Capítulo 66

394 67 10
                                    

Reborn estaba disfrutando de la tortu-musical y teatro de las pobres almas en desgracia bajo su dominio. Solo faltaba que volviera el tondo de su hijo y trajera lo que le pidió. No había mejor forma de disfrutar de la desgracia y-

- Aquí tiene amo, tal y como lo pidió. – Ah, allí estaba. – Que lo disfrute~

Había hecho un gran trabajo en el futuro, un gran trabajo. El chico frente a él estaba lo suficientemente camuflado para no solo mezclarse y que no se dieran cuenta, sino que en un par de movimientos podía volver a ser quien era o pasar a otra persona. Es decir, tenía el equilibrio y versatilidad perfectos, cosa que no era tan sencillo de hacer. También tenía la distracción y el cambio de personalidad bien a la medida. Era una lástima que no se pudiera engañar al mejor asesino a sueldo del mundo, pero de resto…

- Estoy bastante seguro de que no pedí eso. – “Eso” se ofendió, por supuesto.

- ¿Cómo no estas feliz de verme Reborn? – Si bien era bueno y todo ver que ya había regresado, sin percances y con nueva, más le valía útil, información, no estaba contento de verlo justo ahora y menos así.

- Tienes a mi sirvienta. – A pesar de decir esto y arquear una ceja, como si eso explicara todo, lo que en verdad pasaba por su cabeza era algo muy distinto.

Todo podía resumirse en una pregunta: ¿que había hecho Dino para que Tsuna decidiera cobrárselas de esta forma?, lo más suave seria-

- Bueno, cuando llegue ya Luce-chan estaba apegada a mi… - Dino trago profundamente ante la mirada escalofriante y el repentino escalofrió que surgió ante el nombre de la chica que estaba muy apegada en su brazo y de sonrisitas. – Y bueno, no quiero hacer sentir mal a una bella dama… - Detrás de Dino, Romario bajo la cabeza y se cubrió los ojos. Hace tiempo que Romario sabía que a su jefe no le deparaba nada bueno, desde el momento en que su hermanito se apegó a su brazo y comenzó a actuar como una colegiala enamorada. – No sabía que era tuya, lo siento mucho sensei. 

Olviden lo más suave, pasemos a máximo.

- Tienes un nuevo y divertido entrenamiento a partir de ayer. – Un segundo más tarde en bajar la cabeza y quizás no la tuviera.

- ¡¿Pero que hice?! – Mejor pregunta: ¿que hizo tu yo futuro para que Tsuna te marcara por muerto? - ¡Apenas voy llegando! – Unos cuantos hoyos le terminaría de asentar el mensaje.

- Ser un degenerado. – Era lo único que se le ocurría con lo poco que tenía para trabajar. 

Si no entendió con la lluvia de disparos, no entendería con nada. Ignorando el leve susto del resto de la gente que ahora se reía porque creían que todo era un juego, Dino cayo y rodo cerca de la puerta mientras huía, Romario y sus hombres justo detrás. Más tarde arreglaría cuentas con él, por ahora…

- ¿Se propaso contigo? – La alegría y el buen humor, que le recordaba de inmediato a Nana solo por la forma en la que “Luce” obviaba lo que acaba de ocurrir justo en frente de ella diciendo que no sabía que el señor Dino era tan bueno con los niños, no lo engañaba.

Ante la pregunta la sonrisa vacilo por una fracción de segundo y esa era toda la respuesta que necesitaba. Era un riesgo del oficio, ni siquiera se necesitaba hacerse pasar por nadie para que pasara, pero alguien conocido… Bueno, ya lideraría con Dino. Estaba bastante seguro de que fue su versión futura, lo había visto coquetear con “Luce”, pero no se imaginó algo así. Eso no se hacía, menos con una dama…

- ¿Por qué “Luce”? – Tsuna debía de saber-

- Es un bonito nombre. – Tsuna había basado esta chica en su madre, no había duda. Por Dios, ¿cómo los demás no se habían dado cuenta? – Creí que te gustaría, Reborn-sama. - Un tono de ensoñación y Tsuna tenía el descaro de sonreírle y besarle la mejilla como si fuera un bebé. – Lo hizo para confirmar si era yo, sabe perfectamente que no me gusta. – Dicho esto, se levantó, agarro la bandeja y comenzó a tomar los platos sucios, tarareando como si nada. 

Family of the PastDonde viven las historias. Descúbrelo ahora