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Izuku acababa de salir del colegio, luego de un día infernal. Los amigos de Katsuki le habían tirado todos sus útiles en el suelo y pateado su mochila. Vaya primer día de su ultimo año escolar en la secundaria, solo esperaba terminar y poder graduarse, para ir a la UA. El tenía un buen promedio por lo que podría aplicar perfectamente a esta, a pesar de los comentarios negativos de todos.

Guardo de nuevo todas sus pertenencias, una vez termino se dirigió a un café cercado a su instituto, este lugar era su escondite de todos sus problemas. Desde que abrieron el establecimiento, justo cuando el cursaba el segundo año, se volvió su segundo hogar. Ahí tenia una amiga, la única de hecho, era mayor que él, siempre escuchaba atenta todos sus problemas y le aconsejaba. Gracias a ella pudo superar el rechazo de la única persona que ha amado, pero no es que ya no lo hiciera, sino que aprendió a sobrellevarlo.

Cabizbajo entro al local, donde la chica del mostrador apenas vio al pequeño arbusto llegar se emocionó, sabía que había sido su primer día, por lo que quería saber como inicio su ultimo año.

Fatal.

— Midoriya-Kun, ¿Cómo estás? ¿Cómo fue tu primer día? — inquirió la chica dando saltitos mientras esperaba la respuesta.

— Ashido-San Hola, pues no me fue muy bien, pero estoy completo. — dijo con franqueza, sabía que a la chica no podría mentirle.

— No me digas que otra vez esos bastardos te molestaron, Midoriya deberías delatarlos con tu profesor, no es justo todo lo que te hacen. — decía mientras preparaba una malteada que sabía que a Izuku le serviría como consuelo.

— No le veo caso, que diré, ¿Que por confesar mis sentimientos a mi amigo de la infancia me molestan? ¿Qué por mi orientación me odian? Es mejor si no digo nada y dejo que solo pase, al final se cansaran y dejaran de acosarme. Es mejor así en vez de humillarme más. — contesto, era verdad que más iba a hacer si todos lo odiaban.

Se sentía tan miserable desde que se le ocurrió abrir la boca y confesarle a Kacchan que sentía amor por él, no solo lo rechazo, sino que lo humillo delante de toda la escuela. Ahora todos lo veían como un bicho raro y nadie se le acercaba, pero tal vez era mejor así. Al no tener amigos, no lo volverían a lastimar, o eso creyó hasta que conoció a Mina, una estudiante de preparatoria que para todo problema inventaba una solución y que lo consoló en todo momento.

— Midoriya, ya te dije que no hay nada malo con tu orientación ni estuvo mal decir lo que tú corazón sentía. El único que estuvo mal fue este idiota de Bakugo, te pudo rechazar sin humillarte de la forma en que lo hizo, si que fue tan odioso, un día de estos iré a golpearlo a la salida. — Mina estaba enojada por lo que le hacían a su pequeño amigo, y es que Izuku era un pan de dios que no merecía tales cosas que le hacían sus compañeros.

— No te enojes Ashido-San, tu rostro se ve más hermoso cuando hay una sonrisa en el. — le regalo una sonrisa que hizo a Mina ruborizarse.

Es que el pequeño peliverde era un sol siempre atento y dulce, un buen amigo que la apoyo en una que otra ruptura amorosa, o en algún examen reprobado, dándole consuelo y apoyo moral.

— Está bien, no lo hare porque me lo pides tú. Ahora dale un sorbo a tú malteada y olvida todas tus pesadas cargas. — a lo que un pecoso asintió dando un ligero sorbo a la bebida que la mayor le dio.

Ella mejor que nadie sabia con todo el sufrimiento que tenía el pequeño adolescente frente de ella. Izuku era un chico que a sus 14 años había sufrido de todo, desde un padre ausente hasta la humillación publica, era acosado en la escuela constantemente, aun así, él nunca pedía su inocencia ni la curiosidad por el mundo.

— Ashido-san, ¿crees que algún día alguien me ame? — pregunto con suma tristeza, él deseaba ser algún día amado como lo haría por quien lo quisiera.

— Cariño, claro que sí. Mira que, si yo fuera soltera y sin compromiso, tú y yo estaríamos juntos. — Bromeo la pelirosa y le guiño, a lo que el pecoso soltó una leve risa.

— Pero ya en serio, estoy segura de que encontraras a alguien que te de el amor que mereces. Solo no te desesperes, llegara en el momento que menos te lo esperes. — a completo la chica.

— Está bien, por cierto ¿Cómo va tú relación son Sero? — inquirió mientras jugaba con el popote de su bebida.

— Pues creo que bien, tu sabes que acepte porque hace tiempo que a él le gusto y quise darle una oportunidad. Nos hemos estado viendo por un mes, lo normal. Algunas citas y así. — sonrió mientras pensaba en su ahora novio. — es un chico bueno...

— Pero no sientes nada por él, ¿no es así? — sentencio el peliverde.

— A veces me pregunto si yo soy la mayor o lo eres tú, pero es cierto. Aun no siento nada por él, pero lo hare con el tiempo. — dijo la pelirrosa con determinación.

— Además, no me gusta tampoco nadie de la escuela, tal vez algunos sean guapos, pero no me atraen para una relación.

— Entonces no son tan guapos, para que la gran Ashido Mina no los mire de esa forma. — bromeo el menor.

— ¿Bromeas verdad? Claro que lo son, sobre todo uno con un tono de cabello particular. Aunque todas las chicas se han estado rindiendo en poder conquistarlo, tal vez tenga otros gustos... — y como si el cielo le haya iluminado, se le vino una gran idea a la cabeza, ¿Qué tal si, le presentaba a Izuku este chico? No es como si fuera algo malo, tal vez si era mayor por 3 años, pero no era mucho. Aparte este chico no tenía ninguna relación, así Izuku dejaría de pensar en Bakugo y tener un crush con su compañero de clases.

— ¡¡Ashido-san!!, tierra hablando a Ashido-san... — le toco el hombro su amigo sacándola de sus oscuros planes.

— Sí, perdón, estaba pensando en la entrega de un proyecto que tengo la semana que viene. Y también quiero presentarte a un amigo. — sonrió pensando que Izuku se tragaría su mentira.

— ¿Un amigo? Bueno si es importante para ti, lo será para mí. — le correspondió a la sonrisa inocentemente.

Izuku miro su móvil y se dio cuenta que ya era un poco tarde, por lo que se tenia que marchar. Le dijo a Mina que la avisar cuando vendría su amigo y se despidió de ella.

Mina tenía tanta suerte, ya que durante la mañana una profesora la emparejo con el frio y serio Todoroki, por lo que aprovecharía mostrarle a tan guapo chico a su pequeño amigo.

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Primer capítulo y Mina ya planeando citas para los bebés jajajaja espero les guste. aunque ni se que hago, espero este yendo bien la historia.

Ojos de JadeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora