Trapped

Sin ti

La castaña suspiró mirando su pantalla; después de pensar por un momento cerró la aplicación y guardó su teléfono en el bolsillo de la chaqueta que llevaba puesta.

— ¿Sigues jugando eso? — preguntó su amiga tratando de traerla de vuelta a la tierra.

— Si... hoy terminé la ruta que me faltaba.

— ¿Y por que esa cara triste? ¿Era la que tanto querías, no?

— Si, tienes razón, lo siento ¿Vamos por un helado?

— Me encantaría darling pero le prometí a mamá que llegaría para la cena, ¿Lo dejamos para otro día?

— Claro, sin problema — respondió con una media sonrisa.

— Nos vemos mañana, ve con cuidado y avísame cuando llegues a casa — se despidió.

— También ten cuidado Liz — ambas se abrazaron para acto seguido darse la vuelta y caminar rumbo a su hogar.

La chica avanzaba algo distraída, de vez en cuando miraba al cielo y sonreía por lo despejado que se veía en ese momento— aún es muy temprano para volver — pensó.

No tardó en dirigirse a su sitio favorito; un pequeño parque con muchos árboles, algunos juegos y una colina donde podías recostarte durante horas a ver las nubes. Miró hacía arriba y sonrió — espero que dónde estés el cielo se vea igual de tranquilo y bonito— susurró.

————

— No has hablado en todo el día, ¿Seguro que estás bien, seven?

— Estoy bien... supongo que ya me acostumbraré a esto — sonrió ampliamente tratando de parecer tranquilo bajo la mirada dudosa y confundida de su amigo — además — miró hacia arriba— el cielo está muy despejado como para sentirme triste.