Damn! (Jorey)

I

Ese pensamiento pasaba como un flash, iba y venía, tan solo atormentando las emociones de Corey, volviendolo loco.

Ya había pasado tiempo desde su última relación, se preguntaba si se sentía tan solo como para fijarse en su  amigo Joey.
No tenía sentido, él estaba seguro de ser heterosexual o al menos lo fue la mayor parte de su vida hasta ahora.

No sabía que había en esos ojos que lo hipnotizaban, tan fríos y penetrantes que se volvían brillantes y energéticos cuando sonreía.
Y su risa, su maldita risa era lo mejor del mundo, ni hablar de su voz y su respiración, él era simplemente perfecto.

¿Pero qué era lo que provocaba esas sensaciones? Solo quería sexo o lo admiraba por su increíble talento con la batería... O buscaba llenar ese vacío que le dejo su pasado...
O quizá eran sus facciones delgadas y corta estatura...
¿Qué mierda era?

— ey Corey... — exclamó Paul al notar a su compañero con la mente ida.

— ¡eh! ¿Qué pasó? — dijo Corey inmediatamente.

—  acabamos las grabaciones por hoy, vamos a ir por algo de beber, ¿Quieres acompañarnos? —

— ¿eh? No. Me iré a casa, estoy cansado —

Paul asintió inseguramente, mientras Corey se levantaba del sofá.

Poco después, retomando sus notas mentales, pensó que era mejor distraerse un rato de toda la confusión.

— bah... ¡que mierda! Ya llevo tiempo sin que se me duerman los labios —
Dice alzando la voz para luego tomar su chaqueta e ir detrás de los chicos.

— vaya, ya era hora — habló Shawn sarcásticamente.

Ciertamente, sus compañeros habían notado al número 8 algo extraño, aunque siempre hacia algo para acabar dejándolos en suposiciones.
De cualquier forma, parecía estar bien.
Sin embargo Joey no se quedaba conforme, pues era el más afectado con el nuevo comportamiento del mayor, aveces tan cordial y aveces tan frío, simplemente lo sacaba de sus casillas.
Por lo que dejó que los demás se adelantarán para hablar un rato con el vocalista.

— ¿pasa algo? —

— ¿sobre qué? — pregunto Taylor exaltado al escuchar a su amado.

— te noto algo raro — recalcó cruzando los brazos.

— ¿Raro? ¿A qué te refieres? — respondió nervioso.

— no lo sé, aveces eres tan amable aveces no...—

— oh... ¿Enserio? — el mayor llevó su mano derecha detrás de su nuca simulando rascarse — ni yo me había dado cuenta, perdón si te incomodó — diablos, no se percató que estaba siendo demasiado obvio.

El baterista lo miró por unos segundos, para luego hacer una mueca de satisfacción por su respuesta.

— está bien hermano, pero no me asustes así —

— si así de fácil te asustas ya me diste ideas — comento guiñando el ojo.

— no empieces Taylor — sonreía mientras aceleraba el paso.
Al mismo tiempo que corey le respondía con una sonrisa de estúpido.

¡Mierda! Pensaba el vocalista ¿Cómo era posible que se dejará manejar por sus emociones de esa forma?
Era obvio que no tenía oportunidad con su amigo, no podía dejar delatarse así.

Aunque... ¿Realmente no tenía posiblidad?
Es decir, ¿Qué diferencia podría tener el cortejar a una mujer que a un hombre?
El problema era que él no tenía experiencia en esto y además si Joey se sintió atacado con esas pequeñas señales, quién sabe como reaccionaría si comenzaba a coquetear con él enserio. Sin embargo no sabía exactamente lo que le molestó a Joey, el que fuera demasiado desinteresado o el que fuera cariñoso.

Si le molestaba la primera... ¿Podría significar interés? No... No puede basarse en solo suposiciones, si corey pisa mal mandaría al demonio la única relación que tiene con él.

¿Por qué esto están difícil?

¡Con un demonio! ¡Corey deja de pensar maldita sea!

Esa plática introspectiva no le dejo ver cuándo subió al auto ni mucho menos cuando llegaron al bar.
Lo único que él quería en ese momento es mandar al infierno todo.
Salió del auto y entró al establecimiento como un niño a una juguetería.

Cuando todos estuvieron dentro, solo hablaban sobre el nuevo álbum y mierdas de negocios que al número 8 no le importaba por el momento.

Se alejo de los demás para beber como si de agua se tratase, igual ya no le importaba cuánto podría gastar.

Luego de unas horas dejando al vocalista sin supervisión, el aludido comenzó a crear estragos en el bar, los chicos lo notaron inmediatamente al escuchar la jocosa risa y los gritos de Corey.
Shawn suspiro moviendo su cabeza de un lado a otro en gesto de desaprobación.
Mick fue el primero en levantarse, en poco tiempo encontró a su idiota compañero peleando con un sujeto en una de las mesas de la parte de atrás.

Le tomó el hombro, luego lo volteo de frente a él.

— corey ¿Quieres calmarte de una maldita vez? — exigió el guitarrista.

— ¡Comeme está Thomson hijo de puta! — grito el número 8 alzando el dedo anular.

Mick en un abrir y cerrar de ojos arrastró al ebrio del cuello de la camisa mientras esté lanzaba manotazos e insultos casi murmurados.

— tenemos que llevarlo a casa antes de que cause más problemas — dijo el número 7 llegando a la mesa donde estaban los demás.

— hey Joey creo que eres el que menos ha tomado — dijo Fehn volteando la mirada hacia el baterista.

— ¡Suéltame de una puta vez! ¡Puedo manejar perfectamente! — grito Taylor de nuevo.

— Vámonos antes de que me colme la maldita paciencia — dijo Jordison  levantándose de su asiento.

—  ¡Lo que tu digas amor! — exclamó él vocalista frunciendo sus labios.
A lo que el baterista respondió rodando los ojos dejando su parte de la paga en la mesa.

Mick fue detrás del menor hacía la salida jalando al necio borracho.

— ¿estás seguro de que puedes manejarlo solo? Corey puede ponerse como un animal rabioso — angustió el guitarrista mientras ayudaba al mencionado a ponerse el cinturón de seguridad.

— bueno... Por ahora está tranquilo así que no hay problema —

— está bien... Regresaré con los chicos para discutir la rítmica, cuídate y si te es posible cuídalo hasta que se cansé — añadió mick cerrando la puerta del auto.

— de acuerdo — asintió.