otra vez, derramando más en los brazos de mi madre.

Mis gemidos suenan por toda la habitación como recordatorio de que mi corazón está roto ha más no poder, mis manos se aferran con necesidad a ella mientras descargo todo mi dolor en su regazo.
¿Cuanto más debo llorar para olvidarlo?
¿Cuanto más se quedará aferrado a mis huesos?
¿Cuanto más estaré enamorada de él?