Padres Primerizos 『Kookmin』☪adapt.

Extra #1

—Estoy jodidamente aburrido.

Asentí con lentitud, indicándole a mi amigo que yo me encontraba en la misma situación. Las clases se habían vuelto una porquería y todos estábamos de acuerdo en eso. Pero tristemente, aún nos faltaban poco más de dos meses para poder disfrutar de nuestras vacaciones, por lo que no nos quedaba nada más que soportar las clases. No había opción.

Y para que todo sea —nótese mi sarcasmo— aún mejor, mi mente se la pasaba vagando de manera constante y no me ayudaba en absoluto; por culpa de esto, me resultaba aún más complicado concentrarme o siquiera fingir que estaba prestando atención a lo que el profesor decía, y siempre terminaban regañándome.

Quizás hablar con alguien me ayude.

—Oye, Taehyung...

— ¿Qué sucede? —habló con cansancio y pesadez.

—Me gusta alguien.

—Oh, eso es genial —sonrió de lado, aun manteniéndose recostado sobre el suelo y con los ojos cerrados—. Me alegro por ti, hyung.

—Sí, bueno...es que...—suspiré sonoramente, antes de proseguir y confesarle mi secreto. Confiaba muchísimo en él, pero eso no evitaba que un escalofrío recorriera mi cuerpo—. Me gusta un chico.

Noté cómo Taehyung abría sus ojos y se sentaba bruscamente, para después posar su mirada incrédula en mí. Él no decía nada, se limitaba a penetrarme con su mirada. Yo me encogí un poco en mi lugar y mordí mi lengua, aunque sin mucha fuerza.

— ¿Te gusta un chico?

Asentí lentamente.

— ¿Hay algo de malo que en eso? —pregunté con algo de nerviosismo.

—Por supuesto que no —respondió, causando que yo me sintiera más relajado—. Además, no puedes esperar que me lo tome mal o algo similar en absoluto, porque eres consciente de lo gay que soy también—dijo con ironía y yo solté una risa—. Pero sí me ofende el estar enterándome de esto hoy, además de la forma repentina en la que me lo dijiste.

— ¿Lo siento? —hablé inseguro.

—Asunto resuelto —sonrió—. Pero ahora, Jimin-hyung, tienes que decirme quién es el chico que ha logrado cautivarte.

—Bueno...—me sentí aún más nervioso—. Es...

— ¡Jeon Jungkook!

El fuerte grito captó nuestra atención y la de varios alumnos más que estaban en el patio, por lo que mi amigo y yo volteamos. Logramos ver cómo el capitán del equipo de baloncesto, Kim Yugyeom, se acercaba al ya no tan novato jugador Jeon Jungkook, quien saludó al mayor.

Intercambiaron unas pocas palabras, antes de darse un breve abrazo y comenzar a caminar hacia —lo que yo supuse— el gimnasio, bajo la atenta mirada de todas las personas.

—Oh, por todos los cielos —la voz de Taehyung me trajo de nuevo a la realidad, causado que yo volviera a posar mi vista en él y me preguntara en qué momento me había perdido en mis pensamientos—. Tiene que ser una broma.

— ¿De qué hablas?

—El chico que te gusta es Jeon Jungkook.

En cuanto escuché y procesé lo que él acababa de decir, mi boca se abrió y miré con incredulidad a mi mejor amigo; quien ahora lucía mucho más eufórico que anteriormente, debido a que mi última reacción había confirmado sus sospechas.

— ¿Cómo demonios...? —mi voz se volvió un susurro.

—La forma en la que te pusiste, al oír su nombre de la boca de Yugyeom. Joder, fue un momento único —dijo—. Y ni hablar del brillo que adquirieron tus ojos, en cuanto lo pudiste ver —siguió relatando—. Además, también está el rubor que apareció en tus mejillas, junto a una estúpida y hermosa sonrisa de idiota enamorado.