Ya había pasado una semana, cada día Taehyung iba a visitar a Jungkook. Se había vuelto una agradable rutina verse diariamente por las noches, de vez en cuando por las tardes o madrugada. Habían ido varias veces más al desierto y a otros lugares, ambos se volvían cada vez más cercanos.Hablaban de toda clase de cosas, compartían sentimientos y apoyaban mutuamente, por primera vez ambos se sentían acompañados. Aún así, un sentimiento más fuerte que la amistad comenzaba a interferir en los dos jóvenes.
Ahora mismo el palacio estaba de cabeza. Sirvientes de aquí para allá, sosteniendo bandejas con alimentos de primera clase y tejidos suaves. Cada vez quedaba menos para el baile real y eso significaba un gran estrés por parte del Sultán.
Taehyung también estaba estresado. Al llegar ayer después de otra noche junto al castañito, las sirvientas entraron a su cuarto insistiendo por su presencia en la sala principal, lo habían buscado por bastante tiempo.
Aún quedando dos semanas para el asunto, todos estaban preparando la decoración y lo que habría dentro del baile. A Taehyung le hicieron probar cuatro trajes distintos, todos de excelente calidad y material.
Como la cultura de Ágrabah es bastante diferente a las demás, habrían muchos colores y piedras preciosas de por medio, además de las joyas en manos y cuello. El príncipe no quería pensar en todas las preparaciones que harían. Aún peor, ensayar para el baile y más clases de conductas.
El baile no es tan formal como los otros, sino que es más tradicional, con más movimientos y coordinación, algo que detestaba por completo.
Kim Namjoon se estaba encargando de las invitaciones, pronto le diría a su hijo de el verdadero propósito del baile. Estaba aterrado, sí, el rubio podría reaccionar muy mal. Tal vez lo mejor era quedarse callado y dejar que Taehyung conozca varias princesas durante esa noche.
Pero ahí estaba Taehyung, frente a la habitación de su padre con los nervios a flor de piel.
Había seguido el consejo de Jungkook, ahora le diría a su padre todo lo que había estado ocultando. Quería su apoyo. Estaba tan nervioso, que se ha aprendido un pequeño discurso para hablar con su progenitor.
— Ahora sí puedes pasar, hijo. —Al escuchar eso, Taehyung entró a la sala de reuniones donde su progenitor estaba sentado, escribiendo con letra legible en algunos papeles delgados. El príncipe se sentó frente a él, posando sus manos sobre la mesa, estando algo inquieto.
— Quiero hablar contigo, pero, ahora no es algo sobre el reino. —El sultán alzó la mirada, dejando los papeles de lado para poner total atención a su hijo.
— Escucha, siempre te he dicho esto y nunca me intentas comprender, pero, ahora quiero que sea diferente. Desde pequeño que mi vida ha sido controlado. No digo que sea algo malo, pero, desearía tanto tener más libertad y- —No pudo terminar de hablar, pues Kim Mingyu había entrado al salón, interrumpiendo su conversación.
— Sultán, necesito decirle algo, esto es de suma importancia. —Taehyung se iba a quejar, pero Namjoon actuó antes y se levantó, mirando al de cabellos azabaches.
— Taehyung, hijo, necesito que te vayas. Hablamos en otro momento.
Tahyung estaba más que furioso.
Se levantó bruscamente y se dirigió hacia la salida del salón, no sin antes gritarle directamente a su padre.
— ¡Siempre es así! ¡Siempre colocas los asuntos del reino por sobre tu hijo! Eres un egoísta. —Gritó con voz profunda y fuerte, dejando a ambos presentes petrificados.— Podríamos tener un horario para hablarnos, ¿no crees? Claro, sólo podrás hablar contigo desde cierta hora. Sería mejor, así ni vengo en vano.—Miró a su mayor con tristeza antes de dar media vuelta y retirarse del salón.
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Aladdín ୭̥ Taekook.
Romance❝Jungkook es un ladronzuelo que se enamora de el hijo del Sultán, el príncipe Taehyung.❞ ๑ l Contenido Homosexual. ๑ l top ! taehyung | bottom ! jungkook. ๑ l Capítulos largos. ๑ l Actualizaciones continuas. Preciosa portada hecha por @DanielaNavar...