Y seguí corriendo, nadie me iba a detener, ya estaba llegando, tenía que escapar, no podía dejar que me encuentren, podrían matarme y creo que nadie quería eso; o eso es lo que al menos pienso.
Llegué al colegio, era temprano, aún no había casi nadie, no presté atención a nada y continué con mi camino, tenía que esconderme, me estaban persiguiendo y yo no sabía qué hacer.
En el transcurso del camino traté de pedir ayuda pero todos se alejaban y me veían con caras simplemente raras; como siempre nadie debía creer a lo que decía una chica de tan solo unos 16 años.
Busqué y tras busqué pero ningún lugar parecía seguro en este colegio, y nadie iba a ayudarme, ni los malditos profesores, ellos siempre andan de aquí para allá con sus trajes y maletines en mano pero nunca ayudarían a un alumno de este colegio, ni al más popular; ya sea chico o chica.
Luego de seguir con mi gloriosa búsqueda, encontré una sala que parecía abandonada, allí no había nadie, solo quedaban bancos sucios y sillas rotas que hacían de este un lugar tenebroso.Solo se escuchaban mis respiraciones agitadas y mi corazón que palpitaba a cien por minuto, debía descansar, había corrido demasiado y mi enfermedad no ayudaba mucho, desde chiquita sufro asma; me lo diagnosticaron a los cuatro años de vida, podría haber muerto pero aquí sigo, viva.
Miré rápidamente hacia todos lados; había escuchado un ruido, pero cuando miré hacia la puerta mi “Futuro asesino” estaba junto a la entrada del salón, Grité escandalosamente pero nadie podría oírme, la sala parecía estar muy lejos como para que me escucharan, entonces el tipo cerró la puerta y me miró fijamente, en mi vida tuve más miedo del que pudiera tener justo en este momento, pero no iba dejar que un tipo cualquiera pudiera quitarme la vida en tan solo unos minutos, no lo dejaría.
Retrocedí lentamente para poder alejarme de él, no permitiría que me tocara, debía estar lo más lejos posible de mí no-futuro asesino, él quería matarme y yo no le daría el gusto por más que el destino lo quiera, yo no moriría, eso creo.
Se acercó lentamente a mí y yo retrocedí más, pero algo me lo impidió; un maldito banco se encontraba detrás de mí; lo corrí desesperadamente y seguí retrocediendo pero llegó la pared, no podía ni traspasarla, ni romperla y menos correrla, creo que esta vez no tenía escapatoria alguna.
Miré con miedo a mí “Futuro Asesino” y el me miraba sínicamente, el muy guacho estaba disfrutando de todo, corrió hacia a mí, en su mano agarraba fuertemente un cuchillo e intentaba clavarlo en mi estómago, o en alguna parte de mi cuerpo.
Luego de tratar de que salga de arriba mío para poder escapar, salí corriendo hacia la puerta pero se levantó rápidamente y jaló de uno de mis pies tirándome al suelo produciendo que mordiera mi lengua y sangrara mi nariz.
Lo pateé fuerte en la cara y me paré desesperada, fue mala idea venir a este salón, entonces abrí la puerta pero el tipo se levantó nuevamente y se tiró arriba mío, me moví inquieta, tenía mucha desesperación encima y quería salir corriendo pero me tenía acorralada.Entonces pasó, de un solo acto Mi asesino clavó su afilado pero chico cuchillo en mi estómago y dejó salir sangre de este y más de mi boca.
Lo pateé en sus partes y salí como pude del salón, tenía que llegar a los pasillos, aunque sé que no recibiría ayuda puede que alguien llegue a compadecerme y ayudar a curarme.Llegué a los pasillos cojeando, aún derramaba sangre por mi boca, mantenía una mano en mi estómago para parar un poco el derrame, necesito ayuda de inmediato.
Sonó la campana del receso y todos salieron de sus clases, me miraron asustados, pero a la vez sus caras reflejaban confusión, no sabían lo que sucedía.
Pero igualmente nadie se atrevió a ayudarme, me desplomé en el piso y sentí que me rompía como un frágil jarrón de vidrio al caer de una mesa.
Nadie me conocía, pero yo tampoco, no me conocía ni me conozco, ¿Quién fui? Dime; ¿Quién soy?
Si tu supiste de esto es porque sabes más de mí, ¿acaso me conoces?... solo dímelo yo soy…ELLA.
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El Caso de ELLA... -(ONE SHOT)
Mystery / ThrillerEl caso de Ella. --Ayuda me persiguen...