Capítulo 49 - Volviendo

472 22 1
                                    

Narra Ross:

¿Pero qué mierda estaba sucediendo en mi habitación? Porque había una chica en mi cuarto. ¿Quién la dejo pasar? ¿Nina? No creo. Ella no haría pasar a nadie sin antes consultarme. No entiendo como llego hasta acá. ¿Cómo mierda entro? ¿Qué quiere de mí?

Ross: ¡Ándate ya de mi casa! – gritándole.

Xxx: ¡No! – sacando una pistola de la campera - ¡Quédate quieto o te disparo! – me quede en shock, pero algo me vino a la mente, mi cabeza me dolía.

Ross: ¿April?

April: ¿Ross? ¿Me reconoces? – sorprendida.

Ross: ¡April! ¿Cómo escapaste? – ignorando su pregunta por otra.

April: No importa eso, ahora quiero que vayamos despacio para el living, si haces algún ruido o algo extraño te disparo.

Ross: Está bien, tranquila – yendo hacia donde me dijo - ¿Qué quieres de mí?

April: Quiero que me digas que te irás bien lejos conmigo y dejaras a Laura.

Ross: ¿Qué? ¿Estás loca? Aunque no la recuerde todavía y la sienta como una extraña, no me alejare de ella ni de nadie.

April: Si no lo haces, sufrirás las consecuencias.

Ross: ¿Con matarme? ¡Hazlo! ¡Dispárame! – desafiándola.

April: A vos no, pero a otra persona si – sonriendo con una sonrisa malvada.

Ross: ¿A quién?

Justo tocan el timbre, April va a atender desde el portero y le abre, no se a quien, esperamos unos minutos y golpean la puerta, entonces le doy las llaves y va a abrir, era Laura. ¿Laura? ¿Qué hacia despierta y a esta hora en mi departamento?

Ross: Laura, ¿Qué haces acá? – mirándola.

Laura: April me llamo por teléfono y dijo que estaba en tu casa, vine corriendo para que no te pasara nada. ¿Estás bien? – preocupada.

Ross: Si, estoy bien.

Laura: ¡Qué bueno! – acercándose y abrazándome, recibí el abrazo - ¿Te acordas de ella? – señalándola, asistí – Ah, mejor, así no te tengo que explicar todo.

Ross: Si, lo sé. Me acuerdo que estaba en la cárcel conmigo, pero distinta y que después me la encontré en rehabilitación, luego que era amiga de Emily, nada más.

Laura: ¿Recuerdas cuando te disparo?

Ross: No, esa parte no.

April: Bueno, bueno, ahora que están los dos juntos, quiero que Ross vea como mato a Laura – apuntándole.

Ross: ¡No le hagas daño! – poniéndome delante de Laura, protegiéndola – Ella no te hizo nada.

April: ¿Nada? Me saco al amor de mi vida, a vos. ¿No te parece suficiente eso?

Ross: Ella no te saco a nadie.

Laura: ¿Qué paso con la carta que te llego ese día por correo?

April: La tengo guardada, pero eso no quiere decir que cambie de opinión, porque lo hice para luego escaparme de nuevo.

Laura: ¿De quién era la carta?

April: De Ross.

Ross: ¿Mía?

April: Si, me la escribiste el día que me conociste en la cárcel.

Ross: ¡Cierto! – recordando, es verdad, yo le escribí una carta para decirle que no importa lo que digan los demás sobre ella, porque no hablaba con nadie y era la rara, que para mí fue un honor conocerla y me pareció muy simpática y divertida.

Un amor de famaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora