Capítulo 01

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*— P.O.V. Kagome

Era el gran día, la competencia de álgebra en la escuela, apenas eran las eliminatorias escolares así que mis contrincantes eran mis mismas amigas y compañeros. Decían problemas al azar y el mas rápido en responder sería quién se llevará el punto, estaba quedando en segundo lugar, después de Hoyo, un chico apuesto de cabello castaño y ojos profundos que hacían que me perdiera en ellos cada que hablábamos de frente, provenía de buena familia y era de los mejores en cada asignatura en la escuela

-Bien, los puntos estan empatados en tres personas...-  Dijo el profesor Lee -la siguiente respuesta valdra en doble de puntos, por lo que decidira al ganador de la competencia y las olipiadas de algebra...-

Todos estabamos preparados y emocionados, atentos a la pregunta pero antes de que logrará decir algo mas, se escucharon un par de disparos en el auditorio. Todos nos agachamos por instinto y acto seguido los gritos de los espectadores no tardaron en aparecer.

-¡A callar todo mundo!- se escuchó la voz de un joven que estaba enmascarado, volvio a tirar disparos al aire para terminar el aboroto entre los espectadores y que quedáramos quietos  -¡Busquen a Nakamoto! La necesitamos viva...- acto seguido sus acompañantes empezaron a pasar por los asientos buscando de alguien, las chicas y chicos que estábamos en el escenario nos escondimos debajo de las mesas por orden del profesor Lee, quien se escondió detras del pódium. Por los nervios se le calleron sus lentes y cuando quise tomarlos, sentí una mano sobre mi hombro, palidecí, temía por mi vida. Aquella persona enmascarada me tomo de la cara observando cada parte de mi rostro.
-¡La he encontrado!- grito una joven, la voz se me hacia conocida pero no dije nada por que no quería morir en el momento.

Acto seguido un enmascarado alto subió al escenario donde me encontraba y me cargo como si no pesará nada, como una frágil pluma de ave en el aire. Salieron corriendo y amenazando a todo mundo con matarlos si reportaban lo sucedido.

Me colocaron en una camioneta negra y con vidrios obscuros, subieron todos a dos camionetas y empezaron a salir del estacionamiento de la escuela. Solo podia ver a lo lejos mi escuela y el como dos tipos hablaban con radios portatiles.

-La tenemos jefe, vamos al oungo de reunión. No podemos tener la siempre o nos encontrarán-
-Entendido, cierren sus salidas. Es inteligente y no quiero error en este plan, fuera.- se escucho a traves de la radio. El mismo tipo que me habia cargado y llevado a la camioneta, sacó un par de cintas atando mis manos y piernas
-¡No! ¡Ayuden me por favor!- gritaba lo mas que podía, sabia que no serviría pero tenia que hacerlo, no quería morir -¡Ayuda!- me coloco una mordaza para que no siguiera gritando, aun asi logre morderle la mano.
-Ahhss... Maldita, solo por qué eres esencial y te quieren en el mejor estado...- dijo el tipo enmascarado tomando me del rostro, empece a llorar del dolor y miedo. No sabía lo que ocurría o el por que me ocurría a mi...

-¡Mierda!-  se escucho del conductor quien maniobró y chocó la camioneta contra un edificio, el golpe fue grande pero el enmascarado me abrazo protegiendo me de los vidrios rotos y el impacto -Noker, cuida de la chica. Te daremos tiempo, llevala al punto...- dijo uno de los chicos que se encontraba en la camioneta para salir y empezar una balazera.

-Señorita, necesito que me escuche...- dijo Noker, o así lo habían llamado los otros, mientras me quitaba las cintas de los pies, manos y boca -necesito que me sigas, debe vivir pase lo que pase... Pero sigame, la mantendré a salvo.- no es que me quedarán grandes opciones, así que dicidi confiar en el y seguirle.

Nos escabullimos por calles y callejones, llegamos a un punto sin salida, solo paredes y edificios y una pequeña ventana que daba a un sótano.

-Tienes que entrar- me dijo mirando a todos lados mientras apuntaba con un arma. Negue con la cabeza, ni de broma entraría por una ventana tan pequeña, por que si, yo no era delgada y eso hacia que me deprimiera aun mas. -Hazlo ¡ahora!-  me grito mientras disparaba a alguien que venia corriendo hacia nosotros. Me metí a la pequeña ventana como pude y cai sobre un par de escobas y estropajos, mi uniforme quedo atorado y deshecho por la ventana, estaba en shock por la situación. ¿Debía huir ahora que nadie me vigilaba? O me quedaba ahí esperando a ese chico, ¿me matarían si voy con quienes le disparan a mis secuestradores?  -¿Qué haces aquí? ¡Es tiempo de irnos!- Noker tiró de mi brazo oara salir del lugar, el tiempo habia pasaso que no logre caer en cuenta cuando es que habia entrado...

-Tu brazo...- dije suavemente mientras nos escondiamos en una habitación, al parecer era un edificio abandonado.
-Dejalo así, estoy bien...-  se callo mirando por el pasillo, me volvió a tirar del brazo para ir a otra habitación mas alejada y escondernos mejor
-Estas sangrando...-  volví a repetirle, toque su brazo -debes detener esto...- me miro y escuche una sonrisa, ¿Por qué sonreía su estaba lastimado?
-Estare bien, solo necesito que me digas la verdad... -  me tomo de los hombros, esta vez con mas delicadeza que cuando estábamos en la camioneta  -Dime que recuerdas todo, que sabes cual es la 'Ley De Serratas'-
-¿La ley de que?...- en definitiva estaba perdida
-La Ley De Serratas, por favor Kagome tienes que recordar. No dejes que la borren de tu dinastía, prometiste ser mi amiga y estar juntos en esto...-
-No se de que me hablas... ¿P-por qué me preguntas de eso?- me estaba confundiendo, al parecer la herida ya le estaba afectando.
-¡Vamos Kagome!- me zarandeó con fuerza -recuerda que es la Ley De Serratas. La necesitamos... Te necesitamos...-
-Y-yo no se que sea eso, Noker...- estaba por empezar a llorar, me estaba lastimando y no sabia que era a lo que se refería.
-Kagome, por favor...- se empezaron a escuchar pasos y gritos fuera de la habitación, pronto llegaría alguien a encontrarnos  -Solo prometeme que cuando lo recuerdes, no se lo contarás a nadie...- se escuchaban su llanto, su agarre empezó a aflojarse y solo pude abrazarlo. Me daba nostalgia el escucharle llorar, el verle herido y que se preocupara por mi. -No confies en nadie... Necesito que lo prometas, Kagome...-
-Lo prometo...- susurre en su oido
-¡Quietos los dos!-  la puerta de la habitación fue abierta con brusquedad, los pasos se escucharon por toda la habitación. Un par de manos me separaron de Noker y otros lo aprisionaban para que evitará escapar.  -Señorita, ¿Se encuentra bien?- dijo el señor de cabello plateado mientras recusaba si estaba herida, solo pude asentir ante su pregunta mientras veía como se llevaban a Noker... ¿Qué era lo que estaba pasando? Y ¿Por qué a mi!



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uwu ¡Regresé con esta historia! Ya después de casi tres años, era tiempo de seguirla y terminar la, espero les guste mucho kokoritos por que a pesar de que he mantenido la idea central, he modificado algunas cosas en cuanto a redacción y a la trama, para poder desarrollarla bien.
Ya saben que el cliché no va conmigo uwu asi que, se verán grandes cosas por aquí, esperenlo muy pronto.
—KST

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⏰ Última actualización: Oct 09, 2020 ⏰

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