𝑼𝒄𝒉𝒊𝒉𝒂: 𝑯𝑰𝑫𝑬𝑵

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Everybody knows that the dice are loaded
Everybody rolls with their fingers crossed
Everybody knows the war is over
Everybody knows the good guys lost
Everybody knows the fight was fixed
The poor stay poor, the rich get rich
That's how it goes, everybody knows

｡:*•.───── ❁❁ ─────.•*:｡

Mis ojos pesaban más de lo normal, mi cabeza daba vueltas a pesar de que no veía nada. Cada fibra de mi ser me suplicaba seguir con los ojos cerrados, necesitaba de melatonina y no ayudaba en nada querer levantarme a la fuerza, pero tenía que...

Iba a levantarme despacio, sin prisas, pero el sonido de unas cadenas me alarmo.

— ¿Que es esto?

Me moví y abrí los ojos por completo, estaba atada de las manos y estas estaban con un fierro en medio, perfecto para no poder hacer un Jutsu.

¿él me atrapó?

No, recordé que fue Sasuke quien me saco de ese lugar.

Había perdido a personas importante en poco tiempo y él no enfrentar su duelo me estaba causando un mal emocional...

Deje de guiarme por mis pensamientos, al ver que la puerta de metal frente mío se abrió dejando ver la silueta de una chica de cabello rojo, claro la conocía.

— La Uzumaki - sonreí.

  — Soy Karin, le avisaré a Sasuke-kun que ya estás despierta...

—¿Kun? Así que confirmó mi teoría . - arqueo una ceja sonriendo, ella me miró confusa - Qué tu también sientes atracción por mi hermano, no te culpo. - me recargue en la pared - Los Uchiha tenemos buenos genes, mírame.

Observe cómo se sonrojó y gruñó con enfado para después salirse azotando la puerta.

— Pero que genio.

Nunca se confesaron conmigo, a pesar de que tuve mucho contacto con ninjas de otras aldeas, estos terminan temiéndome. Así que el sentido de "me enamoré de tal persona" era complicado entender.

   Lord Orochimaru me habló una vez de sentimientos, así pude mejorar mi habilidad de tener el olfato agudo e identificarlos, una habilidad que jamás comprendí de dónde salió.
Dijo que uno podría dar la vida por un ser amado, pero... ¿Que es un ser amado?
Una persona con la cual estarías dispuesto a dar todo por el, no importa tu felicidad y sabes que puedes incrementar la suya.

Eso era, lo que él me había dicho.

Y yo hubiera dado mi vida por la de Gaara.

Mis pensamientos fueron interrumpidos pues, la puerta se abrió dejando ver a un cabello azabache obscuro.

— ¿Hermanito? - dije cubriendo mi rostro de la Luz que entraba al cuarto.

Sasuke entró y se agachó para estar a mi altura, seguía recostada.

Él mantenía su rostro neutro, no mostraba nada pero podía percibir ese aroma, me hacía sentir como cuando estaba a lado de Itachi, esa calidez y preocupación.

— ¿Estas bien? - preguntó sacando un pañuelo húmedo para ponerlo en mi frente.

— Mis manos me duelen. - dije alzando las cadenas.

— Creí que sería necesario, pensé que una vez que despertaras huirías o nos atacarías. - su voz se escuchaba muy rota y cansada... ¿había tan siquiera dormido?