Hechizo de amor

Capítulo 1

Me desperté en medio de la profundidad de la oscuridad, no podía ver nada a mi alrededor. Tuve que sentarme con cuidado porque mi cuerpo dolía muchísimo, tenía raspones en las rodillas y un líquido caliente corría por mi frente. Era sangre.

Repentinamente, una luz me dejó cegada. Por un instante, todo el bosque se iluminó, había funcionado. Él estaba frente a mí.

Pero la historia no comenzó ahí.

Me llamo Ellanie Chambers, vivo en un pequeño pueblo al este de Georgia. Mi vida es como la de cualquier chica normal; asisto a la preparatoria, tengo algunos buenos amigos que siempre me apoyan, un padre amoroso y muy buenas calificaciones. En cuanto a si tengo novio, bueno, he sido muy popular con los chicos, supongo que ellos las prefieren hermosas y calladas y yo no soy precisamente así. No me malinterpreten, yo estoy feliz tal y como soy, pero parece que soy la única.

Desde que llegué a la escuela Redwood que los otros chicos se burlan de mí. Que mi cabello está desordenado, que olvidé mis líneas en el club de teatro, que mi ropa es anticuada, que esto y esto otro. De alguna manera, siempre he conseguido ser el foco de atención de los más idiotas de la escuela, los hermanos Walker. simplemente no pueden dejarme en paz.

Lydia y Steve Walker son los que llamarías populares; muchos amigos, muchas fiestas a las que asistir y toda la belleza que el dinero puede comprar. Pero no siempre fue así y ellos lo saben. Yo también lo sé, pero no quieren que lo divulgue.

Cuando yo era pequeña, mi madre solía llevarme a los albergues de la gente más necesitada, donde era voluntaria. Quería enseñarme el valor de ayudar a los demás. Ella era la persona más caritativa y bondadosa que he conocido jamás.

Un día mi madre y yo fuimos juntas a uno de los orfanatos del pueblo, ya que teníamos un montón de ropa y juguetes para donar. Como ella era muy querida por toda la comunidad, se quedó conversando con las monjas y me dijo que fuera a jugar con los niños. Fue ahí que los conocí, a los hermanos Walker.

Antes de ser adoptados por el hombre más poderoso del pueblo, eran niños asustados y tristes, vestían ropa vieja y tenían las manos sucias. Pero a mi nunca me importó la apariencia de los demás y no tuve problemas para hacerme su amiga. jugamos durante toda la tarde, reímos sin parar y al final de mi visita las monjas nos dieron chocolatinas con maní. Fue estupendo.

Nos reunimos un par de veces más en el orfanato, nos habíamos hecho tan cercanos que mi madre no pudo rehusarse a las visitas periódicas. Pero un día, Lydia y Steve se habían ido. Ni siquiera tuve tiempo de despedirme. De un rato para el otro ellos ya no estaban.

—Ellos están mejor ahora, hija. Ahora tienen una madre y un padre que los quieren muchísimo y una bonita casa.

Mi madre intentó consolarme, pero yo no entendía por qué mis amigos se habían ido sin despedirse. pasaron años para que los volviera a ver, habíamos crecido, habíamos cambiado. pensé que podríamos reunirnos, volver a ser amigos como antes, pero parece que ellos no pensaron que yo estuviera a su altura.

—¿Quién diablos eres tu, rarita? —Eso fue lo único que Lydia fue capaz de decirme, Steve por otro lado ni siquiera fue capaz de mirarme.

No entendí lo que sucedía, ¿por qué actuaban así? Las burlas comenzaron ese día y no han cesado. De hecho, los demás chicos de la escuela comenzaron a imitarlos. No pasó mucho tiempo para que rumores extraños sobre mí comenzarán a circular entre los demás estudiantes de Redwood; dijeron que estoy loca, que me vieron hacer brujería, ¡llegaron a decir que tengo piojos! Parecía que no querían que nadie se acercase a mí, y entonces lo entendí; no quieren que yo cuente su secreto. No saben que yo no soy ese tipo de persona, pero debo confesar que ellos superan todos mis límites.

Al principio la vida escolar no fue tan difícil, tenía a dos estupendos amigos de mi lado. primero estaba brooke, ella es la chica más dulce y leal que jamás haya conocido. nos conocimos en segundo grado luego de que alguien le pegara un chicle en el cabello y yo me la encontrara llorando en el lavabo. le ayudé a quitarse el chicle y la peine para que no se le notara el pelón que le hice. desde ese entonces que no nos hemos separado.

El hecho es que brooke es una artista, una real. desborda talento por todos sus poros; su cuarto está lleno de sus pinturas y dibujos, y juro que es lo mas hermoso que he visto. su oportunidad llegó el año pasado, cuando ganó una beca para estudiar en una escuela de arte en la ciudad. ahora solo nos vemos los fines de semanas y en las vacaciones., pero siempre nos estamos escribiendo para mantenernos en contacto. me tiene muy orgullosa todo lo que ha logrado, se merece todo esto y más, pero aun así extraño tenerla conmigo en la escuela.

El único chico con el que tengo contacto es Jake, mi mejor amigo. Los otros no están interesados en hablar conmigo, y es probable que si con Jake no nos conociéramos desde el jardín de niños. él tampoco querría ser mi amigo.

Vivimos a cuatro casas uno del otro, lo cual es genial, ya que cuando éramos pequeños siempre salíamos a andar en bici juntos, al cine o a comer en Pock's. Su vida ha sido muy difícil, su padre los abandonó cuando tenía 14 años, luego que a su madre le diagnosticaran una grave enfermedad que la dejó postrada en su cama. Luego de eso él ha tenido que hacerse cargo de la casa, de su madre y de su hermano pequeño. Es por eso que dejó la escuela para comenzar a trabajar. Es un chico realmente admirable y valiente, y es que a pesar de todo el caos que hay en su vida, siempre está dispuesto a sonreír y apoyar al resto. 

La mayoría de los chicos de mi escuela (si no es que todos), son unos completos patanes. Yo solo los ignoraba y no le tomaba mayor importancia a gente que no se lo merecía, a parte de que  ellos eran solo secuaces de los hermanos Walker, que solo se empeñaban en hacer mi vida escolar miserable. 

De todas formas nunca he estado interesada en uno de ellos, Ni siquiera he  estado enamorada. No piensen que no tengo sentimientos, también soy humana. Se que es algo estúpido pero  tengo una debilidad por Timothee Chalamet. He visto cada una de sus películas. Tampoco exageren no es que este obsesionada con el o algo por el estilo, En todo caso que culpa tendría una chica de enamorarse de alguien como Timothee, sobre todo cuando los chicos a tu alrededor son unos simios. Me da vergüenza admitirlo pero tengo el casillero lleno de fotos de el.

Un día después de clases de educación física, me estaba cambiando en los vestidores y deje mi casillero abierto, justo cuando entra Lydia y ve mi collage de fotos de Timothee, obviamente se burlo.

—Que es todo eso, freak.

Dijo mientras su ejercito de taradas se reía. Ni siquiera es gracioso, bueno ellas la alaban por cualquier cosa que diga

Para mi sorpresa, cuando llegue al día siguiente había imágenes photoshopeadas mías con Timothee, donde me veía como una loca psicópata. Estaban pegadas por toda la escuela, todos se reían y hacían bromas sobre mi , era lo peor que me habían hecho me habían humillado completamente, estaba furiosa. Quien mas que los hermanos Walker pudo haber sido, me dirigí rápidamente a la cafetería donde a esa hora estaban siempre Lydia y Steve. Cuando llegue todos me estaban viendo, debí haber estado roja de rabia. Lydia me sonrió.

—Miren quien llego ¡nuestra enamorada! ¿No te cansas de ser tan ridícula?

Caminé en su dirección, ella, su hermano y sus amigas plásticas estaban a punto de sentarse en la mesa de los populares. Me acerqué a ella para susurrar en su oído:

—Saca todas la fotos ahora o les diré a todos su secreto.

Lydia esbozó una mueca de desprecio, arrugando su pequeña nariz. en un rápido movimiento, volcó su bandeja de comida sobre mí.

—Es la palabra mía contra la tuya, rarita —Todos en la cafetería estallaron en gritos de asombro y una que otra risita malintencionada. —Yo que tu me voy a limpiar, porque te ves asquerosa... Bueno, más de lo normal.