Secretos de Sangre

Capitulo 1

ISLA POV

-¿Qué te parece chica? Vamos a entrar a la universidad y enamorar unos cuantos idiotas populares con hormonas alborotadas para dejarlos con las ganas- me encantaba bromear con Gin, era mi mejor amiga desde que me mude a Alaska.

Nuestra amistad empezó algo rara ya que la consideraba alguien muy envidiosa hacia mí, por lo que se nunca le hablaba a nadie y siempre estaba callada hasta que yo llegue, fue algo instantáneo ya que llego a mi antes que nadie y espantaba a las demás niñas que se me acercaban, prácticamente la muy desgraciada me obligo a quererla y no la culpo ella me ayudo a seguir adelante.

Cuando tan solo tenía 13 años tuve que mudarme aquí, opte por huir de las mentiras que mi familia me decía día a día para excusar el por qué alguien con un alma tan asquerosa se había metido a mi casa a matar a mi familia. ¿Por qué mierda no estuve ahí? Seguramente mi capacidad para pelear habría servido de algo y si no para que entrene defensa personal desde los siete. Pero recuerdo la última vez que los vi y por esa razón nadie me quitara de la cabeza que sabían que algo pasaría.

Flash Back

-Mami no quiero ir- le decía mientras hacía pucheros y mi famosa sonrisita tentadora.

-No tienes elección eh decidido que te quedas con Helen toda la semana para prevenir- me decía con voz autoritaria a la par que me acariciaba la mejilla con su amor particular.

-¿Prevenir qué? ¿Las tonterías de papá? Venga ya estoy acostumbrada- le respondía con voz burlona, si algo tenia papá era que decía más de mil burradas para hacernos reír a todos.

-Nada de excusas, vete ya que te espera la tía Helen, mi niña te quiero más que a nada en el mundo nunca lo olvides. Adiós- me decía mientras sus ojos estaban llorosos no entendía nada todo sonó a una despedida.

-Adiós mami, también te quiero- respondí alegre mientras le daba un beso para ir con la tía Helen.

Fin de Flash Back

-Hablando a la Isla, hola hola- mi amiga me alborotaba la mano enfrente de la cara mientras me daba palmaditas en el cachete.

-Lo siento, de nuevo pensando en ese recuerdo estúpido- le conteste corriendo al baño para terminar de arreglarme.

Me encantaba como era, desde pequeña fui castaña clara con tonos rojizos, muy china, tengo ojos saltones color azul casi rey muy particulares según los doctores, mi piel es pálida como la arena de la playa, y siempre he sido de complexión delgada aunque me alimento por cinco. Gin también es hermosa, ella tiene el cabello negro, liso, tiene ojos verdes moco, y al igual que yo su piel es pálida, en la complexión somos idénticas claro que no como si fuéramos unos palitos andantes, tenemos culo y tetas y por la experiencia eso servía para que las chicas te tuvieran envidia y los chicos fueran como perros detrás de un hueso.

En fin, hoy entrabamos a la universidad después de cambiarnos de ciudad, no salimos de Alaska ya que nos hemos enamorado del frio de cada día y en particular amo la nieve y jugar con ella. Antes vivíamos en Tatana pero nos cambiamos al hermoso Sitka definitivamente este era nuestro sitio.

-Estoy lista ¿y tú?- me pregunta ansiosa mi mejor amiga, al darme el ultimo retoque de rímel en las pestañas volteo hacia ella y con una enorme sonrisa le indico que sí, que estoy lista para empezar algo nuevo. 

No subimos a nuestra camioneta, una enorme bola de nieve blanca que nos lleva a todos lados. Y si, el nombre lo eligió la loca de Gin, al llegar es inevitable ver que todos los alumnos se nos quedan mirando y es obvio si algo se es que donde quiera que vamos causamos impresión es natural y no es egocentrismo.