Capitulo 5

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Akeno. Al día siguiente las chicas y yo estábamos en hora del almuerzo.
Estábamos hablando sobre lo sucedido el día de ayer.

Creo saber perfectamente que profesor le había hablado de mi y de mis amigas al profesor goku. 
Estaba segura de que había sido la profesora ayasaka. Así que planeamos nuestra venganza. Nos escapamos de la escuela xenovia y yo.

Fuimos a comprar aerosoles y regresamos a la escuela. Llegas gusto a tiempo para la siguiente clase. Pero antes tenía algo que hacer. Era obvio que llegaría tarde pero no iva a desaprovechar la oportunidad.

Mí goku. Digo el profesor goku. Siempre va ala biblioteca antes de entrar a clase y como la bibliotecaria es una señora de edad avanzada. Siempre está durmiendo sobre su escritorio.

Así que sin perder el tiempo entre a la biblioteca. Por cierto tengo prohibida la entra. Por haber roto unos pocos libros.

Al entrar comencé a buscar al profesor. Lo entre en uno de tantos pasillos el estaba de espaldas, revisando algunos libros.
Comencé a caminar hacia el sin hace ruidos. Pege mis pechos sobre su espalda y lo abrace por el cuello. Mientras que con una de mis manos tape su boca.

No voltees. Le susurre al oido.
Sólo te diré una sola cosa profesor. No soy cualquier chica. No intente cambiarme. No intente controlarme o la va a pasar muy mal.

Goku. Acaso eso es una amenaza. Dije con un poco de dificultad ya que me estaba tapando la boca.

Akeno. No claro que no. Sólo estoy advirtiendo. No soy lo que piensa. Dije y deje de tapar su boca.

Goku. ¿que quieres de mi?.

Akeno. Nada. Sólo que me encanta. Me encantan todo lo que es.

Goku. ¿que?.

Akeno. Que si sigue provocando el fuego, va quemarse con mis llamas.

Pude sentir con su cuerpo se tenso cuando dije eso.

Por último.

Goku. ¿que es lo que quieres?. Sólo rápido no quiero me vean aquí. Así contigo.

Akeno. Amo su perfume. Dije y le mordi de una manera sexy. Me aleje de el y salí corriendo de la biblioteca.

Goku. Esta mocosa me hará la vida imposible. Tengo que mostrarle que conmigo nadie juega. Dije y me toque la oreja para darme cuenta que está sangraba un poco.

Karla. ¿que te dijo?.

Akeno. Tuvimos un momento muy íntimo en la biblioteca.

Xenovia. Eres una chica mala.

Karla. Muy mala.

Xenovia. ¿le dejaste en claro las cosas?.

Akeno. Si muy claras.

Profesora. ¡silencio en el fondo!.

Akeno.
Horas después. Salimos del colegio y nos fuimos directamente al estaciomiento se la escuela. Nos quedamos ahí. Merodeando mientras esperábamos a que todos se fueran y nos dejarán solas. Cuando eso pasó entramos en acción.

Vas a ver quien habla más de mi. Dije y saque el aerosol.

Xenovia. Nosotras te cubrimos.

Karla. Si date prisa.

Akeno. Comencé a pitar todo el auto de la profesora. Líneas. Garabatos y hasta lo raye con la llave de mi casa. Deja su auto echo una porquería. Ella no iba hablar a mis espaldas. Sabía que había si ella. Siempre hace que los profesores me odien y como yo con ella nunca tuve una buena relación.

Siempre me tenía que decir algo o también me ofendia. Simplemente para buscarme y provocarme. Esto era lo que iba a recibir como recompensa por todo lo que me hizo y hace a mis espaldas.

Cuando termine tire el aerosol a un bote de basura y nos fuimos con las chicas.
Nos quedamos tomando algunas cervezas como lo hacíamos casi siempre. En eso Karla toco el brazo llamando mi atención voltee y pude ver al profesor. El cual estaba comprando algo de comer justo en la tienda frente a nosotras. Nos quedamos mirándolo  y me apoyé suavemente en la pared a mi lado. Antes de su subiera al auto. Levanto su vista y se encontró conmigo.

Karla. Parece que alguien te está buscando.

Xenovia. Que sexy es.

Akeno. Sin pensarlo le mande un beso y las chicas sólo dieron una sonrisa. Pude ver como le apareció un sonrojo. Subió a su auto y se fue.

Las chicas y yo nos quedamos ahí casi todos el día. Antes de que anocheciera nos fuimos cada quien para su casa.

Xenovia. Me encantaría ver la  cara de la profesora cuando vea su auto.

Akeno.  a también. Dije riendo.

El celular de mi bolsillo comenzó a sonar repentinamente. Era mi madre. Ella sabe que nunca iba a llegar temprano. Pero que me llamara no significaba eso. Eso quiere decir que estoy en problemas.

Mire a xenovia, la única que se quedaba a mi lado. Ella miro la pantalla y me miro aterrada.

Conteste la llamada. ¿ahora que?. Respondí.

Shuri. Tienes 10 minutos para llegar jovencita. Estaba vez llegaste demasiado lejos. Dijo y corto la llamada.

Akeno. Realmente meti la pata hasta el fondo.

Fin de capítulo

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