El regreso de los más poderosos

Capítulo 22 - El día no tan tranquilo de la Familia

Un estruendo sacudió el piso dieciocho después de que Ren se encargara de convertir en cenizas al Goliath que había aparecido mientras él bajaba, a su lado, Helun, estaba sorprendida por todo el poder que el peliblanco había usado para acabar con el monstruo rex, todo con una calma pasmosa.

-Entonces ¿podrías volver a contarme tu historia? - Ren pregunto queriendo intentar llenar los huecos en la historia.

-Era una huérfana, no llegue a conocer a mis padres, incluso viví en una iglesia que ahora esta en manos de nuestra Familia, fui adoptada por Freya-sama - en ese momento Helun se quedo en silencio, su mirada cayendo sobre Ren, quien siguió caminando sin más.

-No te detengas, entiendo que le tengas respeto, incluso amor y admiración a tu anterior diosa, tampoco me molesta que hables de ella - el peliblanco contesto con calma.

-Bueno, fui adoptada, al principio empecé a trabajar como una sirvienta en la "Señora de la Fertilidad", luego pedí volverme una aventurera, siendo ese momento en el cual apareció mi magia - ella siguió con voz calmada, su mirada ligeramente mirando al suelo.

-Ya veo, ahora ¿por qué decidiste unirte a nuestra Familia? - Ren pregunto mientras convertía en polvo a los monstruos que se acercaban a ellos.

-Ya se lo dije a Hestia-sama, creí que ella te lo habría dicho - la peligris contesto.

-Hay cosas que Hestia no me cuenta, ni a ninguno de los demás, tus razones es una de esas cosas - Ren explico mientras se tapaba de manera momentánea los ojos por la luz del piso dieciocho - así que si no quieres contármelo no hay ningún problema - ella solo asintió mientras seguía caminando con algo de inseguridad.

Hestia estaba algo extrañada, se encontraba mirando un papel que contenía el estado de su nueva integrante, los motivos detrás de la chica para ingresar a su Familia recorrían su cabeza, le pareció interesante su explicación y el hecho de que cuando le pidió que se transformara en alguien, le pareció una gran imitación suya, el problema era ese extraño compartir de sentidos con su dependienta.

Recuerdo

-Entonces, dime ¿qué quieres hablar conmigo? - Hestia pregunto con una taza de té que Noel o Helun no sabían de donde había salido.

- ¿Lo que siento por el niño peliblanco es real o es falso? - ella pregunto de manera directa, desconcertando a la diosa y a la espíritu.

-Dame un contexto, explícame porque dices eso - Hestia pidió con voz calmada, su mente estando hecha un lio completo.

-Cada vez que me transformaba en Syr o mejor dicho, en Freya-sama y me iba a trabajar al restaurante, cada vez que ella veía al peliblanco sus sentidos explotaban y yo era capaz de sentirlos.

Hestia incluso dejo de beber su té, este ahora estando sobre la mesa mientras los ojos azules de la diosa brillaban de una manera peligrosa mientras el hielo de la espíritu parecía empezar a arder ante las palabras de la chica sentada en el sofá, ella sintiéndose asustada ahora si por la repentina presión que la golpeaba.

-Únete a mi Familia - la diosa demando con voz potente pero suave para no despertar a ninguno de sus dependientes.

La peligris solo asintió, mostrando su espalda a quien sería su nueva diosa, ella no tenía problema en ingresar a esta Familia, solo quería entenderse a si misma, no sabía cuales eran los pensamientos de Hestia pero solo obedeció mostrándole su espalda, el estado que su anterior diosa le había dado siendo visible de manera borrosa, dándose a entender que pronto quedaría bloqueado.

La luz pronto lleno la sala, el falna de Freya siendo reemplazado por de Hestia, quien se sorprendió por los números que veía en la espalda de la chica, de reojo ella vio como Noel abría sus ojos en sorpresa por lo que ambas se encontraban viendo.