Miré a Valentín sentarse a mi lado con una sonrisa.
—Entonces.. ¿qué te podría inspirar? —Preguntó mirándome fijamente. —¿La música puede ser?
—No mucho. —Sonreí. —Me gustan las flores.
—Lo noté. —Dijo mirando a la derecha.
Habían muchas flores, algunas muy vivas, otras marchitas, otras de papel.
—Me inspiran mucho. —Dije pensando en estas.
Tomé una hoja para hacer primero un boceto de lo que empezaba a crear mi mente.
Había algo que estaba promoviendo más mi imaginación, no eran solo aquellos tulipanes, o aquellas dalias moradas.
Esos ojos azules, un tanto verdosos que me miraban fijamente. Esa mirada entre las flores. Esos ojos en la oscuridad.. iluminados quizá por una tenue luz, como podría ser la de la luna, en un cobertizo.
No me gustaba solamente la compañía de Valentín, también me gustaban sus ojos, aunque me ponía nerviosa que me mirara fijamente.
Bajo la mirada de Valentín, olvidaba cuál era mi vida, cuál era mi posición en el mundo. Me hacía recordar cuando estaba en el taller de artes en la secundaria y cualquier chico podía ponerme nerviosa.
Estaba tan concentrada mirando los ojos de Valentín, que no me había dado cuenta de que estaban tan cerca.
Maldije dentro mío cuando no pude evitar llevar mi mirada a los labios suyos.
Mi corazón se movió con intensidad dentro de mi pecho al ver una pequeña sonrisa aparecer en él.
Subí mi mirada a sus ojos pero no conectamos miradas, porque ésta vez era él quien tenía su mirada puesta en mis labios, poniéndome más nerviosa de lo que estaba.
Sus ojos brillantes volvieron a conectar con los míos, sabía que debía estar muy roja, porque sentía toda mi cara ardiendo.
Me tensé al ver su rostro acercarse más, pero fue cuando el tono de mi celular nos interrumpió, avisando la llamada de Edgar, y recordándonos que lo que estábamos a punto de hacer no podía pasar.
Dejo aquí x hoy, o capaz a la noche actualizo<3