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Entes que emanan palabras gélidas, Abrazos tan escarchados, Miradas de invierno y el frío sólo es bien de sentir cuando el corazón está caliente.
Ven curame y que parezca que me lastimas. Ven ríete que todo parezca una linda mentira, quiero ahogarme en tus lágrimas.
Viva lo que me hace sonreír, exigir el límite para llegar a donde ayer no pude ni ver. Se que estaré lejos de mi sueño. Mañana solo faltará un paso.
Déjame en un día soleado y visítame en una tormenta. Olvídate del los sonidos aprendamos a vivir el tacto. Comamos sin miedo al relleno de palabras, compartamos las miradas y vivamos el mismo sueño.
Quiero ver el café en mi taza mientras veo el café de tus ojos. Solo se que viviré en insomnio si me vuelvo siego. Te cantaría como himno aunque odie los deberes en las mañanas. Tendría la vida más extensa si solo me quedaran tres segúndos a tu lado.
Capaz debí soltarte antes que pierda la cabeza. Ahora me pesa pensarte como dejoyado.
Con una carta de salida y un latido en la mano, en frente de miles de soldados, soldado a esperarla. Sus palabras son banderas blancas a mis guerras, solo que se fue en retirada y yo como si nada morí en la trinchera.
Soy un títere de mis sentimientos, el lamento de un sabio sin labia pero con rabia de gritar todo el tiempo.
Me siento de otoño dónde solo florecen las personas Una estación donde el frío no es tan gélido, dónde el mérito es cambiar y el calor es lo justo para brillar.
Quiero el lujo de ver el mar, el sol y la luna. Quiero el truco burdo de amar si tomar para soñar que es la vacuna. Aunque sé muy bien que el tiempo del bien no dura.
Tengo dudas y muchas metas. Tengo cinco personalidades y una es ser poeta.
Que lluevan nuestras caras que la tormenta nunca acaban de pasar. Son estaciones pero tranquilo siempre hay algún techo para nuestro sentimiento Aunque bajo de ello solo estemos nosotros mismos.
Podemos creer que somos mejores o podemos herirnos. Solo tenemos que amarnos y creer que el mundo es el enemigo.
Tenemos que pintar las razones como los colores de tus dias, omitir el prejuicio cuando se es feliz. Vestir según el color de tu vida y traspasar tus valores como tú raíz.
Parece que las ganas van en cardumen, o van con todo o sólo no hay nada. Sí es que quiere mi latido la tiro a mi suerte Porque la muerte no eligió cuidar mi vida.
