HERMIONE.
Los corredores del castillo estaban desiertos y sombríos, bueno se supone que debería estar en el gran comedor, disfrutando de mi comida pensó frustrada.
Los últimos días habia dedicado su máximo tiempo a buscar un libro que había perdido en la biblioteca, ni siquiera le había alcanzado el tiempo para hacer promoción a P.E.D.D.O pensó desanimada, ¿Quién más que ella se quedaba hasta que cerrara la biblioteca?
Lo primero que hizo al entrar al cuarto lleno de libros, fue preguntarle a madame Pince por su libro tapa dura con portada celeste, pero solo le respondió lo mismo que los días anteriores.
<Nada de nada querida>
Se fue nuevamente a rebuscar por las estanterías, pero era un esfuerzo en vano.
Se lo había tragado la tierra por que no estaba en ningún lugar.
Aburrida de tanto buscarlo, cansada y con hambre. Se encaminó de vuelta al gran comedor, donde con un poco de suerte podría quedar comida aún, y si no queda seguro que Harry o Ginny le habrían Guardado algo.
Más les valía.
–Hermione, ¿Dónde estabas?- pregunto su amigo cuando ella se había sentado en un puesto a su lado. –No, espera. No hace falta decirlo, estabas en la biblioteca seguro.
A la castaña se le asomó una sonrisa en su rostro. La conocía muy bien.
—Hermione—– agregó Ron —Estos días te estas explotando.
—No he ido a la biblioteca a estudiar–. Aclaro y sonrió al ver como sus amigos la miraban sorprendidos —Más bien, estoy llendo mas seguido porque se me perdió un libro ahí— añadió desanimada.
—Pero de seguro puedes conseguir otro igual— hablo Ron mirándola con la boca llena de comida.
—Es que ahí está el problema Ron, justo había guardado algo dentro del libro y es muy importante— dijo— También es necesario que nadie lo lea— agrego.
—¿Y que es tan importante Hermione?— Harry le había guiñado un ojo, mientras una sonrisa cómplice se asomaba por sus labios.
¿Cómo se le ocurría hacer eso?, el era el único que sabía el contenido del sobre y le había prometido no decirle nada a nadie, pero era Harry y nadie podía quitarle lo testarudo y molesto que podía llegar a ser.
—¿Ginny me guardaron algo de comida? Muero de hambre—Hablo rápido para cambiar de tema.
—Si Ginny será mejor que coma algo, corre el riesgo de enfermarse y si eso pasa no podrá ir al baile de navidad la próxima semana— Harry le guiño el ojo disimuladamente.
Le estaban ganando las ganas de madarle un maleficio en ese mismo instante.
—Toma Hermione, te guardé estofado, un trozo de pastel de calabaza y jugo de calabaza— Ginny la miraba con una pizca de sospecha en su voz.
Ron por otro lado ni se había molestado en seguir la conversación, estaba todavía demasiado ocupado llenándose la boca con pollo y papas.
Estaba agradecida de no seguir hablando del asunto, luego le contaría a Ginny todo lo que estaba ocurriendo. Sabia que ya sospechaba algo.
El resto de su tiempo libre antes de clases, los tres salieron al patio sin nada que más que hacer solo descansar. Bueno ella si, tenía que pensar en su libro en que lugar podría estar o quien podría haberlo tomado.
Lo único que quería y pedía, era encontrar la nota lo antes posible.
🔮
Las clases habían transcurrido de manera normal, la última clase del día viernes era pociones con Snape. Como siempre Harry había tenido una discusión con el profesor por lo tanto ahora andaba demasiado irritable.
Ahora se encontraba con Ginny camino a la biblioteca, porque el ambiente en la sala común estaba demasiado pesado y no lo soportaba.
Empezó contando todo lo ocurrido en la biblioteca la semana pasada, como justo ese libro lo tuvo que tomar alguien llevárselo y no devolverlo todavía. Aunque prefería que cualquiera que se lo haya llevado, no llegara muy lejos con la lectura, porque si avanzaba más era seguro que se encontraría con el sobre.
Que vergüenza.
Cuando terminó de narrar toda su triste historia, Ginny expulsó un gritito agudo que llegó a hacer eco por los pasillos vacíos —¿Entonces Víctor Krum y tu...—
—Podrías controlarte un poco comadreja, que podrías dejar sin oídos a cualquiera.
Hablo una voz fría y calmada a unos pasos atrás de ellas, estaba segura de quién se trataba ¿Desde cuándo Draco estaba ahí? ¿Escucho todo?
—Malfoy, ¿qué quieres?/ No sabes que es de mala educación andar escuchando conversaciones ajenas?— pregunto cruzándose de brazos.
—Pero que descortés leona, ¿dónde está el saludo?
—Que te parece si te largas y dejas de molestar Malfoy—Hablo Ginny sería. —Estamos teniendo una agradable conversación con Hermione hasta que te apareciste.
—Pero que grosera Weasley, ¿acaso los pobretones de tus padres ni siquiera pudieron darte educación?
—Mira Malf...-–Ginny me tomo del brazo, haciendo que dejara de hablar.
—Haber príncipe... —Se notaba la furia en la voz de la pelirroja— No soy grosera soy directa y no me voy andar esforzando por ser amable contigo cuando tú nunca lo has sido conmigo.
Mire a malfoy y le sonreí con suficiencia —Ya sabes huroncito, cuidado con andar faltando el respeto.
Haber Greanger, siento haberles interrumpido su "interesante" conversación —dijo con un tono sarcastico—¿entonces que le dirás a Krum? —añadio burlón —Es que ahora pretendes ser como Elizabeth Bennet y Darcy?—. Terminó de añadir seco y se marchó.
AAH otro capitulo, espero que les haya gustado. si hay errores ortográficos lo siento, luego serán corregidos.Se que aún no hay mucho contenido dramione, pero luego empezara la acción >.<.
comenten que le va pareciendo la historia, me harían muy feliz❤.
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¿Destinados? (DRAMIONE)
Fanfiction¿El hurón platinado enamorado de la rata de biblioteca? Quién se lo esperaba 🪄 Aclaración: tanto la historia y personajes pertenecen a J.K. Rowling creadora de la saga de Harry Potter. Esta historia está escrita sin ningún fin lucrativo.