𝑼𝒏 𝒂𝒎𝒐𝒓 𝒑𝒓𝒐-𝒉𝒊𝒃𝒊𝒅𝒐 - 𝖤𝗋𝖾𝗇 𝗑 𝖠𝗋𝗆𝗂𝗇 - omegaverse editando

OO6

Pronto el azabache dejó aquella habitación y los dos jóvenes quedaron solos

No se miraron por siquiera un segundo, mientras que el rubio formulaba alguna palabra para hacer plática y sentirse tan incomodo con el tema de sus diferentes opiniones y creencias

El castaño estaba pensado aún en lo sucedido aquella vez, sabía que debió haber insistido, además de ahí, su odio creció por los alfas, quería que ellos se extinguieran o que vivieran en algún lugar separado

Además de que todo fuera justo y que pagarán, aunque las leyera marcaban que todos eran iguales

Alfas, betas y omegas tenían las mismas oportunidades ante los ojos de la ley, no era del todo cumplido por la sociedad, que seguían viendo a los omegas como seres inferiores e inútiles que solo servían como incubadoras

Aunque eso era falso, habían salido por primera vez omegas que lograron convertirse en doctores, científicos y hasta abogados exitosos por sus conocimientos y habilidades

Se podía decir que aún más que los alfas y betas que se encontraban en esa área anteriormente

Suspiro resignado, miro el techo gris de aquella celda, sintiendo la mirada del rubio posarse sobre el

Al mismo tiempo él le devolvió aquella mirada, noto que la de él era algo suave en contrario a la de el, que casi lo mataba con los ojos

Mientras pasaba eso, el contrario lo miro fijamente mientras sus miradas chocaron, sintió algo extraño, como si fuera una chispa pasando de pies a cabeza

—Y...¿por que piensas eso?—

—¿pensar que? —

Le contesto el castaño mientras este  lo fulminaba con la mirada, ganando una pequeña sonrisa por parte de él nuevamente

"Es extraño se dijo a sí mismo Eren, mientras volteaba para darle la espalda al rubio"

—el que...deben matar niños—

—científicamente, Antes de la semana catorce, su sistema nervioso no está conectado, por lo cual no sienten nada, ademas, así que no, no los matas además si uno no quiere tener un niño, no debería hacerlo, debería ser libre de decidir, tener la libertad de decidir si "abortar" —

Dijo la última palabra en un tono más fuerte, mientras regresaba a su antigua posición, encarando al rubio

—acaso...eres omega?—

Pregunto el rubio con cierta curiosidad en su respuesta

—si, lo soy, algún problema con eso?—

Contesto a la defensiva el de ojos verdes, mientras que por alguna razón, el rubio sonrió en sus adentros, se vería muy terrorífico el que lo hiciera físicamente, capaz y lo demandaba por acoso

El rubio se quedó pensativo respecto a eso

Las leyes habían cambiado, para beneficio de los omegas, cediendo oportunidades para crecer y poder tener los mismos derechos

Una nueva revolución en el sistema

Que solo trajo algunos problemas, como la desaparición de 43 omegas
Jamás encontraron sus cuerpos. Mucho menos a los culpables, al igual que una guardería, donde 20 niños y 13 omegas que hacían de profesores de esos pequeños murieron o fueron desaparecidos entre los escombros

Luego se declaró un accidente sin culpables, aunque el incendio hubiese sido provocado

Y esos solo eran unos pequeños ejemplos de lo que sucedía

—no, no hay ningún problema, me incomoda un poco—

—ese no es mi problema —

El reloj que se alojaba en aquella pared blanca de ladrillo solo era el único sonido que se podía escuchar en aquella habitación, fuera de esta

Se apreciaba el murmullo de
personas, algún hombre que fue llevado por pasarse de copas en vía pública entre otros delitos menores que no pasaban más de alguna multa o dejarlos en aquellas celdas por poco tiempo hasta que pagaran su fianza o cumplieran su tiempo acordado

Apenas el reloj marcaba las 3am, y una lluvia comenzó a presenciarse, con ello, las paredes se humedecían y el lugar se volvía un congelador

Ahí se encontraba aquel dúo, por haber causado disturbios en vía pública ni si quiera se habían dirigido la palabra desde hace aproximadamente cuatro horas

Solo habían comido lo que era un pan, que fue traído a escondidas de los por cierta oficial, la cual fue la misma que los había encerrado en esas cuatro paredes

El rubio se dio cuenta de aquel toque maternal, que sentía por el castaño, no conocía a profundidad a aquellos individuos

Pero

¿no estaría mal conocerlos?