Una tierna historia romántica basada en el año de 1969, un año el cual forma parte de la época dorada de la Aviación Comercial, y un año en el que cualquier chica deseaba en ser una azafata de vuelo; pero, en el caso de una joven eriza de veinticuat...
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Eran más de la cinco de la tarde, y mientras que Shadow se hallaba preocupado y asustado por su pareja, Mary se encontraba junto a discutiendo con Blaze sobre la relación que tenían entre sí, a lo que Silver no entendía el porqué su abuela y la tía Blaze se llevaban de mala manera, algo que lo hacía sentir muy triste. La rubia miraba con tristeza a la gata lila, la cual le estaba enumerando todas las malas acciones que había hecho la mayor contra ella cuando iba aún a la escuela y que el único que la apoyó en aquellos días fue Shadow. Mary no se negaba a nada de lo que decía Blaze, y siempre le daba la razón, dejando a una Blaze sorprendida.
A veces las personas que supuestamente están arrepentidas, se negan ante las malas acciones que han hecho, o eso era lo que Blaze pensaba, ya que también recordó a sus padres, los cuales siempre le piden perdón a la gata lila, mas se negan haber cometido malas acciones ante ella. Blaze no sabía qué decirle a la madre de su amigo, la cual por poco más, y le ruega de rodillas a la gata por su perdón. Entonces, Blaze recordó las palabras de Shadow, las cuales consistían en que ya era hora de olvidar todo lo que pasaron e intentar llevarse bien con Mary.
Los erizos se hallaban sentados en los muebles de la sala de Blaze, la cual había exhalado un largo suspiro antes de dirigirle alguna palabra a Mary respecto a su perdón, dejando a una Mary con esperanzas de ser perdonada. "Está bien"; dijo Blaze con mucha pena reflejada en su voz, a lo que la rubia la miró confundida. ¿Está bien qué?; le preguntó Mary, y Blaze soltó un gruñido por falta de paciencia. Estaba a punto de contestarle y aceptar su perdón, pero de repente, el ruido del teléfono las interrumpe. Blaze se pone de pie, y contesta a la llamada, sin idea de lo que había sucedido con la pareja de erizos.
—¿Sí? ¿Hola? ¿Quién habla? —contestó Blaze.
—Blaze... —mencionó Shadow con una voz quebrada.
¿Qué habrá pasado ahora?; se preguntó a sí misma ya que, cuando el erizo negro solía tener los problemas con Amy anteriormente sobre su falta de comprensión, este acudía a ella a través de una llamada para pedir consejos. Blaze, como suele jugar el papel de la hermana mayor, le hablaba a Shadow con suma comprensión, y aunque esta no tenía mucha experiencia con el tema, hacía todo lo posible para poder ayudarlo. Pero Blaze no sabía que esta era por otra razón grave.
—¿Shadow? ¿Qué te pasó? —le preguntó Blaze confusa.
—Mary está allí contigo, ¿cierto?
—Sí, ¿por qué?
—¿Me la puedes pasar al teléfono? Por favor —pidió Shadow aún con aquella voz.
—¿Para qué? ¿Y por qué tienes esa voz? ¿Te han golpeado o qué? —Preguntaba la gata lila.
—Ocurrió un accidente con Amy, y ahora se halla en el hospital... me quedaré hasta tarde con ella, y quiero que Silver esté con Mary —informó Shadow, dejando a una Blaze preocupada.