Elementos diferentes, sentimientos iguales (Willyrex y tu)

Capitulo 16

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¡Maldita sea!, estaremos atrapados en este bosque de mierda durante mucho tiempo y ni siquiera hemos ideado un plan. ¿Tan difícil es salir de aquí?, ¡por supuesto que si!.

Guillermo y yo hemos estado inspeccionando cada rincón, cada esquina de este bosque durante semanas y no hemos conseguido encontrar ninguna forma de salir de aquí. Pero por suerte, habían y hay varios animales a los cuales poder cazar y sobrevivir durante todo el tiempo que estaremos en este asqueroso lugar.

Para empezar, necesitas ocultarte antes de que anochezca, ya que las noches aquí son peligrosas, pues no puedes salir ni un minuto por causa de las almas perdidas que rondan a esas horas en busca de cuerpos a lo cuales poder poseer. Asi de aterrador era este lugar.

Lamentablemente nuestros poderes no funcionan muy bien, necesitamos rayos de luz, que contubieran vida, lo que no se podía encontrar en este lugar.

La vida... aquí... no significaba nada.

Con suerte puedo hacer esferas de hielo por el agua que hay en la brisa de la atmósfera, pero era un gran problema para Guillermo, ya que el necesita un ambiente un poco mas seco y caliente, lo cual se le dificultaba mucho mas.

.-Bien, es mi turno de ir a cazar. Si encuentras una salida, no te olvides de la ruta que tomaste-.asentí.-te veo en la cabaña-.se transformo y corrió hasta adentrarse al bosque.

Yo en cambio, me dirigí al lago que había al otro extremo de la cabaña. Deje mi vestimenta tendida en una roca dejándome solo con las vendas que cubrían mi pecho y los delgados pantalones cortos que llegaban a la altura de mis glúteos. Entre poco a poco al lago, sintiendo como el agua acariciaba cada parte de mi piel, causándome pequeños escalofríos. Al entrar completamente, nade un poco junto a algunos peces que estaban dispuestos a seguirme, pero tampoco faltaban los que huían de mi. Esta especie de peces es muy peculiar, por su cambio repentino de color al sentir una emoción.

Después de nadar durante un rato, decidí relajarme, dejándome llevar por las corrientes de agua mientras miraba hacia el cielo, que yacía gris por las nubes grises cargadas de lluvia, aunque en ningún minuto del dia, la soltara. Cerré los ojos y disfrute mas del momento, escuchando como las corrientes de agua se deslizaban entre las rocas que se encontraban estancadas en el lago y para luego dejarme deleitar con tan bello sonido sumergiéndome en mi propio mar de pensamientos. Sin duda, este era el mejor momento del día. Ojala perdurara así durante todo el día, pero no estamos en un lugar tan apto como para hacer esto diariamente.

(...)

Estaba caminando entre los grandes pastizales color gris, como siempre, el ambiente era húmedo y muy sofocante. Miraba hacia todos lados y solo podía ver la niebla cubriendo todo el bosque. Escuchaba como una ramas crujían cuando yo pasaba por encima de ellas y algunos cantos de cuervos y búhos llenaban el silencio que casi siempre reinaba al bosque. Pequeñas gotas de agua caían sobre los arboles por causa de la gran cantidad de humedad, insectos como mosquitos y libélulas peleaban por ganar territorio, aunque los mosquitos de por aquí, eran un poco mas grandes e indestructibles, lo que daban cierta ventaja en ellos y ganarse así, su pequeño pero triunfante territorio.

Caminaba a un punto indefinido, algo distraída por ir pensando en cualquier cosa, hasta que mi nariz percibió un olor algo extraño, tomando toda mi atención, el olor era algo así como si fuera azufre o humo. Me deje guiar por el olor y pude ver a los lejos una sombra, corrí hacia ella y era una choza pequeña hecha por bambúes y paja con una antorcha iluminando todo aquello que se encontraba a su alrededor. En el techo, sobresalía una chimenea que por esta, desterraba nubes de humo. Me acerque a la choza y camine alrededor de ella analizando cada parte y cada detalle. Al llegar a la parte trasera de ese lugar, mire en el suelo un brazalete con el nombre de Arsen grabado en la parte delantera de este. Al verla, esta empezó a brillar, hipnotizandome con su hermoso resplandor color azul celeste. Luego note como su color empezó a cambiar a un anaranjado rojizo, y así cambiaba constantemente para luego cegarme con una blanca y resplandeciente luz, agache la cabeza para ya no poder ver su brillo pero aun que tuviera los ojos cerrados, seguía viéndola hasta llegar a un punto en donde todo se oscurecía.