Salimos, pero antes me despido de mi madre y de Iván, miro a mi padre de reojo y me voy con Alexandra a la puerta, Alexandra se despide de mis padres e Iván. Abrimos la puerta, cojo las llaves y me las pongo en el bolso. Vemos a Gabriel esperandonos con su coche, un Mercedes negro. Alexandra se pone delante y yo atrás. Nos vamos directos al centro comercial escuchando a Romeo Santos - Propuesta indicente. Cuándo llegamos allí, bajamos del Mercedes y nos vamos directamente al Strarbucks, una cafetería, nos sentamos en una mesa y pedimos 3 cortados. Gabriel me ha contado como conocio a Alexandra, y se ve que Alexandra se enfadaba porque decía que no, que eso no era así, que era de otra forma, que se lo estaba inventando. Seguidamente Alexandra me ha explicado lo de su hermana gemela que no la ha podido conocer;
- Yo era pequeña, tendría unos 11 años cuándo me lo contaron. Mi madre, cuándo se enteró de su embarazo estaba muy ilusionada, pero, mis padres no estaban muy bien de el tema económico. Mi madre, cuándo se fue a hacer la segunda ecografía, le dijeron que venian gemelas, al llegar a casa, mis padres estubieron hablando, no lo tenían muy claro de que hacer, porqué en esos momentos no podian mantener a dos niñas a la vez. Estuvieron mucho tiempo pensando que hacer, si abortar, si dar a luz y apañarselo como pudieran, pero al final, decidieron dar a luz a las dos niñas, yo y Andrea, mi hermana, y poner a una de las dos en adopción. Buscaban una adoptación abierta, es decir, que pudieran ver a las hijas cuando quisieran, y así yo no cojería traumas, por decirlo de alguna manera. Encontraron a la pareja perfecta, joven, responsable, agradable... Estubimos unos 2 años viendonos, pero eramos muy pequeñas y ahora no nos acordamos. Por trabajo ellos dos se tienen que mudar a Estados Unidos, en ese instante fue cuando perdimos nuestra relación. Ara mismo no sabemos nada de ella, mi madre me ha dicho que cuándo ya sea mayor de edad, puedo buscarla a través de gente que se dedica a eso, por eso estoy esperando tener 18 y conocerla.
Alexandra no sabía que yo antes vivia en Estados Unidos, es verdad que yo conocía a una Andrea, pero no podría ser su hermana, sería mucha casualidad, y si fuera, no la podría describirla porque no la conoce.
Miro la hora, ya eran las 19:40.
-Gabriel, ¿me puedes acercar a casa porfavor?
-Sí, claro.
Bajamos a cojer el coche, subimos y nos vamos mientras Alexandra nos va explicando pequeños detalles de su história.
Llego a la puerta de mi casa. Bajo, le doy dos besos a Gabriel y a Alexandra, me despido y les doy las gracias. Abro la puerta de casa, saludo a mamá e Iván, mi padre estaba sentado en el sofá. Ya se ha apalancado, ¿para eso quería venir? ¿Para que el sofá cojiera su fora? Lo miro, y seguidamente subo a mi habitación, cuándo de repente me dice mi madre:
-Sara, ¿no vas a cenar?
-Em... no, ya he comido allí, en el centro comercial.
Subo, dejo la chaqueta y el bolso y me pongo el pijama, seguidamente me voy a lavar los dientes y estoy un rato en mi ordenador. Me pongo mis cascos y llega la hora de irme a dormir.
Aver como amanece mañana... ¡Vaya día, lleno de emociones!
ESTÁS LEYENDO
Diario de una adolescente.
Teen FictionSara Laurent, 16 años, hija de padre Inglés y de madre Española. Comienza una nueva historia