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Advertencias: lenguaje fuerte y smut.

Louis tomo su mochila y la colgó de su hombro. Su abuela no estaba del todo convencida con su decisión. Luego de haber asesinado de veinte apuñaladas a su niñera cuando él tenía cinco años su abuela y él escaparon a Holmes Chapel. Louis con la esperanza de conocer a más personas y su abuela con la esperanza de que nadie nunca los encuentre.

Doce años habían pasado y Louis quería salir de su casa, por más que él se escapaba a espaldas de su abuela por las noches él quería salir libremente, sin reproches por la mañana.

“¿Vas a ir vestido así?” preguntó su abuela mirando el atuendo de Louis, una chaqueta negra de cuero, una remera con un estampado de cualquier banda y pantalón y botas negras.

“Sí. Bueno ya me voy.” Besó a su abuela en la frente y siguió derecho a la puerta abriéndola en par en par y sin cerrarla se marchó.

Al llegar al instituto le echó una mirada de lejos. Ladrillos opacos y llenos de moho, ese lugar debería tener unos cincuenta años por la estructura. Sin esperar más avanzo y cientos de ojos se posaron en él. A todas las chicas que había merodeando por ahí se les hizo agua la boca al mirarlo. Algunos lo miraban extrañados y otros ya habían empezado a correr la voz del “nuevo”.

Una chica rubia y de ojos grandes celestes se puso en su camino, sonriéndole como si no hubiera un mañana.

“¡Hola! Veo que eres nuevo, ¿Cómo te llamas?” preguntó la chica con entusiasmo pero Louis ni se inmutó “¿Me has escuchado? Te estoy hablando, pido un poco de consideración y respeto” el chico miró el atuendo de la rubia y alzo las cejas.

“Con una falda y un top dudo que lo que quieras sea respeto, permiso.” Dijo el oji-azul moviendo suavemente a un lado a la rubia. Siguiendo su camino al salón.

“¡De todos modos no queríamos juntarnos contigo, rarito, fue cortesía!” grito la chica a sus espaldas y el sin darse la vuelta levantó su dedo del medio en dirección a la rubia.

Caminó un poco más y se encontró con el salón que buscaba. Abrió la puerta y la clase ya había comenzado. Lo primero que sus ojos vieron fue al chico de rizos y ojos verdes. Escuchaba que la profesora le hablaba a él pero él no podía quitar su mirada del aquel chico. El rizado comenzaba a ponerse nervioso ante su mirada y Louis lo notaba. Necesitaba saber más de él.

“Llega tarde señor…” buscó en su lista de alumnos y volvió a levantar la vista cuando lo encontró. “Tomlinson” Louis asintió y pidió disculpas en un susurro que solo la profesora Manson pudo escuchar. Ella asintió entendiendo que al ser nuevo tardó en encontrar la clase. “Puede sentarse junto Styles que es el único asiento libre” dijo la mujer señalando al chico rizado que tanto le intrigaba. El oji-verde se puso colorado y tragó fuerte. Louis dio dos pasos y se sentó junto al chico. Puso su mochila en el suelo pero antes saco un cuaderno y algo para anotar.

La clase pasó y durante ella el rizado se la pasó temblando y mordiéndose el labio. No le inspiraba nada de confianza la manera en la que Louis lo miraba. Apenas tocó el timbre el oji-verde levanto sus cosas torpemente y quiso escapar del salón pero Louis lo detuvo.

“Oops” dijo Louis cuando se dio cuenta que asustó a Harry.

“Hola” susurró Harry.

“¿Cómo te llamas?” preguntó el oji-azul y el rizado vaciló en responder pero finalmente lo hizo.

“Harry” susurró con su ronca voz y Louis asintió.

Los dos jóvenes conversaron un poco más, Louis le sacó información al rizado. Resulta que Harry iba en todas sus clases.

I'm The Devil | Larry Stylinson | O.S |Donde viven las historias. Descúbrelo ahora