<Is It Love? Mark> El EJECUTIVO

Capítulo 5

-¿Cómo la ve Doctor?.- Lisa le coqueteaba a mi médico de cabecera Joshua, un hombre de unos 30 años soltero, guapo, rubio y de origen alemán. 

-La veo bien, la medicina está funcionando.-

-Me siento bien, acabo de subir seis niveles.-

-Señorita Morgan, debe de cuidarse, recuerde que la medicina apenas está haciendo efecto en su corazón, no debe excederse.-

Lisa me miró.

-Doctor podría explicarme si el sexo es excederse.-

-¡Lisaaaaaa!.- ¡La mato, yo la mato!. 

-Señorita Lisa, si el sexo es continuo se podría decir que es excederse, así que hay que tener cuidado.- El Doctor me miró, podía sentir como la vergüenza me consumía en ese momento. 

-Gracias Doctor, intentaremos no excedernos.-

Que se dé por muerta...

-Gracias Doctor.- Dije finalmente. 

-De nada, señorita Morgan, esperemos no operar.- Era una advertencia, no una sugerencia. 

-De acuerdo.- 

-Nos vemos.- El Doctor tomó su maletín y nos dejó de nuevo solas. 

-Ese hombre será mío.-

-Ya basta Lisa, si quisiera algo contigo ya hubiera actuado.-

-Es tímido.- Rodé los ojos, mi amiga era algo terca con dicho Doctor, se obsesionó con él cuando lo conoció por primera vez. -Bueno ahora que estamos solas.- Su sonrisa pícara regresó. -Cuéntame que sucedió.-

Sonreí.

-Bueno, cuando me fui con él me llevó a dar un paseo nocturno.- Hice una pausa para intrigar un poco. -En un yate...-

-¡¿QUÉÉÉÉ?!.-

-Antes de que te emociones, el yate no es suyo, ni los carros, ni los lujos, se lo cuida a un amigo.-

-¡Oh!.-

-Él es... encantador, amable, Lisa me hizo el amor, fue...- Suspiré al recordar los momentos en que tocó y besó mi piel. -Jamás me sentí tan conectada con alguien en un momento de timidez.-

-Mor tus ojos brillan.- Deje de sonreír. Lisa tomó mis manos. -¿Te das cuenta que ese hombre puede ocupar el lugar de Matt?.- Desvíe la mirada. 

-Apenas lo conozco.- Dije en un susurro. 

-¿Y?, puedes conocerlo mejor, claro si él desea también.-

-Me dijo que quería volver a verme, me invitó a cenar esta noche.- Cerré los ojos, Lisa dio un pequeño grito. 

-¡Eso es excelente!.-

Lisa pasó toda la tarde conmigo, me ayudó a escoger el vestuario perfecto para sorprender a Dan. 

-Todo esta perfecto, confía en mí.- Me despedía de Lisa, debía de regresar a la comodidad de su casa. 

-Gracias.-

-Cruzaré los dedos para que no te excedas.-

-¡Lisa!.- Las dos comenzamos a reír.

-Adiós Mor.-

-Adios Lisa.- Espere a que tomara el elevador. Cuando entró a él regrese a mi apartamento. 

A las pocas horas el portero del edificio llamó a mi apartamento, Dan había llegado por mi. Con algo de timidez bajé a nuestro encuentro.