Lo ultimo que recordaba fue entrar al reino de las sombras y caer de espaldas al suelo. Vinculahierro estaba a su lado, se detuvo al notar, si es que era posible, que su amo no estaba en movimiento y se quedo allí quito sin moverse.
Salanar esperaba paciente su destino para morir una vez que el efecto del tomo acabase. Estuvo esperando y esperando hasta que empezó a notar algo extraño. Su apariencia volvió a la que poseía antes de liberar el poder de la muerte. Se levanto mientras inspeccionaba el lugar, el reino de las sombras era un lugar ilógico y abstracto. Vinculahierro había desaparecido, nunca había desobedecido una orden y mucho menos separarse de su maestro en cualquier circunstancia. Giro poco a poco su cabeza inspeccionando a su alrededor solo para ver una luz naranja y azul en diagonal en el horizonte. Salanar parpadeo un poco y se dio cuenta de que estaba en un desierto sin nada a la vista con solo esos dos colores. Un único paso y todo se volvió oscuridad, era como si las luces fueran apagadas abruptamente. Empezó a sentir una sensación de caída que aumentaba en intensidad hasta el punto en donde parecía flotar. Era un lugar en donde no había nada pero este lugar no era el reino de las sombras.
Horas después abrió los ojos solo para volver a estar en el suelo observando el cielo, un cielo de color rojo oscuro con lo que parecía una luna de color sangre. No había estrellas. Se incorporó solo para ver a su alrededor un bosque. Algo se revolvió en la maleza y Salanar viró su cabeza en esa dirección, un cervatillo con 3 cuernos se abrió paso a su lado ignorando a Salanar. Salanar abrió un poco su visión pues era la primera vez que presenciaba tal extraño animal.
Salanar: "Debería estar muerto... pero sigo vivo... " Una imagen junto con una frase le vino a su memoria --Tu destino esta marcado por el hombre de las escamas-- "El hombre de las escamas... . Si no hablaba de Volbar, entonces... ¿Quién seria ese hombre?" Dejo esos pensamientos a un lado buscando en sus recuerdos algo que definiera su situación actual. Algo le vino a la mente 'Aun recuerdo esa vez... mi señor me reveló que el día de su encarnación también seria la mía...' "No puedo invocar a Vinculahierro, la visibilidad es un problema y el cielo es desconocido... ¿Dónde estoy?" Salanar procedió a levantarse y su mano rozó algo metálico y vio su espada a su lado "Esto servirá... "
Al levantarse no pudo ver ni si quiera lo que había a sus pies. Salanar atravesó el suelo con el filo de su hoja "Reina de hielo... abraza lo que desees... y no lo sueltes nunca. Acepten su regalo y duerman para siempre... ¡Ventisca eterna!" Un aire espeso inundo el lugar. Alrededor de Salanar había un remolino, sus paso dejaban congelados todo lo que pisaba y tocaba. LA temperatura que rodeaba a Salanar bajo de forma bestial llegando tener hasta uno 80º bajo cero. A pesar de que congelaba todo lo que pisaba y tocaba, el aire mismo que envolvía a Salanar era suficiente para congelar los arboles que tenia cerca de él dejando un leve rastro en la dirección en donde iba. Eso le sirvió para obtener algo de visión debido al reflejo que emitía el hielo debido a la tenue luz de esa luna.
Durante horas estuvo caminando sin detenerse, en línea recta esperando algún final de ese tortuoso bosque. Al final encontró algo, un sitio donde la mayoría de los arboles estaban partidos a la mitad, arrancados de cuajo y algunos de ellos tenían arañazos con marcas de grandísimas garras. Parecía como si un tifón hubiera arrasado precisamente ese lugar. A lo lejos encontró una cueva con una apertura demasiado grande para un humano y dentro de esa cueva se escuchaban ronquidos, potentes ronquidos. Salanar se acercó y se colocó en una esquina de la entrada a la cueva, solo escuchaba unos ronquidos de algún monstruo pero con tal oscuridad era imposible ver lo que había dentro. Salanar se enfrentó a muchas criaturas de todo tipo... así que pensó --En algún momento deberá salir pero es mejor hacerlo ahora que esperar un tiempo el cual no poseo-- De forma precavida Salanar se coloco en el centro de la entrada de esa cueva y con su arma apuntó hacia dentro
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Salanar, el Jinete de la Muerte
Fanfiction... Salanar... Dijo una voz en el viento. ... Ser de desastres... la voz aumentaba mientras un remolino oscuro emergía cerca del caballero. ... Serás el pastor... Continuaba mientras una sombra enfermiza hacia aparición al lado del caballero arrodil...