Camelias para Ti - Fanfic BNHA #8

Capítulo 18(final): "Camelias para Ti"

La mañana poco a poco se hacía presente, el sol, radiante como de costumbre cubría con sus rayos de a poco toda la cuidad y se colaba sin problema alguno entre los cristales de los grandes ventanales del hospital, Izuku yacía con la cabeza tendida en la camilla de Shouto mientras ambos dormían de manera placida con una de sus manos entrelazadas, la madrugada había sido ajetreada, estaban agotados, pero finalmente podían estar juntos.

Una de las enfermeras entró a la habitación del muchacho de cabellos bicolor para los exámenes de rutina y no evitó enternecerse ante la escena, pero de a poco comenzó a mover al de pecas despertándole.

-Disculpe, pero, ¿Puede salir un momento?, debemos hacerle algunos exámenes al paciente, dependiendo como estos salgan podrá venir durante la tarde por él

El peliverde asintió rápida y tímidamente sonrojado, se levantó de a poco soltando la mano de Todoroki el cual al ya no sentir esa calidez en su palma abrió los ojos viéndole, de inmediato Midoriya sonrió y murmuró.

-Iré a casa a ver a bola de nieve, estaré aquí en un rato mas para llevarte a casa

Al oír lo último el rostro de Shouto se iluminó y sonrió con calma, asintiendo, acto seguido Izuku abandonó el hospital y caminó hasta la casa, no evitaba pensar todo el tiempo en sus pertenencias, en que debía ir a recuperarlas, pero también tenía miedo, el acto temerario que había cometido para salir de allí casi le había costado la vida, pero, ¿Cómo iría a reclamar sus cosas?, ¿Qué debía decir exactamente?, no quería la señora Bakugo lo odiase, porque sentía interiormente que ella no le creería, tenía miedo. Alzó la mirada un tanto y divisó los edificios al final de la subida empinada y se apresuró para luego ir por Shouto.

Al llegar, en su puerta quien le esperaba no era nada mas ni nada menos que la rubio cenizo, al verla palideció y tragó saliva de los nervios, intentó sonreírle para saludar, pero la mujer corrió hacia el con sus pertenencias en las manos y le abrazó con fuerza rompiéndose en llanto, mas cuando lo vio con algunos moretones, rasguños y el brazo vendado, seguro por la fea caída que tuvo.

-Midoriya, pequeño, perdón por todo... por todo

Soltó mientras sus lágrimas caían en las ropas del peliverde, este algo confundido, pero al final comprendiendo todo comenzó a llorar también abrazando de a poco a la mujer.

-Lo siento

Murmuró, Mitsuki se apartó unos momentos secando sus lágrimas y musitó.

-Tu no tienes la culpa de nada Izuku-kun, el culpable es mi hijo, con Masaru ya nos hicimos cargo y hoy temprano lo llevamos a un reformatorio... tanto tiempo...

La voz de la de ojos escarlata se quebró, pero intentó mantenerse fuerte, igual le dolía toda esa situación.

-... tanto tiempo que estuviste aguantando esos horrores y nosotros sin darnos cuenta... ¿Podrás perdonarnos algún día?

El de pecas sonrió como siempre solía hacer, sin rencores, sin remordimientos, el hecho de que la señora Bakugo haya sabido la verdad le quitaba el miedo y un gran peso de encima, Midoriya tan solo se acercó y abrazó nuevamente a la mujer, aún así, siempre estuvo agradecido de la amabilidad y preocupación de Mitsuki.