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Cree hogueras de recuerdos amargos que luego se transformaron en cenizas las cuales se llevó el viento del olvido.
Caí en mi propia monotonía y de ahí surgieron tsunamis que devastaron casi todos mis principios convirtiéndome en un final de media tinta.
Cada uno de los árboles que me molestaban la clara visión que nunca tuve los talle uno a uno, tronco por tronco, rama por rama para ver mejor algo infinito que su reto era ir descubriendo.
Arrase con inocentes y convertí en aguas bravas todos los océanos que eran balsas. Puedo escuchar aún el sonido de las olas golpeando las rocas duras y secas que nunca se movían.
Y todo eso ocurrió por qué llegó un día en el que nada era diferente y en vez de ser yo quien empezara a intentar volar por encima de los árboles y nadará entre sus tsunamis decidí destruir todo aquello que se mantenía vivo a mi lado.
Ahora lucho por lidiar conmigo misma para que todo lo que no está muerto descanse en paz en el cielo de armonia con nubes de agua de recuerdos bonitos que apagan hogueras.
Y convierto tsunamis en cascadas de las que inocentes puedan beber y saciar su sed de venganza, ahora, los océanos son mares inmensos que empiezan en ti y no se sabe donde acaban.
Por qué ahora soy yo quien érase una vez y nunca fin.

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⏰ Última actualización: Oct 16, 2020 ⏰

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