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Después de una hora que se me ha pasado como si fueran dos minutos, seguimos sentados en el sofá con unos chocolates calientes mientras hablamos sobre cualquier cosa

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Después de una hora que se me ha pasado como si fueran dos minutos, seguimos sentados en el sofá con unos chocolates calientes mientras hablamos sobre cualquier cosa. El tiempo se me pasa  muy rápido cuando estoy con él, si no llego a mirar el reloj ni me doy cuenta de que son ya las seis.

Nuestro plan de salir a la nieve se ve anulado ante el frío y el atrayente plan de ver una película los dos juntos. Pasa el brazo por mi hombros mientras uso el mando para buscar una película que nos guste y me atrae hacia él, a lo que yo respondo apoyando la cabeza en él.

Tras un rato se oye la puerta de mi casa abrirse y rápidamente me giro hacia la entrada del salón para ver quien está pasando, se me había olvidado por completo que ya eran casi las nueve de la noche.

-¿Borja? -pregunta una voz femenina desde el pasillo- ¿Eres tú el que está en el salón?

Asoma la cabeza por la puerta y se da cuenta de que claramente no estoy solo, sino que con Auron.

-Oh, hola Raúl. Borja no me había dicho que ibas a venir -saluda sonriendo.

-Buenas tardes. La verdad es que ha sido un poco improvisado -ríe el chico girándose para mirar a mi madre.

-Si quieres te puedes quedar a cenar, he comprado cosas para hacer una pizza -lo invita. 

Ahora mismo me estoy muriendo de la vergüenza, menos mal que mi madre no ha visto como estaba tumbado con Auron porque ahí si que me habría puesto rojo como un tomate.

-No hace falta, no quiero ser una molestia -rechaza él con bastante amabilidad.

-Ya sabes que  no lo eres. Llama a tus padres y pregúntales, diles que luego te llevo yo, que se queden tranquilos.

-Bueno, vale, muchas gracias -responde sonriendo de forma tímida mientras saca el móvil.

-En media hora empezamos a hacer la cena ¿vale?

Asentimos los dos y volvemos la mirada a la televisión. Por debajo de la manta pone su mano en mi pierna y continúa buscando el contacto de su madre para preguntarle si le deja quedarse. Después de una corta negociación al teléfono su madre le deja y este sonríe confirmándomelo.

Terminamos la película y como me ha dicho mi madre, vamos a hacer la cena. Lo que empezó siendo una forma sencilla de hacer pizza al final se ha convertido en... En acabar con la ropa pérdida de harina y con queso por todas partes.

-Voy a ir a comparar a la tienda de al lado más queso -informa mi madre tras el pequeño incidente.

Sale de casa y nosotros decidimos que estaría bastante bien recoger lo que acabamos de hacer.

-Las risas no han faltado -bromea Auron mientras barre el suelo.

-Pero el queso sí.

-Sí no me hubieras movido lo habría hecho bien -responde.

-Te he movido porque no sabes poner bien el queso. No es mi culpa que no sepas esparcir los ingredientes -río.

-Eres de lo que no hay -suspira riendo.

-Sí, pero por algo te gustaré.

Me acerco a él y le doy un corto beso en los labios que lo pilla por sorpresa. Este sonríe y me devuelve otro beso para luego terminar de barrer el suelo.

Después de cenar, Raúl insiste en ayudar a terminar de recoger la cocina, pero mi madre rápidamente se lo impide, ya que es el invitado. Luego de un rato lo lleva a su casa y yo espero a que esta vuelva.

Cuando llega se sienta conmigo en el sofá y se pone a ver la tele un rato hasta que decide que es momento para preguntar cosas.

-Una pregunta... No quiero entrometerme en tu vida, pero ¿Te gusta Raúl?

-¡Mamá! -exclamo- Eso es entrometerte mucho en mi vida -sigo notanto que el calor sube hasta mis mejillas.

-Vale, lo siento. Sólo tenía curiosidad -responde quitándole importancia al asunto-. Quiero que sepas que a mí me da igual si te gustan los chicos, las chicas o los dos. Si no me lo quieres decir por eso, que sepas que me da igual...

-No es por eso solo que... Mira da igual, sí mamá, si me gusta, y yo también le gusto. Y me pidió salir hace unos días, pero no os lo dije porque era muy pronto ¿Contenta? -admito sin dudar. No es nada malo de admitir, solo me da un poco de vergüenza.

-Ay, cuanto me alegro. Raúl es un chico muy educado y además guapo, me alegro de que estés con él -dice sonriendo de oreja a oreja.

-¿Gracias? -respondo un poco avergonzado-. Creo que me voy a dormir.

-Buenas noches -me da un beso en la frente y me levanto para ir a mí habitación.

Para mi sorpresa en mi cama está tirada Lana mirando su móvil sin darle mucha importancia a que yo esté. Me acerco y me doy cuenta de que no está mirando su móvil, sino el mío.

-¿Qué haces con eso? -pregunto quitándose lo de las manos sin dudar.

-Tranquilo hermanito, lo acabo de encender. Sólo he visto unos cuantos mensajes.

-¿Te sabes mi contraseña? -pregunto metiéndome en los ajustes para cambiarla.

-Puede que seas muy predecible. Ah, y te ha escrito tu novio -respondo sonriendo de forma pícara-. Le iba a mandar una foto para que viera que soy yo, pero has llegado y no me ha dado tiempo -ríe.

-Eres lo peor, fuera de mi habitación.

-Pero... Yo quiero que me cuentes cosas, me duele que no me hayas contado a mí la primera que sales con él -lloriquea poniendo cara de cachorrito.

-Mañana te cuento lo que quieras, ahora fuera y buenas noches -le cierto la puerta casi en la cara y me tumbo en mi cama.

Esta chica me conoce demasiado bien, no entiendo cómo ha podido adivinar mi contraseña tan fácilmente. Decido calmarme un poco y responder a lo que me han escrito mis amigos y Raúl. Me gusta que ya no esté en el rango se mis amigos, sino en el de mi novio.

Flowers To Thank You [Luzuplay]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora