Sí, si es con Ustedes(❁'◡'❁)\^o^/( •̀ ω •́ )y

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Jiang Wanyin suspiró por enésima vez ese día, apenas iniciaba octubre y quería pasarlo de la mejor forma posible para su pequeño Jingyi, estaban en cuarentena e iba a ser el primer año en el que Jingyi sería lo suficientemente mayor como para salir a pedir dulces acompañado de sus padres.

Sin embargo, el destino era una perra y el aislamiento impedía a su pequeño poder disfrutar a placer de la fiesta, ¡Ni siquiera podía invitar a sus amigos a la casa a una pequeña fiesta por miedo a que su bebé fuera contagiado! ¡Realmente no sabía como hacer para que su hijo pudiera tener al menos un buen recuerdo de este Halloween!

- ¿Agotado? – escuchó hablar a su esposo detrás de él.

Volteó a mirar al atractivo hombre que le hablaba, Lan Xichen le sonrió y Jiang Cheng olvidó por un momento su frustración para devolverle la sonrisa que sólo dedicaba a su esposo y a su hijo, vio que sostenía dos tazas en las manos, Lan Huan le extendió una que contenía chocolate caliente, acercó una silla para sentarse cerca de su A-Cheng y dio un sorbo a su café mientras esperaba a que su lindo esposo le contara sus preocupaciones.

- Sólo estaba pensando A-Huan, ¿Cómo haré para que Jingyi no llore porque este año no vamos a ir a pedir dulces? Le hacía mucha ilusión disfrazarse. – dijo Wanyin después de darle un sorbo a su bebida que confortó un poco su corazón, su bebé tenía debilidad hacia los dulces como él, a diferencia de Xichen que no era muy afecto a éstos a menos que fueran hechos por su Wanyin, por eso realmente iba a ser difícil para Jingyi un Halloween sin dulces ni disfraces.

- ¿No podríamos hacer una pequeña fiesta e invitar a Shizui y Jin Ling? Son buenos amigos de Jingyi, incluso podríamos invitar al bebé de Mingjue y A-Yao. – Por supuesto que Jiang Cheng había contemplado esa opción, pero...

- No Xichen, Jiejie y Wuxian acaban de regresar del extranjero y sus familias están en cuarentena obligtoria, y el bebé es aún muy pequeño... tal vez sólo haga unos postres...

Se quedaron en silencio por un tiempo mientras pensaban, Wanyin terminó de beber su chocolate cuando Xichen habló.

- ¿Y si hacemos una fiesta de Halloween sólo nosotros tres?

- ¿cómo dices? – dijo Wanyin sorprendido e interesado.

- Una fiesta, yo hago los disfraces, tú te encargas de los aperitivos con Jingyi y podemos incluso ver películas animadas sobre Halloween, como una pijamada. – el ánimo de Jiang Cheng subió conforme su amado esposo hablaba, ¿Cómo no había contemplado esa posibilidad? Incluso su hijo había manifestado su interés por ver con sus padres "The Nightmare before Christmas" después de que su tío Wuxian había querido asustarlo con el video de la canción de entrada y terminó despertando el entusiasmo de su hijo.

- ¡Es una gran idea A-Huan! ¿Cómo no se me ocurrió? ¡Puedo hacer dulces personalizados para Jingyi! ¡Y podremos disfrazarnos como la película que tanto quiere ver! ¡Eres un genio Xichen!

- Gracias amor... Merezco un premio por mi brillante idea ¿verdad? – dijo con una sonrisa torcida

- ... ¿Es en serio?

- En este mundo nada es gratis, podrías hacer lo mismo que en mi cumpleaños, guardé bien el moño...

- Si me ayudas como dijiste te daré tu recompensa el día después de Halloween, tal vez usaré a Zidian... – Dijo Wanyin en un tono sensual acercándose al oído de su esposo "dos pueden jugar este juego A-Huan" pensó con malicia.

Xichen tragó saliva y apretó sus dedos alrededor de su taza de café ya frío, intentó tocar a su hermoso esposo con su mano libre, pero A-Cheng se alejó levantándose de su asiento con un ligero contoneo y anunciándole que iba a despertar a su hijo de su siesta marchándose mientras movía sensualmente sus caderas todo el tiempo en el que estuvo en el rango de visión de A-Huan. Xichen se mordió los labios mientras contemplaba el esponjoso trasero de su esposo e imaginaba todas las posibilidades al ser recompensado, incluso considerando usar el viejo látigo que su esposo usaba para defenderse cuando era adolescente.