—¿Estas si quiera escuchando lo que estoy diciéndote? —ladra la perra de Bertha Grey y automáticamente siento la necesidad de sacarle esos ojos azules de arpía que tiene, sin embargo, recuerdo que es la persona que paga mi sueldo desde hace dos años y opto por tranquilizarme.
Soy completamente consciente que soy una persona torpe y mi jefa ha sabido deducirlo en todo este tiempo, ¡pero oye!, desde la vez que hice el ridículo sin querer saliendo a la pasarela tratando de arreglar un detalle en uno de los conjuntos, aprendí la lección, ser más cuidadosa.
Fue la caída de pompas más dolorosa en la historia de las caídas de pompas. Me dolió estar en internet un mes entero, y más cuando las personas se acercaban a preguntarme si era la chica sentón. ¡Chica sentón!
Hago una mueca ante el recuero vergonzoso.
—Estúpidos zapatos baratos —pienso refunfuñando— Estúpido internet.
Y es que ¡Dios!, como es posible que tanto odio pueda estar en una persona, seguramente a Bertha lo que le falta es una buena noche de sexo y descontrol, igual que a mí. Pero esta mujer sabe desgastar tanto que me encuentro en alguna especie de abstinencia obligada. Resoplo.
Nueva tarea: conseguir un novio a mi jefa. Que los Dioses de la moda se amparen de ese pobre hombre.
—Claro que escuche —sonrio de manera fingida— Esto lo he organizado ya otras veces, puedo hacerme cargo.
—Esto es importante niña, si tú lo arruinas te juro que me encargare de que vivas en una caja de cartón lo que te queda de vida —me señala con su estirado dedo y yo me estremezco— Vendrá el dueño de la revista YK FASHION, lo quiero como nuestro patrocinador entonces todo debe salir a la perfección -dicho esto se da media vuelta y se va.
¡Por el culo de Shaw Méndez!
Si lo que pretendía era asustarme, lo logro. Sacudo mi cabeza y comienzo desesperadamente a buscar a Erin, mi morena mejor amiga. El encuentro con otras tres modelos y me acerco a paso apresurado.
Al llegar la tomo del brazo, me disculpo y la arrastro lejos.
—Oye necesito ese brazo —bromea.
—No la soporto, Bertha lleva amenazándome sobre este evento toda la semana y eso realmente me pone de nervios —muerdo mi labio.
—¡Uf!, seguro y es porque viene el increíblemente atractivo dueño de la revista YK, aparte de que esta para morirse, es millonario y puede llegar a ser agradable —sonríe, pero después parece pensarlo mejor porque hace una mueca un tanto graciosa— Claro, no me van los rubios, ni liarme con el mejor amigo de mi novio, pero, en fin, a Bertha le hace falta un novio.
—Si vuelvo a escuchar la revista YK moriré —declaro pasando las manos por mi cabello frustrada— Espera, ¿mejor amigo de Lucas?, ¿hablas de que el millonario es mejor amigo de tu novio?
—Mejor amigo de la infancia, Lucas ahora es la imagen de esa revista. Dios Caro vives debajo de una gran roca, se armó un escándalo de esa revista, antes era una fabulosa revista de chismes, un poco chiclosa a mi parecer —mira su manicura.
Me quedo pensando y no es que viva debajo de una roca, pero admito que las noticias actuales no han sido dignas de mis bellos ojos gracias al trabajo que Bertha me deja diario.
Bertha Grey es una famosa diseñadora de modas independiente, fue grandioso como construyo su propio imperio con su reconocida marca 'GREY', sin embargo, eso no le quita lo bruja y grosera que es.
Por casi dos años he dado mi vida como su asistente, a veces me pongo a pensar qué diablos estoy haciendo en mis casi 24 años aguantando a una persona así, pero realmente he aprendido muchas cosas en todo este tiempo.
ESTÁS LEYENDO
Arte en N.Y • [Nathan York]
RomanceLa vida personal y el trabajo no pueden mezclarse. Aquel fastidioso lema que portaba con orgullo el mismísimo Nathan York, quien a sus 27 años había entendido a lo largo de su vida, que las personas siempre buscan algo de él, dinero o favores; quie...