Te hice una nota.
Y te la quería entregar junto a una barra de chocolate.
Era la primera vez que hacía algo como eso para un chico.
Le pedí a unos amigos que te la dieran, yo ni en sueños te la podría haber dado personalmente.
En la tarde me hablaste.
Dijiste que te había gustado mucho ese detalle.
Yo estaba muy feliz.