Otro Mundo (Abandonada Temporalmente)

Cap 1: El comienzo

Este relato nos cuenta la historia de Makoto Campbell, una chica de 16 años que vivía con sus padres pero que ahora estaba con unos reyes, y que su entrenador es un "insoportable" según ella que la levanta muy temprano para entrenar.

Con su familia vivian mudandose ya que a su papá siempre lo cambian de puesto en el trabajo y con eso tambien de casa. Esa es una razón por lo que no tenia amigos, se la pasaba encerrada en mi cuarto hasta la siguiente, lo típico luego de las mudanzas, lo que no sabía era que este iba a ser mi último viaje.

Les contaré como pasó todo desde ese día.

***

-Bien Makoto, ya sabes lo que debes hacer, no hace falta que te diga- dijo su madre colocando unas cajas en la entrada de la casa, era más que obvio que de nuevo se cambiarian de hogar.

Se cambian mucho de casa que ya ni sé a que país no fue.

-Si, ya va- dijo subiendo hacia su cuarto para armar sus maletas e irse

Se preguntaba cuando sería el día que se queden en un solo lugar, que sean una familia "normal". ¿Era mucho pedir? Parece que si.

Ya pasaron 3 horas y falta poco para que lleguen, según la madre.

***

Bien, creo que ya llegó nuestra protagonista.

Es una casa de dos pisos, no muy ancha, si no supiese que es una casa diría que es un departamento. Solo falta bajar las cosas y volver al encierro, pero tenia la costumbre de explorar las casas y esa no era la excepción.

***

Ahora anda por el segundo piso y recien acabo de dejar sus cosas en su nueva habitación.

«Esta bien, de seguro esta casa tiene ático y generalmente los anteriores dueños dejan algunas cosas ahí, voy a ver» pensó dirigiéndose alli

***

«No hay mucho por aquí, solo fotos antiguas y... ¿Eh? Je, no lo habia visto, es un espejo que parece de entre el siglo XV o XVII, no lo sé con exactitud. Parece un poco rayado pero no roto, mi reflejo se veia bien, en resumen, está en buen estado» se dijo para luego ignorarlo un rato y seguio mirando el resto del ático.

Despues no vio nada interesante, fotos antiguas, los dueños anteriores es lo que ella creia, pinturas y uno que otro mueble viejo. Decidio bajar a terminar de desempacar y con su padre ya que irian a ver su nuevo colegio.

-¡Vamonos!- dijo el padre, esa es su señal, iran a ver la escuela

Asi que subio al auto y se fueron No está tan lejos tampoco, solo a unos minutos.

Al llegar a la escuela... pues no hay mucho que decir, tenia muchas aulas, aunque le parecía una prisión como todas las demás. Esperó a que la inscribiera y se fueron

-Oye, ¿Estás bien, hija?- dijo su padre al verle con la vista en el suelo, desde que comenzaron a mudarse siempre estaba así

¿Por qué recien pregunta? ¿Al fin tenía un poco de interés de lo que su hija pensara sobre todo eso?

-Pues si, ya me acostumbre a los viajes- dijo con una sonrisa forzada

No hablaron más, subieron al auto y regresaron a casa.

Hasta ahí todo normal. Volvieron a casa y se fue a su cuarto, se puso los audifonos e ignoró el mundo que la rodeaba.

Su madre la llamó para la cena tiempo despues. Bajó hacia el comedor y, no se puede decir mucho, fue un día normal para todos.

A la mañana siguiente se despertó y decidió seguir explorando la casa. No encontró más que pinturas viejas, dibujos que parecia hechos por unos niños, pero lo que le llamaba la atención era el espejo, no sabia el por qué.

¿Quién dejaria una antigüedad como esa? Podrian haberla vendido o tirado, no sirve de mucho. ¿O si?

-¡Makoto!- llamó su padre y bajó a verlo

-¿Qué pasa?

-Me iré y volveré a la noche, hubo algunos problemas con el resto de las cajas que están en otro lugar, tu madre se vendrá conmigo a ver el asunto, estas a cargo de la casa- sin más que decir se fueron, que coincidencia

Ahí comenzó lo extraño, pero no se daba cuenta.

-¿Eh? ¿A dónde se fueron?- dijo en voz baja y paseó por el patio, el sótano, nada interesante.

Cuando revisaba unas cajas en el ático, habia libros antiguos, más bien todo lo era.

Pero un libro en especial llamó la atención de la adolescente. Se llamaba "Four Elements", que traducida al español es "Cuatro Elementos" , habia como una especie de hechizos, armas antiguas, dibujos que para ella en ese momento eran incomprensibles, ahora entiende algunos.

Mientras pasaba las páginas vió al espejo, era exactamente igual, se dio la vuelta para comparar, y sin dudas era ese.

Junto al dibujo del espejo habia una frase, un conjuro al parecer. Que tonta que fue en esos momentos. Como deben pensar, si, dijo el conjuro. Se paró frente al espejo y comenzó a recitar el hechizo.

-Fuerzas de la luz y oscuridad, en este espejo será reflejado el reino de los cuatro elementos, agua, tierra, fuego y aire, soy la elegida, aquella que entrará al espejo donde veo mi cambiante reflejo.

Dicho el hechizo se quedó mirando el espejo, no pasó nada.

Cuando estaba dispuesta a irse el cuarto se iluminó y su reflejo no se veia, todo era blanco.

Apenas tocó el espejo y una imagen de un reino se hizo ver.

Cuando colocó su brazo en el espejo empezó a entrar y... como se debe estar arrepintiendo. Y si, ya se lo deben imaginar, entró al portal y fue a parar cerca de la entrada de un castillo.

Cuando se dio la vuelta para volver, el portal se había cerrado, trató de volver a decir el conjuro pero no funcionó, estaba desesperada, quería volver y no podía, con el libro en sus manos, no sabia que hacer con el. Ahora estaría escuchando musica en su cuarto relajada, pero no, su curiosidad le ganó. Es cierto el dicho "la curiosidad mató al gato"

Las puertas del reino se abrió dejando ver a los reyes con sus escoltas.

-Bienvenida Makoto, al fin llegaste- dijo la reina invitandole a pasar. Ella se quedó mirando, todo se le hacia muy confuso.