🌹 Fragmentos que nos relataran el día a día de Obito y Kakashi como ninjas de Konoha. El día a día como rivales, amigos y finalmente enamorados. Fragmentos que nos contarán cómo fue surgiendo el amor entre estos dos locos que se aman incondicionalm...
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Era un día muy tranquilo dentro de la Aldea Oculta de la Hoja.
El sol se encontraba en lo más alto del cielo despejado, otorgándole al ambiente esa calidez que tanto caracterizaba al país del fuego. Sobre todo, en las épocas de primavera. Los pájaros cantaban, los niños se dirigían entusiasmados a la Academia y los equipos comenzaban a reunirse en los campos de entrenamiento para seguir con sus prácticas. Las calles repletas de civiles y ninjas que entraban y salían de las tiendas. El barullo adueñándose del silencio y haciéndose eco por cada rincón de ese rústica villa. Trabajo por aquí, misiones por allá.
En definitiva, era un día como cualquier otro.
- ¡Obito!
O al menos, para la gran mayoría.
- ¿Lo encontraron? - preguntó un rubio alto y de ojos llamativamente azules. El adulto responsable del equipo siete y que había perdido a uno de sus alumnos. El más escurridizo e hiperactivo de los tres.
El único mejor dicho.
- No. - contestaron ambos adolescentes. Una intranquila por no saber donde se encontraba metido su mejor amigo y el otro irritado por la intensa e innecesaria -a su parecer - búsqueda.
- Sensei...-habló esta vez el joven peliplateado con su típica expresión despreocupada e indiferente. - ¿No es mejor que sigamos nosotros solos con el entrenamiento? De seguro, ese idiota de Obito se quedó dormido en algún lugar o se le olvidó que hoy se reunía el equipo.
- Kakashi-kun, no hables así sobre Obito. - exclamó la castaña antes de que su sensei lo hiciera. - Obito es impuntual y un poco despistado...
- ¿Un poco? - el Hatake elevó una ceja y Rin suspiró con pesadez. A veces el azabache tenía razón y Kakashi podía ser insoportable.
- Lo que quiero decir es que, a pesar de todo eso, Obito no desaparecería porque sí. Algo le sucedió. - junto sus manos cerca de su pecho, denotando su angustia. - No es normal y el que no lo hayamos encontrado aún, debería preocuparnos.
Kakashi desvió la mirada desinteresado, pero rápidamente la volvió a dirigir hacia su equipo cuando Minato habló.
- Rin tiene razón, Kakashi. - estaba serio y eso no era muy común en su maestro. Quizá, era momento de comenzar a preocuparse. - Esto no es normal en Obito y además, su abuela nos dijo que salió temprano en la mañana. Así que, debemos seguir buscando hasta encontrarlo y saber que está bien.
Al final, Kakashi terminó asintiendo y tras la orden de su sensei, se dispersaron para seguir la búsqueda por separados.
