𝐂𝐚𝐩𝐢́𝐭𝐮𝐥𝐨 𝐔𝐧𝐢𝐜𝐨

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¿Por qué nadie ha venido todavía?
¿Porque no han llegado?
¿Habré puesto mal algo?

Eran las preguntas que se hacía Jungguk, sentado en una silla cerca de la puerta principal, se podría decir que era una persona muy insegura y sensible.

Su madre al lado de él se sentía terrible por su hijo, que aún a sus diecisiete años se veía como un bebé ante sus ojos, veía a su hijo ponerse a lagrimear un poco, soltando pequeños sollozos.

-Mamá no eh hecho nada malo- soltó repentinamente -¿Por que nadie vino?, ¿Acaso me odian?-.

-Oh bebé, no llores- su madre no tenía idea que decir, no quería lastimar a su niño, pero tampoco podía ilucionarlo diciéndole que llegaran después seguramente -Tal vez tuvieron que hacer algo- se mordió el labio queriendo no cagar más la situación.

-Es mi fiesta, se supone que debo estar feliz, ¿entonces porque estoy llorando?- se agachó escondiendo su rostro en sus manos -Es mi fiesta y llorare todo lo que quiera-.

Se levanto y se dirigió a su cuarto, se lanzó a la cama, era un poco después de las 3, la hora acordada para la fiesta, a la cual nadie se presentó.

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Sollozando por casi media hora, logró escuchar como tocaron la puerta de su casa, miró la hora, eran casi las cuatro y media de la tarde, no se quería hacer ilusiones, solo asomo un poco su cabeza, viendo a su madre ir a abrir la puerta, extrañada, giró la perilla, viendo al otro lado a un grupo de jóvenes que se veían bastante tímidos y nerviosos.

-Uhm... ¿es-esta es la casa de Jeon Jungguk? - pregunto con voz grave un chico con el pelo teñido de rubio.

-Si, soy su madre, ¿venían a la fiesta?- preguntó esperanzada.

-Si, lamentamos mucho la demora señora Jeon- hablo ahora uno de pelo gris.

-No sé preocupen, me alegro mucho de que vinieran- casi se le quebró la voz -Voy a ir a buscarlo, pónganse cómodos-.

Los 6 jóvenes caminaron a los sillones, se sentaron mientras Jungguk veía a su madre dirigirse a el.

-Hijo, lávate el rostro y ve con ellos- le hablo con calma, dándole una pequeña caricia en su mejilla.

Lo pensó un poco, ¿por qué ellos vendrían?, ¿lastima? ¿Le estaban gastando una broma?

Sin decir nada, hizo lo que su madre le dijo y se acercó a los chicos, los cuales cada uno sostenía un regalo.

-Hola Jungguk, nosotros lamentamos la demora, pero no estábamos seguros de venir, ya sabes- hablo otra vez el chico rubio.

Con eso Jungguk pudo recordar quienes eran a excepción de uno, el peligris era un chico llamado Park Jimin, el cual era muy cariñosos con todos aunque a muchos de sus compañeros les molesta pensando que solo fingía cuando realmente era un amor, el pelinegro, su nombre era Min Yoongi si no recuerda mal, normalmente estaba aislado por su cara de "me hablas y te golpeo", el rubio cenizas se llamaba Namjoon, fue su crush cuando era más pequeño, se podría considerar el "nerd", ya que pasaba mucho tiempo en la biblioteca acompañado de el chico de su lado, el chico de pelo y bueno, casi toda su ropa rosada, se llamaba Kim Seokjin, era una persona muy responsable, preocupada y amorosa también, el peli rojo se llamaba Jung Hoseok, siempre traía una sonrisa en la cara, era muy sociable, amable y siempre sabia que hacer.

𝐏𝐢𝐭𝐲 𝐏𝐚𝐫𝐭𝐲 [ᵗᵃᵉᵍᵍᵘᵏ]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora