HARRY PDV.
—¡Come, come, come! — gritaban mis compañeros mientras metía pedazos y más pedazos de pan a mi boca, todos estaban en un círculo alrederor mío, viendo como cumplía el reto.
—¡Lo he superado!, ¡Me debes dinero, Jamie! — dije mientras tragaba lo último que quedaba de pan en mi boca.
—¡Eres increíble, hermano! — dijo dándome unos leves golpecitos en el hombro mientras me felicitaba.
Iba a contestar, pero un grito de la jefa hizo que todos paráramos nuestra rutina.
—¡Dejen de jugar, idiotas!, ¡Scott, Taylor y Fox, vallan a preparar más pan de lo que Styles comió y Styles a atender! — gritó ella.
—Si... — dije.
—¡Si qué! — me interrumpió.
—Si señorita — respondí, rodando los ojos.
Así era mi vida todos los días, un duro trabajo en la panadería, para que todo nuestro esfuerzo fuera en vano, ya que casi no teníamos clientes.
Todos se habían ido al lado del supermercado, el que se estrenó el año pasado, dejándonos algo en quiebra a nosotros.
Me puse frente a la caja registradora, esperando a que algún alma viva se acerque, pero nada, así estuve durante horas y horas, y lo único que se había acercado era una pequeña niña castaña con su madre preguntando si había cerveza, pero claro que no tenemos. Somos una panadería, no un pub. Además, si viene a pedir cerveza, ¿Por qué en frente de su hija, acaso se iba a alcoholizar frente a ella?, claramente la madre era una estúpida, pero vale, todos cometemos erróres, y el de ella debe ser el alcohol.
Me había quedado en la panadería hasta que tuvimos que cerrar, me quité el delantal con sumo cuidado, ni siquiera sabía por qué, siempre me sacaba la prenda y la tiraba por algún lugar del local. Estaba solo, mi jefa se había ido a su casa y los demás chicos se aburrieron tanto que escaparon, yo, como el joven bien educado y responsable que soy me quedé, además no puedo perder el empleo, ya que el 25% de la mantención de la familia es por el dinero que yo gano, el 50% lo trae mi padre y mi madre juntos y el último 25% lo aportaba Gemma, mi hermana.
—Disculpa — dice una dulce voz a mis espaldas —¿Estás cerrando? — pregunta, giro sobre mis talones y, oh Dios.
—S-si, pero puedo atenderte — dije mientras lanzaba un suspiro, porque, ¡Dios mío! Esos ojos me hipnotizaban, y esos labios me llamaban para deborarlos.
—Claro, Harry — dice con una sonrisa, pero, ¿Y mi nombre quien se lo dijo? —Lo decía en la etiqueta del delantal que traías — rie, y cada segundo que salía una carcajada yo cerraba los ojos, disfrutando ese armonioso sonido.
—¿Qué necesitas? — pregunté.
—Sólo algo de pan, no te preocupes — me coloqué los guantes para tomar pan, pesarlo, y luego se lo cobré al chico rubio, pero sinceramente, yo se lo daría gratis a cambio de un beso.
—Quedate con el cambio — sonríe, y sonrío de vuelta, pero esque, es imposible no hacerlo con ese rostro angelical.
Se va de la tienda luego de pagar, y prácticamente me regala algo de dinero, ¿Le he interesado, o sólo fué amable?.
Realmente ni siquiera me importa, sólo tomo la chaqueta que está colgada en el ropero de empleados y cuelgo mi delantal, pero esperen, ¿Cómo supo ese rubio mi nombre si ni siquiera llevaba puesto el delantal?.
Lo debe haber escuchado de Jamie, de Félix o de Tommy, eso es seguro.
Bueno, tomo mi chaqueta y me dirijo hasta la puerta del local, ya revisando si la caja registradora (que en realidad tenía muy poco dinero como para que se acerquen a robar) y salgo, cerrando con llave la puerta.
Camino hasta el paradero de autobuses para ir a mi casa, pero paro en seco para ver la escena.
Era el chico rubio, esperando en el mismo paradero que yo.
Sinceramente me pondría a saltar como una mariposa loca, pero no, solamente estoy parado en mi lugar. Él se da cuenta de que lo están observando y gira su cabeza hacia mi dirección, pero yo soy más rápido y me escondo de espaldas tras un árbol.
Intenta ver detrás del árbol, pero lo deja pasar y sigue mirando al frente. Yo espero a que el autobús llegue, para subirme al final de todos los asientos, observando al rubio desde lejos.
En una parada no muy cercana él decide bajarse, y sabiendo que estoy muy lejos de mi hogar, salgo del autobús, siguiendo su paso.
Sigo al rubio por todo el pasaje, de vez en cuando gira su cabeza, sospechando que alguien lo sigue, comienza a correr, y yo, como todo un estúpido, sigo su paso.
Entra corriendo en una pequeña casa para uno, ingresa las llaves temblorosamente y entra de un salto.
Ahora si estoy frito, he seguido a un rubio desde mi trabajo hasta su casa, y yo ni siquiera sé donde estoy parado, sólo sé que muy lejos, demasiado para mi opinión.
Tomo mi teléfono, lo desbloqueo con mi respectiva clave. Activo la cámara, y apunto a la pequeña casa de un piso que está frente a mi, y luego se escucha un pequeño sonido.
¡Click! Una foto de frente.
¡Click! Una foto del número de casa.
¡Click! Una foto de la ventana, en la que un torso blanco como porcelana se asomaba, desnudo, y despertando mi excitación.
Jeadeé, esa imagen siempre la tendría guardada en los recuerdos de mi mente.
Después de unas horas, en las que estaba sentado bajo la puerta de la casa, las luces de la habitación del rubio se apagaron, me asomé por la ventana y la imagen más angelical que he visto se posó frente a mis ojos. Él, durmiendo.
Nuevamente saqué mi teléfono y activé la cámara.
¡Click! Una foto de ese hermoso rostro.
La ventana estaba abierta, y aproveché para invadir su hogar, una pequeña habitación, con una mesita de noche en donde había pequeñas cosas personales, como su teléfono.
Tomé su teléfono y anoté su número en el mío, luego lo dejé en el mismo lugar en el que estaba.
Miré al rubio, creo que jamás ví una figura más hermosa, más tierna y más admirable.
Acerqué mi cara a la suya y cerre los ojos, aguanté la respiración unos pocos segundos para sentir su aliento sobre mi boca, y luego, posé mis labios sobre los suyos, lentamente, los moví, sin recibir respuesta de él. Pero lo disfruté, disfruté su dulce sabor dominando mi boca, disfruté su suavidad, disfruté todo de él.
Tal vez sea un maldito loco, pero me gusta estarlo.
∆∆∆∆∆∆∆∆∆∆∆
Hola :). Es algo corto, lo sé, pero es así porque necesito que entiendan algo de como va. So... Así es. Ojalá les guste.
¿Quién será el depredador y quién será la presa?.
Pondré un mínimo de votos. Primero algo fácil de alcanzar, y cada vez vamos subiendo la cantidad más y más.
+10 votos y sigue :).
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Animals » Narry Storan.
FanfictionYo era el león y él era mi pequeño cachorro... Estaba listo para cuidarlo, para arrancarle la carne a cualquier individuo que se le atreva colocarle un dedo encima... Pero, ¿Qué pasará cuando decida volverlo mi presa?.