01.

382 29 6
                                    

Desde una edad muy temprana, asta siempre ha tenido problemas con su temperamento, es un chico muy energético, amable, y servicial, además de intenso. Pero, hay un problema con él...

Y este consiste en que asta no puede utilizar magia.

Sí, en lugares como el reino de clover y demás, la magia puede ser de suma utilidad para actividades diarias y defensa.

Aún así, no ser aceptado por el maná nunca ha sido un problema para él, puesto a que este siempre se mantuvo entrenando para fortalecer su cuerpo y así algún día finalmente cumplir su sueño.


🐂

— ¡Algún día me convertiré en el rey mago y te haré muy feliz. Así que por favor cásate conmigo!.— Se escuchó a lo lejos el grito de cierto peligris, quién ansiaba desesperadamente ser aceptado por su más grande amor.

— Lo lamento asta, pero soy una monja. Así que supongo que ya conoces la respuesta...— Rió aquella mujer con cierto nerviosismo, observando con una poca de preocupación el berrinche que inició nuevamente el menor de quince.

— ¡Aún no me rindo!, ¡aún no!.— Exclamó este así recibiendo un gran golpe elaborado con magia por parte de la hermana.

— Vaya asta, otra vez causándole problemas a la hermana.— Interrumpió una muchacha junto a dos personas más.

— ¿Cuántas veces te ha rechazado hoy?.— Preguntó el más pequeño con burla.

— ¡Callense ya!.— Respondió con enojo el pequeño — ¿Y tú qué estás mirando, yuno?.

— Mh..., te miro por la simple razón de que eres un enano ruidoso e inquietante. No tienes las cualidades para enamorar a una sola mujer.— Respondió con un toque de amargura. Su mirada era más penetrante que miles de espadas.

— No deberías hablarle de esa manera a la persona que se crió contigo durante todos estos años. — Respondió frunciendo ambas cejas — Yuno, te reto.

Alegó tomando posición de pelea.

— Me niego.— Respondió sin más, dándole la espalda al más bajito.

— ¡¿Qué?!, —exclamó asta— ¿¡por qué!?.

Y la respuesta fue tan obvia a aquello, que el chico no hizo más que hundirse ante la vergüenza.

Yuno no siempre fue un joven tan amargo y cruel. De hecho, antes era un pequeño llorón hasta cierto entonces en el cuál prometió no volver a llorar nunca más...

A diferencia de asta, yuno podía utilizar magia, era recibido con tanto cariño en hage, que pocas eran las personas las cuales realmente le aborrecían.

Por otro lado, mientras asta entrenaba arduamente en la simulación de montaña donde estaba el cráneo de un gran demonio, yuno ayudaba lo más que podía a sus compañeros de la iglesia. Así al llegar el atardecer; iniciaría cierta actividad especial en la cual se entregarían los grimorios.


🐂

Un no tan largo discurso fue dado a los presentes, mientras que todos se preparaban para recibir sus grimorios, el más emocionado ante aquello era asta.

— Muy bien, ¡todos reciban sus grimorios!.— Exclamó el jefe de la torre, observando con tranquilidad como varios libros levitaron de su lugar hacia lo que serían sus portadores.

— ¡Wow, mira mi grimorio!— Exclamó un hombre con gran asombro y felicidad.

— Genial, aunque el mío es más grueso.— Respondió la mujer a su lado con orgullo.

Todo era felicidad, mientras que a un lado, cierto joven de escaso tamaño se encontraba con las manos vacías, y, una vez todos los presentes se percataron de ello...no hicieron más que reír y burlarse de lo que para el otro, era una gran desgracia y equivocación.

Puede que en ese momento haya sido toda una vergüenza, y la decepción de cierta persona con la cual ejerció una promesa. Pero, más tarde ese día, nadie se hubiera imaginado lo que sucedería.


Asta, el chico que porta el grimorio con el trébol de 5 hojas.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Oct 06, 2020 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Rose of doubt. [Yuno x Asta]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora