Dos Almas

Perseguida: Parte 1.

Estaba lloviendo y era de noche, no tan agradable ya que las gotas hacían que las ventanas sonaran y no se podía dormir bien.

Auton comenzó a molestar a la gente de tren, podía ver su perspectiva, un hombre comenzó a tiritar por el frio, se le cayo el vaso con café a otro hombre y finalmente hizo que la revista de una mujer volara.

Sentí mi mochila caer en mis piernas, despertando de golpe.

-Suficiente Auton!-dije en un susurró, claro, un tanto fuerte.-¡Déjame dormir!-deje mi mochila en su sitio para luego tratar de adentrarme al sueño de nuevo. Pero no, joder Auton, pense. La mochila cayó de nuevo.-¡Auton!- reclame para volver a dormirme.

Dije que..- lo ultimo no fue audible, dirigí mi vista hacía la ventana y se veían los oficiales. - Mierda.. - susurré y noté como entraban, me senté y comencé a ver la ventana, como si nada pasará.

-¡Buenas! - dijo un agente. - Control de rutina, ¿Puedo ver sus identificaciones? - Me levante y corrí inmediatamente y el grito hizo que parara. - Señora, vuelva a su lugar, por favor. -- baje la mirada y me quede allí por un rato.

- Joder, es ella ¡ES ELLA! - Gritó otro agente, al primer grito, salí corriendo de allí, saltando cualquier obstáculo que se me pusiera en frente.

Apreté el botón para abrir la puerta del pasillo, el tren se movía demasiado, casi hasta caerme, logre ver una pequeña mesa con ruedas, la cogi y pase por el lado dejándola como estaba, haciendo que esto se dificulte más para la policía.

Vi una maleta, caí inmediatamente, respiré agitada, Dios, maldito tren, maldito día, maldito día en el que llegaste al mundo Auton, pensé.

Me levante lo más rápido que pude, corrí y corrí por los pasillos, sentí dos manos bastante fuertes que me cogieron por los hombros, moví mi cabeza de manera fuerte hacía atrás, golpeándolo en la nariz y dejando que mi chaqueta ya no estuviera en mi cuerpo.

Empuje a un hombre y salí por la ultima puerta, me dirigí hacía unas ventanas, me acerqué y trate de abrirlas pero no había caso.

- ¡Rápido Auton! - grité desesperada, - ¡Rompe la ventana! - Los pedazos de esta salieron disparados, unos pocos hacía mi y otros hacía el exterior.

Mi gorro ya no estaba en mi cabeza, con el viento del tren había salido volando, miré hacía abajo para ver donde estábamos, Puro bosque, fácil para perderse, pensé.

Me subí por la ventana y comencé a moverme lo más rápido posible para poder llegar al techo. Sentí unas manos nuevamente en mis piernas y luego en mi cadera, los policías me habían atrapado.

Pensé que estaba muerta.

Trate de golpearlo, intento fallido, me dejo en el suelo pero lo golpeé con el puño en la cara, dañándole más la nariz.

Corrí hacía el otro y le golpeé en la entrepierna, haciendo que cayera al suelo. Iba a salir, lo iba a lograr, pero, me encontré con más oficiales.

- ¡Alto, o disparo! - gritó uno de estos, no lo dude más, corrí en dirección contraría y entré a uno de los baños, cerrándolo con llave.

Me subí a la tapa de el váter y trate de abrir una de las pequeñas compuertas que había en el techo, golpeé y golpeé, no había ninguna manera de abrirla.

- ¡Ábrela Auton! - ante mi obligación hacía el, la compuerta se fue, dejándome una libre y exitosa salida.

Salí de aquel baño y ahora estaba en el techo, si saltaba, estaba seguro que podría morir, noté como los policías subían, ¿Tanto era el afán a mi?

Uno me cogió de los pies, pateé, haciéndolo caer.

Ya estaban todos de pies, rodeándome, mi respiración fue agitada, la pierna de uno fue hacía mi estomago, pero no lo logro, cogi su pierna y la doble, haciendo que este se balanceara en la punta del tren.

El puño de otro fue hacía mi cara, cogi sus manos e hice que se golpeará. ¡Gracias ejercito!

Me puse en defensa, ante todo golpe que tratarán de hacerme.

Noté que me agarraron por el estomago y me levantaron, al hacer eso, con mis dos piernas las impulse haciendo que pateara a un policía, para luego con mi cabeza golpear la frente de otro.

Golpes y más golpes entre todos, esto era realmente como una película de acción.

Todos se levantaron, ahora si, me tenían rodeada, iba ir a la cárcel, cadena perpetua.

Miré hacía el lado y ahí estaba, seguía ahí, el aquel bosque que había nombrado, grité, con todas mis fuerzas posibles.

- ¡AYÚDAME AUTON! - y luego de eso, salté del tren, teniendo el "campo de fuerza" que Auton me otorgaba cada vez que quería.

Tenía miedo, sentía esta escena en cámara lenta, yo, saltando de allí, con miedo, con la posibilidad de salir muerta, pero no, caí, bien, como nunca. Estaba bien, claro, un dolor en la pierna, pero estaba bien.

Sentí las vibraciones de Auton en mi pierna, una pequeña sonrisa salió de mi rostro.
-Bien, bien, bien...- Me levante con mucho cuidado, con el pequeño dolor que tenía en la pierna. Las vibraciones retumbaron en mi cabeza. - Si, lo sé. - le respondí a Auton. -debemos salir de aquí antes de que regresen.
Me adentré el bosque, ¿Quien sabe con que me encontraré o con que personas me encontraré? Auton estará conmigo por ahora.

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Hola siento haber tardado tanto en publicar un nuevo capítulo pero ahora espero subir mas mucho mas seguidos.
Comentarme si os ha gustado, darle a la estrellita, y agregarlo a la biblioteca.
Que le pasara a luna????