Seventeenth

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Narra Dylan

Hace un rato que iba pasada de copas, y Scarlett y yo estábamos bailando con dos chicos desconocidos, vi como el chico de Scarlett se lanza a besarla y ella le hace la cobra.

-¿Por qué te separas preciosa? -le dice el moreno.

-Porque no le voy a ser infiel a mi novio, el nunca lo haría -dice y entonces el chico asiente y vuelve a bailar, eso es lo jodido, que Sam si lo que lo haría, me separo por un momento del chico y veo a Hayley enrollarse con un rubio, y eso rubio precisamente no es Johnson, enseguida veo como lo separan bruscamente y como mi amiga abre los ojos con cara de sorprendida, miro hacía donde mira ella y me encuentro con un Jack furioso.

-¿Dónde coño está mi hermana? -escucho a Jack gritar como un loco, y creerme, para escucharle con la música que hay aquí, eso es gritar como un maldito loco.

-¡Y a mí que me cuentas joder! ¡No soy la puta niñera de tu hermana! -grita Lily, wow, realmente está bebida, porque Lily es un amor de chica y nunca grita.

-Es suficiente, nos vamos a casa -vuelve a gritar Jack y entonces me encuentra con la mirada, me señala con la cabeza y Nate aparece de la nada, veo como Jack sube a Lily en brazos y como Nate se acerca a mí.

-¿Quién eres? -pregunta el chico con quien bailaba a Nate.

-Aquí la pregunta no es quién soy yo, es qué coño haces con mi chica -dijo Nate separando al chico de mí.

-Solo nos estamos divirtiendo hermano -dice el chico y me fijo en el, es rubio y tiene los ojos color miel.

-Se ha acabado la diversión -dice ahora el moreno, yo no digo nada ya que si no la puedo llegar a liar.

-Eso lo va a decidir la rubia, digo yo -dice el rubio y produce una pequeña risa en mí.

-Nos vamos D -dice Nate agarrándome del brazo y hago una mueca.

-De aquí la rubia no se va hasta que me la tire en los baños -dice el rubio y eso basta para que Nate le dé un puñetazo en la boca, el rubio le da otro golpe y le abre el labio a Nate, se empiezan a pelear y yo no sé qué coño hacer, así que me subo en la espalda de Nate y enrollo mis piernas en su cadera.

-Nate, por favor, para -le susurro pero no me hace caso y sigue pegándole al rubio el cual desconozco el nombre, por cierto -Nate joder, ¡que lo sueltes! -digo y le doy un puñetazo en su espalda, que no hace nada así que me bajo de su espalda, rindiéndome - ¡o paras o me pierdes! -grito y entonces Nate para, me mira y veo en su cara preocupación y confusión, miro su cara y veo su ceja sangrando igual que su labio inferior, se acerca lentamente a mí y entonces yo retrocedo, pero no hace nada ya que Nate me coge por la espalda.

-No llores, por favor -dice y entonces me doy cuenta de las lágrimas que caían por mis mejillas, me pase mis manos por ellas, Nate puso sus manos debajo de mis rodillas y me elevó, me sacó del local y noté como el aire chocaba contra mi cara, todo lo que antes iba pasada de copas, ahora había desaparecido.

-Puedo andar Nate, no estoy borracha -digo y Nate se para.

-Si Claire no llega a llamar de que se quiere ir a casa ¿Qué? Ahora ese subnormal estaría en el baño, haciéndote lo que quisiera, mientras que yo estaría en casa, sin hacer nada, aburrido como la mierda -dice y me bajo, empieza a andar y corro un poco para alcanzarlo, le paro con mi brazo y le miro a los ojos, no le digo nada y simplemente le beso, no un beso tierno no, de estos que dices, toma beso, le estas comiendo todo lo que viene a ser la boca, Nate baja sus manos a mi culo y lo aprieta haciendo así que deje ir un gemido en su boca, me separo de él y cogemos un taxi, ya que los demás se habían ido, después de un rato en el taxi, con miradas penetrantes y algún que otro beso bajamos y él le paga al taxista, entramos y todas las luces están apagadas, subo a mi habitación y noto su presencia detrás de mí, me giro bruscamente y pego un salto haciendo así que mis piernas se enrollasen alrededor de sus caderas, Nate busca mis labios y no tarda en encontrarlos, entramos y cierra la puerta con su pie, me estampa contra ella y subo mis manos a su pelo, el cual estiro y dejo a mi disposición su cuello, empiezo a dejarle pequeños besos y algún que otro chupetón, paso mi lengua lentamente hasta llegar al lóbulo de su oreja el cual muerdo.

-Se que dijiste que querías esperar, así que si no quieres, paramos -le digo en el oído.

-A la mierda el esperar D, lo quiero, ahora -dice y me vuelve a besar, me separa de la puerta y me baja, vamos dando vueltas por la habitación hasta que le tiro a la cama, quito mi ropa lentamente y miro a Nate el cual se encuentra quitándose la ropa, me fijo en que ya está bastante contento, ya sabéis a que me refiero, que tiene una erección del tamaño del Kilimanjaro, una vez en ropa interior me subo en la cama y gateo hacía el, me subo a horcajadas, y Nate me empieza a besar el cuello, noto sus manos en el broche de mi sujetador y al segundo desaparece, lleva una de sus manos a uno de mis pechos y lo empieza a masajear, mientras que con la boca me empieza a succionar el pezón del otro, suelto algún que otro gemido y noto como cada vez los dos estamos más calientes, le subo la cara a Nate buscando sus labios y entonces le dejo ir un pequeño pico, bajo por su barbilla, su pectoral, su abdomen hasta llegar al elástico de sus bóxers, con el cual empiezo a jugar y hago que Nate gruña, así que sin preámbulos le bajo los bóxers y me encuentro con su pene erecto delante de mi cara, miro a Nate y le guiño un ojo, cojo su pene con una de mis manos y lo empiezo a masajear, veo a Nate tirar la cabeza para atrás del placer y entonces me meto su miembro en mi boca, empiezo a moverme lentamente, me separo de él y veo como gruñe de nuevo.

-Ahora vas a saber lo que es el placer nena -dice Nate para darme la vuelta y poner su cara entre mis muslos, me quita las bragas rápidamente y noto uno de sus dedos en mi entrada, lo mete rápidamente para agregar otro dedo, gimo y noto su aliento en mi clítoris, noto como pasa su lengua por ahí y lo succiona lentamente mientras que mete y saca sus dedos de mí, con el placer que me está dando ahora mismo con solo dos de sus dedos, no me imagino cómo voy a disfrutar cuando venga lo bueno.

-Nate, no voy a aguantar -digo y entonces no aguanto y me corro.

-Buen sabor -dice para subir a mi cara de nuevo -¿te tomas las pastillas? -pregunta y asiento para después cogerle del cuello y acercarlo para que me bese, mientras nos besamos noto como acerca su pene a mi entrada, se separa de mí y me mira a los ojos esperando una invitación así que lo vuelvo a acercar a mí y eso le basta como respuesta porque de una embestida mete su gran miembro dentro de mí y eso hace que los dos dejemos ir un gemido, empieza a ir más rápido y consigo ponerme encima suyo, ahora soy yo la que decide quién va rápido y quien no, vuelvo a gemir y miro en su mirada lujuria, me acerco a su oído y vuelvo a gemir.

-Dylan, estoy llegando -dice y entonces gruñe, dejando ir el líquido dentro de mí, seguido por mí, le vuelvo a besar y me bajo de él, quedándome tumbada a su lado.

-Me alegra no haber esperado -dice y ríe, así que le miro y le dejo un beso en la mejilla, la verdad es que esto me ha acabado de agotar las pilas -duerme -dice -voy a estar aquí cuando te despiertes -dice y apoyo mi cabeza en su pectoral, noto como nos tapa con la fina sábana blanca y después de un rato de Nate acariciando mi pelo caigo dormida.

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Bueno, ya veis que ahora empieza lo bueno de lo bueno, no me hago responsable de los traumas que estás escenas produzcan, ¡toma salseo!

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Nightmare (Sammy Wilk and Nate Maloley)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora