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ella se notaba cambiada, algo en ella había cambiado, además se movía como si el disparo no le doliese, a pesar que la herida estaba sangrante, Chile ataco a España, pero los soldados se interpusieron para luego dispararle pero se sorprendieron al ver que ni una bala la detenía. Chile alzo la lanza y se la atravesó en el cuello a uno de los soldados, matándolo al instante.

quito la lanza del ahora cadáver, por ende se salpico de sangre, e iba por su siguiente victima pero un soldado la alcanzo por detrás y la noqueo. ella callo al suelo, su ojo volvió a la normalidad y luego sintió el agonizante dolor de las balas. perdió la consciencia en seguida. 

España miraba sorprendido, cuan peligrosa podría llegar a ser su hija menor. pero aun así iba a insistir en llevársela, realmente, si quería conquistar esas tierras debía obtener la ayuda militar de Inglaterra le daba a cambio de su hija.

se acerco a la joven de catorce años pero una lanza posarse en su cuello. vio que Wallmapu le impidió acercarse a Chile. 

-aléjate de ella. -hablo Wallmapu

-es mi hija, y me la llevare. -dijo España

-un padre que abandona a su hija para dejarla morir, no es un padre. -dijo Lautaro.

España se enfado. mientras Mapuche, ella miraba a Chile, estaba deduciendo sus propias conclusiones. miro al español y le dijo:

-España. podemos hablar un momento? 

el se extraño por el cambio de actitud de la mujer, pero accedió a hablar con ella. un poco alejados del pueblo, Mapuche le dijo:

-dime la verdad, ella es la niña que me quitaste verdad?

España se sorprendió, desvío la mirada sin decir nada.

-es mi hija? Tchili es la niña que no pude ni ver? es la niña que dijiste que había nacido muerta?... -dijo Mapuche

de nuevo, ninguna respuesta obtuvo. ahora si se enfado. España le miro, Mapuche le miraba enfadada, le dijo:

-será mejor que olvides la idea de que te llevarás a Tchili, si te vuelvo a ver cerca de ella, no lo dudare... yo misma te matare... 

-no podéis prohibirme ver a mi hija. -dijo molesto España

-si no la quieres ver, solo tenías que traerla conmigo, no tenias por que haberla vendido. -le recrimino Mapuche

España calló, no dijo nada, ella tenía razón,  pero aun así debía recuperar a Chile, la necesitaba para sus objetivos en aquellas tierras.

mientras tanto Lautaro se había levado a Chile a su ruca, la recostó en una cama y llamo al medico. quien comenzó a tratarle las heridas. 

-lo siento, no pude detenerla...-se disculpo Guacolda con su esposo.

-descuida, ella es escurridiza. -dijo Lautaro mirando como Mapuche hablaba con España, ella se veía muy enojada.  

le sorprendía ver como Mapuche le recriminaba quizás que cosas y este no le contestaba  mas de algunas palabras y movimientos de cabeza.

Mapuche finalmente se alejo del español y este ordeno a sus soldados la retirada. ella se dirigió a Lautaro preguntando:

-como esta Tchili?

-el medico la esta examinando y tratando las heridas. -dijo Lautaro. 

-entiendo...-dijo Mapuche

mas tarde, Chile estaba descansando, el medico logro tratar todas sus heridas sin ningún problema, Mapuche miraba a la joven desde la entrada de la ruca, la mujer estaba perdida en sus pensamientos mientras contemplaba la que era su hija. 

Lautaro estaba sentado al lado de Chile, este le miraba preocupado, le sorprendía la actitud que tubo la joven ante los españoles, y lo dejaba aun mas sorprendido con la habilidad que la joven tenía con la lanza.

Guacolda, se mostraba para nada interesada, pero por dentro estaba igual de preocupada por Chile que los demás.

pasaron algunos días y ella no despertaba aún, Mapuche se había ofrecido a cuidarla, mientras Lautaro y Guacolda cumplían con sus deberes, el como cazador y guerrero y ella como recolectora y maestra de las mas jóvenes para que aprendiesen los quehaceres de una mujer en la comunidad, además de enseñar a cuidar a sus futuros hijos.

esa noche, Mapuche cuidaba de Chile cuando esta despertó.

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Continuará.

Hija del Lonko. [Fem. Chile - Countryhumans] TERMINADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora