CAPITULO 14 Nicolás Martini

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Verla tan indefensa, con el miedo apoderado de cada centímetro de su cuerpo, me mataba. No sabía que pasaba pero quien le hizo esto las iba a pagar cada maldito segundo. La había lastimado. Apenas Andrés y yo llegamos al almacén, entre hecho una furia, nadie absolutamente nadie se podía meter con lo mío y menos con mi familia. Era algo totalmente sagrado para mí. Era un golpe bajo lastimarla, una cosa era agarrarla con uno de mis hombres y otra con mi familia. Acababa de conocer a Nica pero era hija de Leonard así que automáticamente la hacía parte de mí.

Cuando divise al hombre amarrado en aquella silla frente a un tanque de agua fría, estaba asustado y gritaba mientras lloraba que no quería morir. Pero cuando me vio supo que ya estaba muerto. Lo golpee una y otra vez, solo podía jadear por su vida porque hablara o no era hombre muerto. Andrés me aparto del cuando vio que ya casi rozaba el final de su asquerosa vida.

- Suéltame Andrés- me quito las manos de encima automáticamente- me vas a decir que saben- le dije tratando de controlarme al hombre que tenía adelante

- Solo se hay una mujer que dijo que ya tenían las esmeraldas – ni si quiera podía hablar

- Dame un nombra

- No lo sé, no lo sé señor- comenzó a toser- Dijo que Nicahealy Quandt se acostaba con usted, por favor no me mate

- Ya estás muerto Rodrigo- acto seguido saque mi arma y puse una bala entre ceja y ceja. No habia sido lo mas inteligente pero necesitaba liberar un poco de tension.

Andrés quería matarme con la mirada pero no podía decirme nada, estaba demasiado cabreado y un problema más, me haría agarrar un arma y acabarlo de una vez porque mi prioridad ahora era conseguir al hombre que atento contra Nica. Y saber quién era esa mujer, nadie más aparte de Andrés y Catherine nos había visto en la casa del lago, y ninguno de los dos se atrevería hacer tal cosa. Aparte sabían que ya tenía las puñeteras esmeraldas, solo Nica era la única que era un cabo suelto que sabía que tenía en mi posesión las esmeraldas. Quien sabe con quién hija de puta hablo. Iba a correr toda la sangre Loveling por todo Royal.

Cuando abrí la puerta, Valeria hizo un intento fallido de ver quien estaba adentro, pero no la dejaría que viera a Nica, sería un gran problema del cual ahora no tenía cabeza para arreglar

- ¿Nick quien está adentro?- ya tenía su maleta lista junto con las de Marcela y los abuelos para irse.

- No puedes entrar Valeria- dije con tono autoritario

- Cámbiate al menos- sospechaba que estaba pasando pero al igual que yo sabía que no era el momento, era consciente de todo el peligro que estaba corriendo porque la próxima podría ser ella.

- ¿Dónde están todos?

- En el patio, esperando que salgas del maldito salón con la que tienes adentro

- Valeria- le advertí

- Nick, sé que ahí esta Nica. Mas te vale arreglarlo, y acabar con esto de una puta vez

- Valeria no es lo que estás pensando

- Sí que lo es Nick, jamás te había visto tan enojado por algo- suspiro, ni ella podía con eso.

- ¿Ya saben tus padres que te vas?

- Si lo saben, y te vas a quedar con Nica y terminaran lo que sea que tienen Nick o te quedaras solo, sabes que Andrés y Leonard jamás permitirían que tengas a Nica. Ellos más que nadie saben todo lo que has hecho y su princesita no estará en eso.- sin más se dio la vuelta para ir a despedirse y como era que no se iba, tenía que irse- Que tengas una buena semana Nick.

- Y tu un buen viaje. Besos  - le dije mientras le tiraba un beso, ella podía ser de todo y puede que ni si quiera la quiera como una mujer pero sí que la quiero como una muy buena amiga y la respeto.

- Eres un idiota- grito a lo lejos.

Cuando volví abrir la puerta, nica estaba ya esperándome con una cara para nada agradable, estaba que me mataba con la mira. Paso a mi lado sin ni si quiera mirarme.

- Nica por Dios, es Valeria- dije tratando que se detuviera y poder explicarle.

- Por los mismo Nick, es Valeria y estoy totalmente de acuerdo con ella- estaba ya subiendo las escaleras cuando lo grito pero tenía que entender que nadie sabía que era realmente la relación de Valeria y yo.

Esto iba a ser bien difícil, no podía dejar a Valeria pero tampoco podría alejarme de Nica, esa mujer me volvía loco y aparte tenía un asunto que resolver. Así que no tenía tiempo para pensar en eso ahora.

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